Gabriel Cardona disecciona las miserias del ej¨¦rcito de Franco

"Franco y sus amigos se apropiaron de un Ej¨¦rcito que pertenec¨ªa a todos los espa?oles e hicieron que, en lugar de defender a los ciudadanos, constituyera un peligro para muchos de ellos". As¨ª inicia Gabriel Cardona el pr¨®logo de El gigante descalzo (Aguilar), el libro en el que analiza c¨®mo se comport¨®, sobrevivi¨® y se fue adaptando a los cambios el ej¨¦rcito que gan¨® la Guerra Civil y que fue fiel a las directrices que le marc¨® el dictador.

El odio y el desprecio por el enemigo fueron algunos de los rasgos que marcaron el comportamiento del ej¨¦rcito de Franco cuando se enfrent¨® al ej¨¦rcito de la Rep¨²blica. "Los trataban de piojosos", comenta Cardona, "con esa altaner¨ªa con que se portan los ricos respecto a los pobres". Cuando Franco gan¨® la guerra, y el 19 de mayo su ej¨¦rcito desfil¨® por Madrid, se iniciaba una nueva ¨¦poca. Es ¨¦se el periodo que Gabriel Cardona analiza en su libro, aquel en que el ej¨¦rcito se convirti¨® en la densa sombra que envolvi¨® a la dictadura, rindiendo culto a quien la encarnaba y desencadenando el terror entre los que no le eran afines.

"Era un ej¨¦rcito inmenso y al que le toc¨® pasar las penurias de la posguerra. En 1943, para hacerse una idea, la mitad del presupuesto estaba destinado a las instituciones armadas, y se consum¨ªa en m¨ªseros sueldos. No se redujeron sus efectivos, m¨¢s bien se intent¨® que todos los que hab¨ªan servido a Franco estuvieran de alguna manera colocados", explica Cardona, profesor de Historia Contempor¨¢nea en la Universidad de Barcelona, autor de numerosos libros y que fue militar de carrera -hasta el 23-F, en que abandon¨® el Ej¨¦rcito- y uno de los fundadores de la Uni¨®n Militar Democr¨¢tica.

Con la victoria lleg¨® la represi¨®n (40.000 v¨ªctimas, adem¨¢s de las no cuantificadas del maquis y los cerca de 100.000 que murieron en c¨¢rceles y campos de concentraci¨®n, explica en el libro). El nuevo r¨¦gimen se fund¨® en el mito de combatir el comunismo y se apoy¨® en la Iglesia y el Ej¨¦rcito. En este ¨²ltimo reinaba una disciplina desp¨®tica y su objetivo fue consolidar la dictadura.

Cardona aborda con una escritura ¨¢gil y amena todos los entresijos del ej¨¦rcito de Franco, contando detalles cotidianos y analizando las directrices que marcaron su desarrollo. Espa?a no intervino en la II Guerra Mundial -salvo el env¨ªo de la Divisi¨®n Azul-, y al terminar se qued¨® fuera de los grandes cambios tecnol¨®gicos que realizaron las instituciones armadas de los otros pa¨ªses.En los cincuenta llegaron los acuerdos con Estados Unidos. "Es curioso que la pol¨ªtica que sigue Aznar se parezca tanto a la que hizo Franco", comenta Cardona: "Enfrentamiento con Europa, amistad con el Papa y subordinaci¨®n a Estados Unidos".

Luego, Espa?a fue progresando, pero el Ej¨¦rcito se qued¨® estancado, con sus viejas costumbres y su incapacidad de adaptarse a los nuevos tiempos. "Quedan a¨²n pendientes muchos desaf¨ªos", explica Cardona, "es necesario ir a la ra¨ªz de los problemas". Seguramente, eso s¨®lo ser¨¢ posible cuando se conozca el pasado cercano y se destruya tanto t¨®pico enquistado en la vida corriente. Es lo que hace este libro necesario.