Fran?ois Rauber, compositor y arreglista
Fran?ois Rauber, arreglista, compositor, director de orquesta y pianista que puso su talento al servicio de la canci¨®n, y sobre todo de Jacques Brel, muri¨® el domingo 14 de diciembre en su domicilio parisino. Ten¨ªa 70 a?os.
Desconocido por el gran p¨²blico, pero muy respetado en el ambiente profesional, su nombre aparece en numerosas grabaciones de artistas cuyas letras y melod¨ªas destac¨® gracias a su conocimiento de la armon¨ªa. La lista entera ocupar¨ªa varias columnas: citemos, por ejemplo, a Juliette Greco, Barbara, Mouloudji, Moustaki, Adamo, Claude Nougaro, y tambi¨¦n Mireille Mathieu o Julio Iglesias...
Naci¨® el 19 de enero de 1933 en Neufch?teau, originario de Lorena. Estudiaba composici¨®n (en la clase de Tony Aubin) en el Conservatorio Nacional Superior de Par¨ªs cuando conoci¨® a Jacques Brel en 1956.
Por la noche, Fran?ois Rauber se ganaba la vida como pianista en el Trois Baudets, el teatro fundado por Jacques Canetti en 1947, de donde salieron Brassens y Guy B¨¦art, Gainsbourg y Juliette Gr¨¦co. Y por supuesto, Brel. Los dos hombres entablaron amistad. Fran?ois Rauber se convirti¨® en el pianista del cantante y firm¨® sus primeros arreglos, despu¨¦s de haberse entrenado con Michel Legrand.
En su opini¨®n, las primeras creaciones del Gran Jacques estaban a¨²n demasiado influidas por el esp¨ªritu ingenuo, y la utilizaci¨®n rudimentaria de la guitarra limitaba considerablemente las posibilidades arm¨®nicas. Por otra parte, sugiri¨® al belga que abandonara ese instrumento, una idea que result¨® muy provechosa en el escenario.
En 1958, los dos amigos conocieron, de nuevo en el Trois Baudets, al pianista G¨¦rard Jouannest. Fran?ois Rauber se dedic¨® entonces exclusivamente a la orquestaci¨®n. Este tr¨ªo ideal (el cantante, el pianista y compositor, el arreglista), al que se a?adi¨® m¨¢s tarde el acordeonista Jean Corti, escribi¨®, hasta la muerte de Brel en 1978, una de las m¨¢s brillantes p¨¢ginas de la canci¨®n francesa.
Junto a la obra de Brel, Fran?ois Rauber multiplic¨® sus colaboraciones. Para ORTF escribi¨® peque?as secuencias tem¨¢ticas y ligeras sin parar. Coautor de la hermosa m¨²sica de Sebastien (1965), la serie de televisi¨®n basada en la novela de C¨¦cilie Aubry, tambi¨¦n compuso para el cine, sobre todo para las pel¨ªculas en las que actuaba Brel, y en los dibujos animados Tint¨ªn y el lago de los tiburones y Tint¨ªn y el templo del Sol. Le gustaba escribir para los ni?os -el cuento de Andersen La pastora y el deshollinador-, el circo y el teatro. En 1987 colabor¨® con el teatro de Niza de Jacques Weber para el Conde de Montecristo, de Alejandro Dumas.
M¨²sico de variedades en el mejor sentido de la palabra, Fran?ois Rauber se negaba a que le encasillaran. Su credibilidad en el mundo de la m¨²sica cl¨¢sica era grande, pues hab¨ªa dirigido a los m¨²sicos de la ?pera de Par¨ªs, dirigido orquestas para el trompetista Maurice Andr¨¦ y el flautista Jean-Pierre Rampal. En 2002 public¨® conciertos para flauta, trompeta y piano.
Este esclavo del trabajo ignoraba ol¨ªmpicamente el ordenador y segu¨ªa componiendo con un l¨¢piz y grandes hojas de papel. Amigo fiel, aport¨® su contribuci¨®n a los ¨²ltimos ¨¢lbumes de Jacques Dutronc, Anne Sylvestre, Juliette Gr¨¦co y Colette Renard. De personalidad humilde y discreta, Rauber puso su vida al servicio de la m¨²sica con amor y humor.-
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