Odio antisemita

Una veintena de muertos y m¨¢s de 200 heridos se cobr¨® ayer en Estambul el odio antisemita que una cierta buena conciencia quisiera dar por cancelado. Los atentados fueron asumidos por el Frente Islamista de Combatientes del Gran Oriente, grupo especializado en atacar hoteles, discotecas, bares, iglesias y otros s¨ªmbolos de la occidentalizaci¨®n de Turqu¨ªa. Las autoridades locales no decartan otras hip¨®tesis.

Las v¨ªctimas son en su mayor¨ªa ciudadanos turcos ajenos a la comunidad jud¨ªa, pero no hay duda de que el objetivo de los terroristas eran los cientos de miembros de esa comunidad que celebraban el sabath en las dos sinagogas atacadas. Una de ellas ya fue objeto de un atentado que ocasion¨® 22 muertos en 1986. Tambi¨¦n hay continuidad entre la matanza de ayer y atentados antijud¨ªos recientes en Marruecos y T¨²nez, en los que las v¨ªctimas fueron mayoritariamente ciudadanos marroqu¨ªes y turistas alemanes, respectivamente.

Para el terrorismo, la v¨ªctima no cuenta, y por eso es indiferente que se trate de objetivos buscados o imprevistos. Es la subjetividad del terrorista lo que convierte a la v¨ªctima en culpable, sea un turista, un transe¨²nte o... un jud¨ªo. ?O acaso es menos inocente o m¨¢s culpable un ciudadano jud¨ªo que reza en su sinagoga que un alem¨¢n de vacaciones en T¨²nez? La Liga ?rabe conden¨® ayer desde El Cairo los atentados, pero su secretario general responsabiliz¨® de los mismos a la pol¨ªtica israel¨ª.

Es un planteamiento inadmisible, aunque compartido por muchas personas; no s¨®lo en los pa¨ªses de cultura musulmana. Un reciente Eurobar¨®metro revelaba que el 60% de los europeos considera a Israel la principal amenaza para la paz mundial. El deslizamiento sutil desde la condena de la pol¨ªtica de Sharon a la de la existencia de Israel, y de la de ese Estado a la de todos los jud¨ªos en cualquier lugar del mundo es una alarmante manifestaci¨®n contempor¨¢nea del antisemitismo. Y tan condenable es la pretensi¨®n de Sharon de despachar las cr¨ªticas a su pol¨ªtica brutal contra los palestinos como un rebrote de antisemitismo, como ignorar que ese rebrote existe, y que lo alientan cada d¨ªa quienes sostienen que s¨®lo habr¨¢ paz cuando se destruya Israel. Todo fanatismo necesita pretextos; Sharon se los da a los que ayer asesinaron a decenas de personas en Estambul; pero ser¨ªa una perversi¨®n suponer que lo uno justifica lo otro y no denunciar que se trata de pretextos inaceptables.