Extremismos
Esta semana se ha conocido una sentencia del Juzgado de lo Penal n¨²mero 3 de los de Barcelona por la que se condena al imam de Fuengirola a una pena de prisi¨®n por incitar a la violencia contra las mujeres. Entiende el imam que su religi¨®n permite y obliga a este tipo de practicas por parte del marido. Entiende la sentencia que el derecho constitucional a la libertad religiosa no puede amparar y no ampara este tipo de comportamientos, sino que se sancionan penalmente en nuestro Estado de Derecho. Pues bien, sin duda esta sentencia constituye un punto de apoyo para todos los que pensamos que ninguna doctrina, religiosa o no, puede servir de cobijo para justificar la violencia por raz¨®n de sexo. Sin embargo, esta resoluci¨®n tambi¨¦n invita a realizar otra reflexi¨®n. Una reflexi¨®n que lleva a decir que cuando cualquier clase de doctrina encuentra apoyo en el poder civil, o ¨¦ste se sirve y se justifica con aqu¨¦lla, una y otro termina adoptando posiciones extremas en favor de qui¨¦nes interpretan la doctrina y ejercen el poder, y en contra de qui¨¦nes est¨¢n excluidos de su interpretaci¨®n, ejercicio, o no participan de sus ideas.
En este sentido, y en cualquier otro que se mire, es bienvenida esta sentencia. Tambi¨¦n la decisi¨®n del fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa de querellarse contra un editor de Granada por apolog¨ªa del nazismo. Es lo menos que se puede decir de unas actuaciones judiciales que ponen y tratan de poner coto a la invasi¨®n de doctrinas que justifican este tipo de conductas en nuestra sociedad.
Sin embargo, tampoco estar¨ªa de m¨¢s que pudieran servir de alguna otra reflexi¨®n, que bien podr¨ªa aplicarse al momento pol¨ªtico actual. Sobre todo cuando, de nuevo, la religi¨®n se impone con car¨¢cter obligatorio en los colegios, y a nuestro hijos. No ya porque posibilite la interpretaci¨®n de practicas de violencia por raz¨®n de sexo o su doctrina fomente el nazismo, sino porque fomenta su fuerza en un estado laico, lo que puede favorecer que llegue a adoptar posturas extremas -ah¨ª esta la historia reciente- y hoy por hoy constituye una isla en nuestro estado que se permite expulsar de colegios p¨²blicos a profesores divorciados, no casados o que manifiestan unas ideas que no sean de su agrado.
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