El amor en los tiempos de guerra

El escritor gaditano Manuel J. Ramos Ortega ha ganado recientemente el premio Vargas Llosa de novela con la obra titulada Las campanas del Duomo. Seg¨²n el propio autor, "habla de una historia de amor que tiene su desarrollo en la Guerra Civil espa?ola, y las repercusiones que tiene en una segunda generaci¨®n de nietos". "Est¨¢ contada en dos tiempos diferenciados, como una historia reflejada en un espejo", comenta.

Ramos Ortega se encontraba en Mil¨¢n cuando oy¨® las campanas de la catedral, el c¨¦lebre Duomo del t¨ªtulo, y con ellas vino la revelaci¨®n del argumento. "En ese instante tuve el presentimiento de que detr¨¢s de ese sonido hab¨ªa una historia. As¨ª, fui recogiendo el cabo para llegar al principio y al final. Pens¨¦ en una enfermera italiana que llega a Espa?a y conoce a un militar republicano. A partir de ah¨ª se teji¨® la trama de amores frustrados y violentados por la guerra", recuerda el novelista.

Las campanas del Duomo es la segunda novela de Ramos Ortega, quien obtuvo el Premio de la Cr¨ªtica Andaluza a la mejor ¨®pera prima con La ciudad de los sue?os. Aunque aquel deb¨² tambi¨¦n proyectaba una reconstrucci¨®n del pasado -a partir del hallazgo de un viejo diario por parte del protagonista-, su autor niega que haya parentesco entre ambas obras. "El espacio geogr¨¢fico es distinto, el tiempo hist¨®rico tambi¨¦n, y los personajes de una y otra nada tienen que ver entre s¨ª", asegura.

Tampoco ha querido Ramos Ortega dar un protagonismo excesivo al componente ideol¨®gico del conflicto: "Creo que hurgo m¨¢s en las emociones de los personajes, no se trata de una novela de ideas pol¨ªticas en sentido estricto. Lo que sucede es que la Guerra Civil no es s¨®lo un fondo o un decorado, tiene su propio peso en la trama. En ese sentido, s¨ª tiene hasta cierto punto un planteamiento ideol¨®gico: no debemos olvidar el pasado como algunos pretenden ahora, sino, por el contrario, recuperarlo con todas sus consecuencias. No hay que dejar de escarbar por miedo a que los muertos salgan del armario", afirma.

Catedr¨¢tico de Literatura Espa?ola en la Universidad de C¨¢diz, Ramos Ortega es conocido en el ¨¢mbito acad¨¦mico por sus contribuciones al conocimiento de las letras contempor¨¢neas, con especial inter¨¦s por las de ra¨ªz andaluza. Su af¨¢n investigador abarca desde la poes¨ªa modernista de Eduardo de Ory al grupo Platero, pasando por Rafael Alberti, entre otros. En 1992 recibi¨® el Premio Fern¨¢ndez Abril de la Real Academia Espa?ola por un estudio sobre la poes¨ªa del medio siglo espa?ol, y forma parte del consejo asesor de la Fundaci¨®n Caballero Bonald.

Seg¨²n sus propias palabras, la figura del profesor y la del creador conviven en Ramos Ortega "a tiempo parcial, a un cincuenta por ciento, que exige sacar tiempo de donde no se tiene". "Dejar a un lado el vestuario de catedr¨¢tico y ponerme el de escritor es una experiencia ilusionante y refrescante", agrega.

Por otro lado, el escritor no se atreve a afirmar si cuenta con m¨¢s lectores entre el bando de los novelistas, entre los que tiene amigos numerosos, o entre sus colegas del ¨¢mbito acad¨¦mico. "Creo que, al ser catedr¨¢tico, se confunden los dos p¨²blicos, encuentro eco y repercusi¨®n de lo que hago en ambos, y esa sensaci¨®n de estar ante vasos comunicantes me reconforta", dice Ramos Ortega. El hecho de haber recibido un premio que lleva el nombre del autor de La ciudad y los perros y La casa verde supone para Ramos Ortega "una satisfacci¨®n muy grande, porque no es un premio m¨¢s", as¨ª como haber sido destacado por el jurado entre casi 400 originales.

Mientras espera la salida de la imprenta de Las campanas del Duomo, prevista para la pr¨®xima primavera, Ramos Ortega sigue dedicando las horas que la Universidad le permite al ejercicio de la prosa. "Ahora estoy escribiendo cuentos, con la ilusi¨®n de reunirlos y publicarlos alg¨²n d¨ªa. En principio no tienen un v¨ªnculo concreto, lo ¨²nico seguro es el t¨ªtulo que los encabezar¨¢: Pasajero de invierno", apostilla.