Domoraud salva a un Espanyol diezmado

En un partido surrealista, con mucho teatro y trece tarjetas, un cabezazo de Domoraud le dio un triunfo lo m¨¢s ag¨®nico posible al Espanyol, y arruin¨® a un Sevilla reserv¨®n y sin chispa. La victoria, la primera del Espanyol en su estadio esta temporada, le permite entrever el final del largo t¨²nel en que lleva metido con el paup¨¦rrimo balance, a¨²n, de ocho puntos en 12 jornadas. La escena final, los jugadores del Espanyol abrazados en el centro del campo como si hubieran ganado la final de la Copa de Europa, y Joaqu¨ªn Caparr¨®s, el t¨¦cnico del Sevilla, expresando un monumental berrinche, lo dice todo.

El Sevilla, pese a las bajas y pese a que Mara?¨®n y Navas, debutaban en Primera, dio la impresi¨®n de haber podido ganar con la gorra. Pero su tibieza en ataque fue desesperante y la manera en que Reyes se conform¨® con sacar hasta una docena de faltas le condenaron a una derrota, cruel por el momento en que le sobrevino, pero aleccionadora por la forma en que se acomod¨® en el c¨¦sped.

Tal fue la displicencia sevillista que poca cosa import¨® que su rival quedara diezmado la ¨²ltima media hora, tras la expulsi¨®n de Lopo. Luis Fern¨¢ndez, adem¨¢s de un defensa vital como Soldevilla, ha recuperado a la vieja guardia y ha optado por un grupo que, sin alardes, le dan m¨¢s empaque y posibilidades, l¨¦ase De la Pe?a, Tamudo, Toni, Jordi y, su apuesta personal, el joven H¨¦ctor.