El esp¨ªritu del coleccionista
El publicista Llu¨ªs Bassat habla en el IVAM de su pasi¨®n por el arte contempor¨¢neo y destaca las grandes posibilidades de Valencia
Llu¨ªs Bassat (Barcelona 1941) y su mujer se enamoraron de un cuadro de ?ngel Jov¨¦. Corr¨ªa el a?o 1965. Entonces ganaban 26.000 pesetas al mes y pagaban 15.000 de hipoteca. Muy apurado para desembolsar las 6.000 pesetas que costaba esa obra de color verde que ven¨ªa a representar la idea arquitect¨®nica de Jov¨¦ de que en la variedad y singularidad de las casas estaba el gusto de una urbanizaci¨®n. El artista propuso al popular publicista un pago mensual de 1.000 pesetas y as¨ª inici¨® Bassat su colecci¨®n particular de arte contempor¨¢neo. Lo cont¨® ayer en conversaci¨®n con este diario, minutos antes de impartir por la noche una conferencia en el IVAM con la que se cerr¨® el ciclo El arte de coleccionar.
El creador de lemas como Som sis milions de la Generalitat catalana y director de las ceremonias ol¨ªmpicas de Barcelona quiso dejar bien claro desde el principio que su colecci¨®n no es comparable a la de otros ponentes del ciclo; que su prop¨®sito no ha sido ni es acumular un gran n¨²mero de obras, m¨¢s o menos valiosas y caras, sino que ha dado rienda suelta a su pasi¨®n por el arte contempor¨¢neo y a su esp¨ªritu de coleccionista. Explic¨® que el arte de coleccionar es como un esp¨ªritu que te impregna; que te hace, por ejemplo, no desprenderte del antiguo molinillo de caf¨¦ de tu abuela, y que luego puedes ver en una tienda de anticuario.
Sostuvo a modo de consejo que "coleccionar es tambi¨¦n renunciar". "Nunca he comprado expresionismo, impresionismo o dada¨ªsmo, aunque me interesan mucho, pero no, no es para m¨ª, pero s¨ª el arte de mi ¨¦poca, de los artistas de mi edad", reconoci¨®.
Bassat conoci¨® a Mir¨® o Dal¨ª y guarda amistad con T¨¤pies, Guinovart o R¨¤fols-Casamada, por ejemplo. Coment¨® tambi¨¦n que ten¨ªa obra de artistas valencianos como Heras, Boix y Armengol, Joan Verd¨² y Ximo Lizama, entre otros. "Me interesa el proceso de coleccionar, el camino no tanto el resultado", reiter¨® el que fue candidato a la presidencia del Bar?a y responsable de la campa?a a la alcald¨ªa de Joan Maragall, adem¨¢s de dirigir en la actualidad la empresa Bassat & Ogilvy, que se ha encargado de la comunicaci¨®n de la Copa del Am¨¦rica, que se celebrar¨¢ en Valencia en 2007. De hecho, piensa abrir una oficina en la ciudad.
Se trata, as¨ª pues, de una personalidad con la que se puede hablar de m¨²ltiples temas de gran inter¨¦s y actualidad, si bien parece entusiasmarse especialmente cuando relata alguna an¨¦cdota relacionada con el arte, como en aquella ocasi¨®n que pint¨® un cuadro a medias con R¨¤fols-Casamada, fruto de una iniciativa social para recaudar dinero. No sab¨ªa muy bien c¨®mo contribuir y se llev¨® una de las flechas que encendi¨® el fuego ol¨ªmpico. El artista la pint¨® y dej¨® expresarse a Bassat, y despu¨¦s R¨¤fols-Casamada iba dando sus retoques. "Fue una experiencia ¨²nica", concluye. Al final, confes¨® que se dej¨® un dineral para comprar este cuadro en la subasta a petici¨®n de sus hijos.
Del Bar?a dice "estar vacunado" despu¨¦s de dos tentativas de presidir el club y de seguir escuchando lamentos de gente que no le vot¨® y que le asegura que ten¨ªa que haberlo hecho. Necesitaba desconectar, como ha hecho Guardiola, que le acaba de comentar que ahora en Qatar ha podido "desconectar". "'All¨ª, no llega ni EL PA?S', me dijo".
Sobre las recientes elecciones catalanas, Bassat se?al¨® que se ha demostrado que la gente ten¨ªa ganas de cambio, al tiempo que destac¨® el error de la campa?a de CiU al no incidir en que Artur Mas s¨ª que supone un aut¨¦ntico cambio generacional al tener 40 a?os. Respecto a la Copa del Am¨¦rica, el responsable de la comunicaci¨®n de la Expo 92 asegur¨® que Valencia tiene unas "posibilidades enormes" de convertirse en un n¨²cleo tur¨ªstico y econ¨®mico "mucho m¨¢s importante". A?adi¨® que si la ciudad (de la que resalt¨® la vertebraci¨®n verde del antiguo cauce) ya ha cambiado mucho, de aqu¨ª a cuatro a?os puede quedar irreconocible. "Estamos a tiempo", zanja.
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