Entrega de Zotoluco

La entrega y el oficio de Zotoluco son la base de su ¨¦xito. A su d¨¦bil primer adversario, hecho un poste lo lanz¨® con suavidad y quit¨® por ajustadas chicuelinas. En su valiente faena, retratando la muleta hizo embestir al tardo pero fijo oponente y con temple y mando lo tore¨®. En su sedoso muleteo destacaron sus series de profundos redondos y naturales en los que barri¨® la arena corriendo la mano a c¨¢mara lenta. A Golondrino, su segundo enemigo, con maestr¨ªa lo coloc¨® al caballo. Lo hizo acudir a la bayeta y acab¨® jugando con la fijeza y claridad del ejemplar. Su emotivo trasteo provoc¨® los gritos en el tendido de "torero, torero". Nuevamente su fallo con la toledana le cost¨® el bien merecido trofeo.

Con su primero, El Fandi desperdici¨® a Antiparro, un toro de carretilla. Eso s¨ª, puso de pie a la concurrencia con su espectacular estilo de banderillear caminando hacia a atr¨¢s (la moviola) y uno al viol¨ªn. En su muleteo, como la concurrencia estaba molesta empez¨® a gritar "toro, toro" porque, a juicio de ellos, la calidad de la res estaba por encima de la calidad del muleteo de El Fandi. No pudo con su incierto segundo y el animal termin¨® aburri¨¦ndose y escupi¨¦ndose de la suerte y¨¦ndose a barbear las tablas. Nunca lo pudo meter al enga?o. Con este ejemplar ni siquiera estuvo bien con los palitroques, que es su fuerte. Parte del p¨²blico sali¨® desilusionado de la actuaci¨®n de este diestro pues esperaban m¨¢s de ¨¦l.

Mala suerte tuvo Alejandro Amaya pues carg¨® con un lote ¨¢spero y peligroso. A su primer burel le aguant¨® las embestidas descompuestas y no pudo lucirse. Como Rodrigo Santos no pudo hacer su buen toreo, con su distraido primer corn¨²peta regal¨® el sobrero. ?ste fue fiero y el rejoneador mejor¨® su actuaci¨®n y llev¨® la emoci¨®n a los tendidos.