"Hay que comprender que sin empresas, no hay trabajadores"
"Una cosa detr¨¢s de la otra, si no se nos cae todo encima". As¨ª encara su nuevo cargo como consejero de Trabajo e Industria Josep Maria Ra?¨¦, de 49 a?os y desde los 22 militante de UGT, de cuya direcci¨®n ha formado parte hasta hace ocho. Se define como un "sindicalista en excedencia" y tiene el reto de "colocar a Catalu?a a la cabeza de la econom¨ªa del Estado, en la era de la sociedad de la informaci¨®n como lo fue en la era de la econom¨ªa basada en el sector industrial". Se declara especialmente inquieto por la falta de formaci¨®n de la poblaci¨®n empleada, el exceso de temporalidad, la flexibilidad entendida como precariedad y la siniestralidad laboral. Entre sus prioridades figuran mejorar la relaci¨®n con la industria y potenciar el Servicio de Empleo de Catalu?a para adaptarlo a las necesidades de las empresas y para dar formaci¨®n que facilite el acceso al empleo.
"Incentivaremos pactos que tiendan a las 35 horas a trav¨¦s de la negociaci¨®n colectiva"
"Si se llega tarde, no hay que subvencionar a empresas sin soluci¨®n, sino cerrarlas con orden"
Pregunta. Con su trayectoria sindical, ?las empresas tienen garantizado que tambi¨¦n las defender¨¢?
Respuesta. Cuando he sido diputado no he ejercido de sindicalista, y ahora menos. Hay que desempe?ar el papel que corresponde. Lo primero que hay que decir es que sin empresas no hay trabajadores. La cuesti¨®n es qu¨¦ tipo de relaci¨®n hay entre ellos dentro de la empresa. El modelo de relaciones laborales de los a?os ochenta se basaba en que por costes la empresa pod¨ªa competir. Era muy jerarquizado. Si queremos ir a otro modelo de competitividad tenemos que pasar a otro modelo de relaci¨®n laboral que incorpore gente capaz de adaptarse a los cambios, comprometida con la empresa. A cambio, esta gente espera estabilidad e inversi¨®n en formaci¨®n. Pedir inversi¨®n en formaci¨®n y estabilidad es defender al trabajador, pero la empresa que apueste por el futuro necesitar¨¢ hacerlo. Deben ganar los dos. Ambas partes deben intentar ponerse de acuerdo. La Administraci¨®n s¨®lo participa cuando una parte no respeta el marco legal.
P. ?Qu¨¦ significa en el siglo XXI reforzar la pol¨ªtica industrial?
R. Ayudar a las empresas a que la sociedad del conocimiento se incorpore a la modernizaci¨®n de los procesos y la producci¨®n de bienes y servicios. Esta nueva sociedad democratiza la informaci¨®n y las decisiones, se modifican las formas de organizaci¨®n. La Generalitat puede poner las bases para que esto sea posible. Hoy es un despilfarro que s¨®lo se aproveche de las personas su fuerza de trabajo.
P. ?Su antecesor no lo hizo?
R. Creo que poco. Se iba m¨¢s a remolque de los acontecimientos. No anunciaremos oficinas para anticipar crisis dos a?os despu¨¦s de que cierren empresas.
P. ?Es partidario de dar ayudas a una firma en crisis?
R. Si llegamos tarde para evitarlo, lo m¨¢s realista que podemos hacer con algunas compa?¨ªas es hacer un entierro de primera. No hay que subvencionar en un pozo sin fondo. Hay que buscar un acuerdo entre la empresa y los trabajadores para un cierre ordenado y trabajar deprisa para dar oportunidades de empleo en la zona. Pero si hay ocasi¨®n de ayudar a sectores con importancia estrat¨¦gica, ocupacional o territorial, debe aprovecharse para modernizarlos y sustituir una producci¨®n industrial por otra.
P. ?C¨®mo lograr¨¢n los acuerdos con multinacionales para que centren su actividad en la de valor a?adido frente a decisiones como las de Valeo o Lear?
R. Las multinacionales, cuando ubican sus centros productivos, tienen una serie de par¨¢metros como las comunicaciones o las infraestructuras. En eso debemos mejorar. Pero debe verse que el Gobierno de la Generalitat no quiere generar problemas, que ¨¦ste no sea un territorio conflictivo desde un punto de vista pol¨ªtico y s¨ª con un Gobierno pr¨®ximo con clara firmeza para asumir liderazgo. Hay empresas que pese a haber apostado en los ochenta por los costes m¨¢s bajos, han hecho los deberes y hoy son competitivas. Otras, no. Valeo o Lear no est¨¢n en crisis. S¨®lo decidieron irse. Es distinto.
P. Poco puede hacerse entonces.
R. Planteamos que asuman su responsabilidad social. Un adi¨®s a la brava no lo pondremos f¨¢cil.
P. ?No es discriminatorio dar prioridad en los contratos a las peque?as empresas y si se usa el catal¨¢n?
R. Son las pymes las que sufren una discriminaci¨®n. Planteamos una acci¨®n de compensaci¨®n positiva. Sobre el catal¨¢n, es bueno que el potencial de contrataci¨®n de la Generalitat ayude a desarrollar el uso social del catal¨¢n. Pero valorarlo con exclusividad ser¨ªa negativo. Sirve para ganar puntos.
P. ?Implantar¨¢n las 35 horas?
R. Hay que incentivar que haya acuerdos a trav¨¦s de la negociaci¨®n colectiva que tiendan a las 1.600 horas al a?o. Es algo progresivo y progresista. Cuando tengamos un pu?ado de empresas se podr¨¢ plantear la ley que recoja al descolgado. La realidad de la negociaci¨®n colectiva en Catalu?a es que est¨¢ m¨¢s cerca de las 1.600 horas que de la semana de 40 horas.
P. ?Qu¨¦ presupuesto dedicar¨¢n contra la siniestralidad?
R. Necesitamos m¨¢s recursos, pero no s¨®lo eso. Se ha hecho poca prevenci¨®n, no siempre de buena calidad. La forma de organizar el trabajo no tiene en cuenta la prevenci¨®n de riesgo desde el principio y la Administraci¨®n no se ha implicado con suficientes recursos y control. Hay empresas que hacen las cosas bien y otras no. Decididamente, vamos a buscar la reducci¨®n de la siniestralidad por la v¨ªa pol¨ªtica y por la punitiva para el que no cumpla. Pediremos el traspaso de inspectores. El Gobierno central debe entender que no pasa nada si ¨¦stos dependen de la Generalitat.
P. ?Qu¨¦ har¨¢n con la sentencia sobre el Forcem?
R. Nos da la raz¨®n, pero no nos da dinero. El Gobierno central debe tomar nota de que no puede repetir para 2004 lo que ha hecho en 2003. Las sentencias del Constitucional son obligatorias. Las reglas de juego est¨¢n fijadas. No s¨®lo para el pasado, sino para el futuro.
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