Las desgracias de un campe¨®n

Puede dar la sensaci¨®n de que a Carlos Sainz se le acumulan las desgracias. Sin embargo, ¨¦l siempre se defiende aduciendo que ha sido dos veces campe¨®n del mundo, cinco veces subcampe¨®n y que muchas otras ha estado luchando por el t¨ªtulo. Diecis¨¦is a?os en el Mundial dan para mucho. Es el piloto m¨¢s longevo, a sus 41 a?os, y uno de los pocos que siempre se ha mantenido en la ¨¦lite mundial. Pero tambi¨¦n es verdad que algunos t¨ªtulos se le han escapado por culpa de circunstancias que le han sobrepasado y que quedaban fuera de su control. En este sentido, el Rally de Gran Breta?a resulta un compendio de situaciones an¨®malas, entre las que destaca lo que le ocurri¨® en 1998 y que concluy¨® con el grito de "?arr¨¢ncalo, Carlos, por Dios!", lanzado por Luis Moya, ante la imposibilidad de poner en marcha el Toyota a falta de 300 metros para concluir el rally y ganar el t¨ªtulo mundial.

Sin embargo, el RAC Rally es rico en este tipo de situaciones. En 1991, Sainz acab¨® tercero despu¨¦s de que su Toyota sufriera un problema en la refrigeraci¨®n. En 1994, dej¨® el t¨ªtulo en manos de Didier Auriol, que acab¨® sexto, al salirse en una curva. En 1998, el problema de Sainz le vali¨® el t¨ªtulo a Makinen, que hab¨ªa abandonado y estaba ya camino de su casa. Y en 2001 sali¨® de la pista y atropell¨® a varios espectadores mal colocados. En su larga trayectoria Sainz las ha visto de todos los colores. En 1991, sufri¨® un accidente en Australia y dio seis vueltas de campana. En Catalu?a en 1991 no logr¨® poner en marcha el coche en el inicio de la segunda etapa y perdi¨® sus opciones de t¨ªtulo. En 1993 fue descalificado en el San Remo, cuando una verificaci¨®n en la gasolina desvel¨® un compuesto ilegal. En Kenia, en 1997, atropell¨® un impala. En 1999, en el San Remo sufri¨® un accidente y un ¨¢rbol entr¨® en el coche rozando la cabeza de Moya. Y en Australia, en 2000, intent¨® perder tiempo y par¨® en una zona prohibida, lo que le cost¨® ser descalificado.

Este tipo de cosas le han ocurrido a casi todos los pilotos. Todos tienen un palmar¨¦s brillante de desgracias. Pero no tan largo, ni en momentos tan cruciales como el del espa?ol. Sin embargo, eso no debe hacer olvidar que es uno de los m¨¢s laureados: ha disputado 178 rallies y ha acabado 88 veces en el podio, con 25 triunfos.