Juan Luis Galiardo interpreta el mon¨®logo 'Un hombre de suerte'

El espect¨¢culo, que Galiardo lleva gestando m¨¢s de un a?o, se estrenar¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 5 de diciembre dentro del Festival Internacional de Teatro de Cazorla (Ja¨¦n) y con ¨¦l el actor tiene previsto recorrer gran parte de la geograf¨ªa espa?ola "e internacional si se tercia".

Alonso de Santos confes¨® que en esta obra habla del misterio de vivir y por tanto tiene mucho de autobiogr¨¢fica: "S¨®lo si nos alejamos de nosotros mismos podemos ver, y burlarnos, de c¨®mo representamos ante el mundo nuestro absurdo y tonto papel", dice el autor, quien ha pretendido con esta obra entrar "en el misterio de esas zonas oscuras de la mente y sacarlas a la luz, para que todo se haga presente ante los ojos de los espectadores al levantarse el tel¨®n".

Garc¨ªa S¨¢nchez afirma que hay algo de cubismo teatral en esta obra: "Son como fragmentos alborotados de una memoria cargada de mala conciencia que adem¨¢s, por teatral, es fingida..., es como un mon¨®logo a varias voces", se?ala el director, quien asegura que ya sea pirandelliana o cubista esta obra es para un actor no convencional: "Galiardo aporta al montaje su condici¨®n de multifac¨¦tico. ?Es un gal¨¢n viejo?, ?un c¨®mico incipiente?, ?un Quijote unamuniano?, ?es la caricatura de s¨ª mismo o la cr¨ªtica de todos nosotros?".

Evangelista, responsable de la escenograf¨ªa, dijo que su trabajo se ha limitado a dejar de lado su propio criterio y seguir las indicaciones que ?rculo hab¨ªa dejado en el cartel que realiz¨® para la obra, as¨ª como en los bocetos de la escenograf¨ªa y el vestuario.

Galiardo, que transita en este mon¨®logo no s¨®lo por el personaje de un actor jubilado, sino por otros varios, se muestra encantado de hacer una larga gira sin tocar la capital espa?ola: "El sector empresarial son dos y el de la gorra, y si la cosa se pone complicada abriremos un teatro con unos amigos o montar¨¦ una carpa donde poder hacer un teatro de la palabra, de la comedia, del sainete", dice el actor, quien vive como una verdadera suerte el poder mostrar este trabajo "a una sociedad vapuleada, enga?ada, a la que venden cacas de la vaca... Hemos querido llevar a esta sociedad profundamente entristecida y permanentemente estafada lo que no tienen", concluy¨®.