Enigmas de la tarifa el¨¦ctrica
Como casi todos los a?os desde 1996, el proceso de c¨¢lculo y decisi¨®n de la tarifa el¨¦ctrica para el ejercicio siguiente -2004 en este caso- abunda en sorpresas y motivos de perplejidad. Durante los ¨²ltimos ocho a?os el c¨¢lculo de la tarifa se viene ejecutando en la m¨¢s completa oscuridad, sin explicaciones neutrales sobre evoluci¨®n de costes ni ingresos, con la ¨²nica referencia p¨²blica de escenarios econ¨®micos m¨¢s o menos amplios -el IPC menos uno o dos puntos en la primera legislatura y la subida por debajo del 2% augurada en los ¨²ltimos dos ejercicios por el secretario de Estado, Jos¨¦ Folgado- y siempre adoptados sin explicaci¨®n previa.
Las sorpresas para 2004 vienen de la mano del Gobierno y de la Comisi¨®n Nacional de la Energ¨ªa (CNE). Meses atr¨¢s, Iberdrola, en su af¨¢n por socavar la posici¨®n de Endesa, confes¨® ante la CNE que las empresas el¨¦ctricas hab¨ªan cobrado m¨¢s de lo debido en concepto de CTC (costes de transici¨®n a la competencia), ese regalo de unos 8.000 millones de euros que regal¨® Josep Piqu¨¦ a las compa?¨ªas el¨¦ctricas para compensar una liberalizaci¨®n que no se ha producido. Las cuentas de Iberdrola incurr¨ªan en cierta truculencia (ven¨ªan a decir que a diciembre de 2002 las el¨¦ctricas se hab¨ªan llevado 1.600 millones de euros m¨¢s de lo debido), pero su argumento fundamental era correcto. La CNE, pillada en fuera de juego, se apresur¨® a explicar que no era para tanto, que el exceso retirado (siempre a cuenta del usuario) pod¨ªa estar en torno a los 900 millones de euros.
Ahora que est¨¢ a punto de concluir la moratoria de sanciones, Econom¨ªa aprueba 50 millones de euros para evitar los apagones
Son cantidades respetables. En t¨¦rminos comparativos, el exceso equivale al 6% de la tarifa. De forma que, atendiendo al dinero percibido de antemano bien podr¨ªa haber sugerido la CNE una rebaja de las tarifas equivalente o similar a ese dinero adelantado por la v¨ªa de los hechos consumados. Pero no, la CNE se apresur¨® -todav¨ªa m¨¢s que cuando recalcul¨® las cuentas de Iberdrola-, a proponer que el excedente de CTC cobrado se descuente de la cantidad final percibida, que acabar¨¢ de amortizarse a finales de esta d¨¦cada. ?Ser¨¢ la CNE la encargada de vigilar el cumplimiento de las cuentas?
Puede apreciarse en este episodio el celo de la Comisi¨®n, siempre al servicio del consumidor. La CNE puede escudarse a duras penas en el hecho de que su informe no es vinculante. La Secretar¨ªa de Estado de la Energ¨ªa, ni eso. En fin, la propuesta final es que las tarifas suban el 1,5% para los consumidores dom¨¦sticos y el 1,6% para las industrias durante 2004. La inc¨®gnita, que puede despejarse f¨¢cilmente, es si la Administraci¨®n o el organismo regulador habr¨¢n previsto los procedimientos necesarios para que no vuelvan a producirse tan suculentos adelantos de cobro.
Las zozobras el¨¦ctricas -sobre todo para los que pagan el recibo de la luz- no acaban en el caso de los CTC. De repente, la opini¨®n p¨²blica fue informada de que el decreto de tarifas inclu¨ªa 50 millones de euros que deber¨¢n sufragar los usuarios para que las compa?¨ªas el¨¦ctricas puedan mejorar la calidad del suministro. El pretexto se vende de forma magn¨ªfica; es digno concepto de otras con tanta riqueza sem¨¢ntica como costes de transici¨®n a la competencia o garant¨ªa de potencia que tan eficazmente han cubierto los aumentos de ingresos de las el¨¦ctricas muy por encima de las exigencias y condiciones del mercado.
En este caso resulta pertinente una reflexi¨®n a?adida. Resulta que el Gobierno permiti¨® a las empresas aplazar la aplicaci¨®n del reglamento de sanciones por baja calidad del suministro. De forma que muchos pueblos y ciudades han tenido que sufrir apagones el¨¦ctricos sin que los consumidores hayan podido hacer valer el precio que han pagado por el servicio para exigir da?os y perjuicios. Es verdad que los apagones no tienen en Espa?a car¨¢cter catastr¨®fico, gracias sobre todo a las inversiones en transporte de electricidad que se aplicaron durante el periodo en el que Red El¨¦ctrica fue una empresa p¨²blica.
Bien, pues ahora que est¨¢ a punto de concluir la moratoria de sanciones, el Ministerio de Econom¨ªa se descuelga con 50 millones de euros para evitar los apagones. Todos los flancos cubiertos. ?C¨®mo se garantizaba la calidad del suministro hasta ahora? ?No estaba incluida en la tarifa la exigencia de mantener un buen servicio? Ahora se descubre que no.
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