Roy A. Anderson, ex director de Lockheed
Roy A. Anderson (Ripon, California,1920), el presidente y director ejecutivo de la Lockheed Corporation que reconstruy¨® y estabiliz¨® la vacilante compa?¨ªa a finales de los setenta y principios de los ochenta, falleci¨® el pasado mes de octubre en su residencia de California, EE UU, a los 82 a?os.
Anderson comenz¨® su carrera en Lockheed como economista en 1956 y fue nombrado presidente y director ejecutivo en 1977, cuando la empresa estaba lastrada por esc¨¢ndalos pol¨ªticos y financieros que amenazaban su futuro, principalmente debido a unos informes que se?alaban que sus directivos hab¨ªan sobornado a altos cargos de los gobiernos de al menos 15 pa¨ªses extranjeros. En Jap¨®n, las acusaciones de soborno provocaron la destituci¨®n del primer ministro Kakuei Tanaka.
La compa?¨ªa ya se hab¨ªa visto forzada a negociar un fondo de garant¨ªa federal, algo que apenas ten¨ªa precedentes en aquella ¨¦poca. Una encuesta encargada por la empresa mostr¨® que el p¨²blico la asociaba m¨¢s con la mala gesti¨®n econ¨®mica que con los aviones o el material militar que hab¨ªan salido de sus cadenas de montaje.
Pero cuando se jubil¨® como director ejecutivo, Lockheed presentaba unos informes con un aumento continuado de los beneficios y hab¨ªa reanudado el pago de dividendos tras haber estado suspendido durante 15 a?os.
En la ¨²ltima reuni¨®n anual bajo su presidencia, pudo informar de que hab¨ªa logrado m¨¢s de 500 millones de d¨®lares en contratos para el programa gubernamental de Iniciativa de Defensa Estrat¨¦gica, conocido como la Guerra de las Galaxias, y que hab¨ªa una cantidad superior al doble en perspectiva. Sigui¨® siendo director hasta 1990 y presidente de honor desde 1987.
Tras jubilarse, centr¨® su actividad en grupos y causas c¨ªvicas, como el Music Center de Los ?ngeles, el Ej¨¦rcito de Salvaci¨®n y diversas iniciativas para reforzar a la polic¨ªa, las escuelas y otros servicios p¨²blicos de Los ?ngeles.
Anderson fue tambi¨¦n miembro del Consejo de Administraci¨®n de la Universidad de Stanford y del Occidental College. Junto con su esposa, que le sobrevive, fund¨® la c¨¢tedra de econ¨®micas de Stanford. En 1994 fue nombrado presidente de la Fundaci¨®n Weingart.-
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