Vuelve
Lo imposible fue posible. Picasso vuelve a M¨¢laga. Hace ocho a?os casi nadie apostaba que alg¨²n d¨ªa M¨¢laga y con ella toda Andaluc¨ªa se vistiera de azul para recibir a Picasso. Esta tierra tan cicatera en otorgar parabienes y felicitaciones debe vestirse con sus mejores ropajes para dar al c¨¦sar lo que es del c¨¦sar. Bendita tozudez de una mujer incansable al desaliento, como Carmen Calvo, que con las bendiciones del Gobierno andaluz, la eterna confianza de su presidente, Manuel Chaves, y con el apoyo declarado, generoso y enorme de Carmen Jim¨¦nez, la directora del Museo de Picasso de M¨¢laga (MPM), hicieron posible que otra mujer, enamorada de M¨¢laga y sus gentes, de su pesca¨ªto y de su mar, Christine Picasso, cerraron el c¨ªrculo m¨¢gico de tres mujeres capaces de dar sentido a lo que en este fin de semana se inaugura.
Hoy todo son alabanzas al trabajo realizado, pero hay una larga historia de muchos desencuentros, ya superados. Un equipo cohesionado de Cultura y la gesti¨®n directa y eficaz de Luciano Alonso han hecho posible que toda M¨¢laga sienta como suyo a Picasso y su obra.
Con la aportaci¨®n de Bernard Picasso se ha cumplido la voluntad de su abuelo. Picasso ya no es un extra?o a los malague?os, si bien hay que recordar a aquel grupo de malague?os que en el a?o 1973, por estas fechas, se acercaron hasta la residencia francesa del pintor malague?o y le llevaron un ramo de rosas rojas, de la tierra. Y a quien fuera primer alcalde democr¨¢tico de M¨¢laga, el socialista Pedro Aparicio, que levant¨® la bandera picassiana con su casa natal en la plaza de La Merced. Y m¨¢s tarde, la popular Celia Villalobos y hoy, el actual alcalde Francisco de la Torre.
Nadie duda del impulso cultural y econ¨®mico que representar¨¢ el MPM para M¨¢laga y Andaluc¨ªa. Pero habr¨¢ que enterrar m¨¢s de un hacha de guerra y caminar todos por el mismo sendero. Se levantan voces pidiendo que Junta de Andaluc¨ªa y Ayuntamiento vayan de la mano en asuntos de Picasso, enterrando bander¨ªas. No es suficiente. En esta realidad, debe estar adem¨¢s y con fuerza, el sector turismo, la cultura, los empresarios. Todos, con Picasso.
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