Man Ray en Montparnasse
Estos d¨ªas puede verse en la Sala Fundaci¨®n Caja Vital L?atelier de Montparnasse, una magn¨ªfica exposici¨®n sobre los artistas que ocuparon este barrio parisino durante las primeras d¨¦cadas del siglo XX. Eran gentes de vida bohemia, unas veces bulliciosa otras marcada por la soledad y el tormento intelectual. Fren¨¦ticos y provocadores, llegaban de los pa¨ªses m¨¢s dispares: Jap¨®n, Rusia, Espa?a, EEUU, M¨¦xico y por supuesto de Francia, fueron algunos lugares de origen.
Entre ellos surgen creadores dispuestos a dejar atr¨¢s la representaci¨®n del mundo exterior, de las formas naturales, tal como ven¨ªa haci¨¦ndose hasta entonces. De esta manera rompen con numerosas tradiciones pl¨¢sticas del pasado. Se inclinan por el cubismo, el futurismo o la abstracci¨®n para dar paso a expresiones pl¨¢sticas inspiradas en la emoci¨®n, en lo on¨ªrico. Trastocan convenciones sociales y se convierten en aut¨¦nticos iniciadores del arte moderno, embri¨®n ineludible de las vanguardias cl¨¢sicas.
Entre estos creadores se encuadra la figura del fot¨®grafo Man Ray (Philadelf¨ªa 1890- Par¨ªs, 1976). En la b¨²squeda de nuevas formas expresivas descubre por azarosamente el fotograma que lo bautiza con su propio nombre: Rayograma. Ray como rayo de sol, dir¨ªa al respecto el escritor Andr¨¦ Bret¨®n. De esta forma, con esta novedad se erige en maestro incontestado de la luz y de la sombra. Mediante este recurso, sencillo en su realizaci¨®n, dec¨ªa llegar m¨¢s all¨¢ de la apariencia de los objetos, hasta encontrar un algo de su propia esencia y realidad. Su inter¨¦s por la experimentaci¨®n le lleva a desvelar el recurso de la solarizaci¨®n. De esta manera trasciende del aspecto documental de la fotograf¨ªa y se adentra en el universo del inconsciente y lo imaginario. Imbuido en el entorno art¨ªstico de Montparnasse el fot¨®grafo toma retratos de los personajes m¨¢s notables.
En Vitoria podemos ver algunos de ellos. Tenemos el Viol¨ªn de Ingres donde el autor busca una equivalencia de las curvas de una espalda desnuda de mujer con las del instrumento musical. Er¨®tica velada es otra mujer desnuda mostrando toda su sensualidad junto a la manivela de un t¨®rculo de estampar grabados en la que apoya una mano mientras con la otra, manchada de tinta hasta el codo, parece quitarse el sudor. El retrato de Lee Miller, puede encontrarse m¨¢s convencional, es un perfil iluminado con luces intensas que realzan duros contrastes entre el blanco y el negro, una matizaci¨®n sugerente. M¨¢s provocativas resultan dos composiciones de Kiki de Montparnasse; musa de numerosos artistas, sin ropa y bailando posa para Man Ray con toda la generosidad que ofrece su cuerpo.
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