El l¨ªder nacionalista Saakashvili arrasa en las elecciones presidenciales de Georgia
El nuevo presidente promete comicios parlamentarios y luchar contra la corrupci¨®n
Mija¨ªl Saakashvili se proclam¨® ayer vencedor de las elecciones presidenciales en Georgia nada m¨¢s cerrar los colegios electorales, cuando se hicieron p¨²blicas las encuestas a pie de urna, que le dieron el 85,8% de los votos. Una hora antes hab¨ªa quedado claro que el principal peligro para estos comicios -el abstencionismo- hab¨ªa sido conjurado y que la gente hab¨ªa acudido en masa a las urnas. "Hoy ha vencido todo el pueblo georgiano, y no s¨®lo yo. Georgia vencer¨¢; somos una naci¨®n fuerte y construiremos un pa¨ªs fuerte y desarrollado", dijo el l¨ªder nacionalista.
El virtual nuevo presidente dijo ante sus partidarios reunidos en el teatro Filarm¨®nico que los primeros pasos que hay que dar son "celebrar elecciones parlamentarias, realizar una reforma constitucional y aprobar en el Parlamento un paquete de severas medidas contra la corrupci¨®n", que ya tiene preparado.
La victoria del que encabez¨® la revuelta que termin¨®, a fines de noviembre, con la ca¨ªda de Eduard Shevardnadze -quien hab¨ªa gobernado Georgia durante 11 a?os-, fue legitimada por la misma v¨ªctima de la revoluci¨®n de terciopelo. El ex presidente fue el primer personaje de la pol¨ªtica georgiana en ir a votar, avalando con ello al nuevo r¨¦gimen.
Los seguidores de Shevardnadze, as¨ª como la izquierda -los partidos Comunista y Laborista-, y parte de la derecha -los Tradicionalistas y los Nacional-Dem¨®cratas- hab¨ªan llamado a boicotear los comicios. Tambi¨¦n la Uni¨®n de Renacimiento Democr¨¢tico, el partido del l¨ªder adzharo Asl¨¢n Abashidze, hab¨ªa hecho otro tanto, aunque decidi¨® permitir que se abrieran los colegios electorales en su autonom¨ªa para que pudieran votar los que as¨ª lo quisieran.
Shevardnadze declar¨® que el abstencionismo pod¨ªa "ser un problema", el ¨²nico real para la validez de los comicios, ya que la ley exige que participe en ellos m¨¢s de la mitad del censo electoral, y, dando la espalda a sus adeptos, hizo un llamamiento a acudir a las urnas. Con ello, el triunfo de Saakashvili es ahora tambi¨¦n una victoria moral.
El mismo Saakashvili descart¨® el peligro de la baja participaci¨®n cuando a primera hora de la tarde fue al colegio electoral 12, en la calle Rustaveli, la gran v¨ªa de Tbilisi, donde vive. "Nunca antes en la historia de Georgia, por lo menos hasta donde yo recuerdo, ha venido tanta gente a votar", declar¨® el l¨ªder nacionalista. Largas colas se hab¨ªan formado ayer ante los colegios de la capital georgiana. Las personas esperaban pacientemente su turno en la calle, bajo un cielo despejado con un agradable sol invernal. Cuando faltaba una hora para que concluyera la votaci¨®n, 1.600.000 personas hab¨ªan acudido a las urnas, lo que supera ampliamente el 50% del censo.
La actual jefa de Estado interina, Nin¨® Burdzhanadze -el rostro amable de la revoluci¨®n de terciopelo-, regresar¨¢ despu¨¦s de la toma de posesi¨®n de Saakashvili a su puesto de presidenta del Parlamento. Contra ella no ha habido ninguna cr¨ªtica. Hay casi unanimidad en considerar que en el dif¨ªcil mes y pico de transici¨®n que le ha tocado gobernar no ha cometido ning¨²n error. Su pol¨ªtica equilibrada la ha llevado a entrevistarse tanto con los secretarios de Estado y de Defensa de EE UU, Colin Powell y Donald Rumsfeld, como con el presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin. Burdzhanadze tambi¨¦n viaj¨® a Batumi, la capital de Adzharia, para y tratar de convencer a Abashidze de que no boicoteara las elecciones.
Saakashvili no s¨®lo hereda un pa¨ªs semidesmembrado -con Abjazia y Osetia del Sur casi independientes-, sino tambi¨¦n en profunda crisis econ¨®mica. Su deuda exterior (2.000 millones de d¨®lares, unos 1.600 millones d euros) equivale al 60% del PIB y el 70% de la poblaci¨®n vive en la pobreza extrema, con un salario medio de unos 15 euros.
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