Calatrava llevar¨¢ la luz de Manhattan a los andenes del metro de la 'zona cero'
El arquitecto presenta entre elogios su proyecto de terminal de transportes en Nueva York
Santiago Calatrava present¨® ayer el dise?o de la terminal de transportes que construir¨¢ en la zona cero. El arquitecto espa?ol, que se uni¨® a los planes de reconstrucci¨®n de Nueva York el pasado verano, desvel¨® los planos de una estructura transparente en forma de paloma, tributo a las v¨ªctimas de los atentados y homenaje al esfuerzo de la ciudad por superar el 11-S. La escultura penetrable por la que a diario transitar¨¢n m¨¢s de 100.000 neoyorquinos espera inscribirse en la gran tradici¨®n de monumentos p¨²blicos que han marcado el paisaje urbano de Manhattan.
Santiago Calatrava (Benimamet, Valencia, 1951) lo cont¨® dibujando. En un momento de la presentaci¨®n, el arquitecto valenciano dej¨® el micr¨®fono, sac¨® el l¨¢piz y en unas hojas blancas traz¨® el rostro de un ni?o lanzando una paloma al aire. Luego deline¨® sobre los dos arcos cruzados de su nueva creaci¨®n las alas de un p¨¢jaro. "Me expreso mejor con mis dibujos que con mis palabras", lanz¨® al p¨²blico, que ayer recibi¨® su dise?o con una gran ovaci¨®n, la primera sin duda en el largo y penoso proyecto de reconstrucci¨®n del agujero del World Trade Center.
"?ste es un dise?o muy transparente, hecho de acero, vidrio, hormig¨®n y luz", explic¨® Calatrava. El edificio retoma las formas caracter¨ªsticas de las obras con las que el arquitecto espa?ol ha conseguido reconocimiento mundial. Una estructura ondulante, parecida a un esqueleto org¨¢nico, encastrada entre los rascacielos que se construir¨¢n en los pr¨®ximos a?os, llevar¨¢ la luz de Manhattan hasta los andenes del metro. Dos grandes alas proteger¨¢n a los transe¨²ntes de la intemperie. El eje de la terminal podr¨¢ abrirse al aire de la ciudad los d¨ªas de buen tiempo, y cada a?o, el 11 de septiembre, en recuerdo de los atentados. "No hay nada escrito ni tampoco esculturas, el edificio en s¨ª expresa la memoria del 11-S", explic¨® Calatrava.
La ceremonia de presentaci¨®n se celebr¨® en el Jard¨ªn de Invierno del World Financial Center, a escasos metros de la zona cero. Las palmeras del colosal invernadero, que qued¨® casi completamente destruido tras los ataques, contrastaban con las aguas heladas del r¨ªo Hudson. Fue toda una oda a Nueva York.
"Santiago, estamos muy orgullosos porque esto es espectacular. Has conseguido llevar la luz a la plaza y el cielo hasta el metro en una de las mayores terminales de transportes del mundo y un tributo a las v¨ªctimas que hemos perdido", resalt¨® el gobernador del Estado, George Pataki, elogios que precedieron a los del alcalde de la ciudad, Michael Bloomberg. "Las futuras generaciones ver¨¢n en este edificio el aut¨¦ntico testimonio de nuestras vidas. Ver¨¢n en el trabajo de Calatrava la creatividad del dise?o y la fuerza de la construcci¨®n. Cuando vi la maqueta s¨®lo pude decir ?uau!".
En menos de un mes, la reconstrucci¨®n de la zona cero, un proyecto eclipsado por la pol¨¦mica y los enfrentamientos entre el promotor inmobiliario Larry Silverstein y el arquitecto encargado del dise?o general, Daniel Libeskind, ha ido tomando forma. El pasado diciembre, Libeskind y su colega David Childs desvelaron los detalles de la Torre de la Libertad, el rascacielos m¨¢s alto del mundo. Hace algo m¨¢s de una semana, Pataki y Bloomberg presentaron el memorial a los muertos del 11-S, Reflejando la ausencia, un jard¨ªn con dos estanques de agua, ideado por el joven israel¨ª Michael Arad y el paisajista Peter Walker.
La terminal de Calatrava es el tercer pilar del grandioso plan, pero ser¨¢ el m¨¢s visible, puesto que ser¨¢ lo primero que acoja a pasajeros, turistas, transe¨²ntes y oficinistas cuando lleguen al bajo Manhattan. "La idea de la cu?a de luz de Libeskind fue para m¨ª toda una inspiraci¨®n", coment¨® el arquitecto.
La nueva terminal de transportes, donde se concentrar¨¢n catorce l¨ªneas de metro y el tren que une Nueva York y Nueva Jersey bajo el Hudson, costar¨¢ 2.000 millones de d¨®lares y deber¨¢ empezar a construirse a principios de 2005. De momento, una estructura provisional dise?ada por Robert Davidson resguarda a los pasajeros de las tremendas corrientes de aire de la bah¨ªa. "Esperamos que ¨¦sta sea la estaci¨®n multimodal m¨¢s moderna del mundo", dijo el arquitecto.
Calatrava se uni¨® el pasado julio al equipo, que tambi¨¦n incluye al brit¨¢nico Norman Foster, el japon¨¦s Fumihiko Maki y el franc¨¦s Jean Nouvel. Durante este tiempo ha optado por mantener un perfil bajo y evitar mezclarse en las discusiones. El arquitecto es un neoyorquino intermitente. Entre viaje y viaje, vive con su familia en Nueva York, donde hace unos a?os compr¨® una casa y un estudio en Park Avenue. El cr¨ªtico de The New York Times Herbert Muschamp lo ha calificado como el "poeta m¨¢s grande de la arquitectura del transporte".
Referencias emblem¨¢ticas
Manhattan tiene un pasado glorioso, pero traum¨¢tico, en materia de estaciones. Calatrava espera cerrar la herida causada por la destrucci¨®n de la impresionante terminal de los ferrocarriles de Pennsylvania, una joya de principios del siglo XX, desmontada y reducida a escombros en 1963 para dejar espacio al muy cuestionable Madison Square Garden.
Antes de dibujar, el arquitecto estudi¨® otras dos terminales emblem¨¢ticas: la de TWA en el aeropuerto Kennedy, del arquitecto Eero Saarinen, en desuso desde hace ya unos a?os, y la estaci¨®n de autobuses de Pier Luigi Nevi que culmina el puente de Washington, entre Manhattan y Nueva Jersey.
En la terminal de la zona cero se sigue notando la influencia de Fifi. Cuando estudiaba ingenier¨ªa en Z¨²rich, Calatrava ayud¨® a un compa?ero, estudiante de veterinaria, a completar unos dibujos. ?ste, a cambio, le regal¨® el esqueleto de un perro que el hijo del arquitecto, Rafael, llam¨® Fifi y que inspira las estructuras de sus creaciones. Fifi cuelga ahora de una de las paredes de su oficina en Z¨²rich.
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