Muere Helmut Newton, el gran mir¨®n del erotismo fotogr¨¢fico

El fot¨®grafo australiano, de origen alem¨¢n, Helmut Newton falleci¨® ayer en Los ?ngeles en accidente de coche, a los 83 a?os de edad. El controvertido artista, maestro de un erotismo decadente, con tintes sadomasoquistas, que puso en pie de guerra al feminismo durante gran parte de su trayectoria, muri¨® al perder el control de su Cadillac y estrellarse contra un muro, poco despu¨¦s de abandonar el hotel Chateau Marmont.

Nacido en el fragoroso y decadente Berl¨ªn de los a?os veinte, Newton pertenec¨ªa a una acomodada familia jud¨ªa. Integrado desde muy joven en el ambiente art¨ªstico que precedi¨® a la llegada del nazismo, Newton se movi¨® con soltura en el mundo del lujo y tambi¨¦n en los s¨®rdidos barrios de prostitutas de Berl¨ªn. En su memor¨ªa qued¨® grabada la imponente figura de Rote Erna, famosa d¨®mina de aquellos d¨ªas, armada con un l¨¢tigo y calzada con estrechas y altas botas de cuero. Desde entonces el mundo sadomasoquista, trufado de lujo, presidi¨® su obra, que pronto levant¨® pol¨¦mica. Desde las filas feministas se le calific¨® de "porn¨®grafo, sexista y fascista".

Frente a aquellos que le tachaban de mis¨®gino, Newton dec¨ªa: "Amo a las mujeres. Son totalmente superiores a los hombres. Siempre me ha fascinado la mujer como baluarte". Sus poderosas mujeres, hier¨¢ticas, fr¨ªas, pregonaban el voyeurismo del fot¨®grafo. "Odio a las mujeres sentimentales, las fotos sentimentales. Yo congelo la relaci¨®n entre hombre y mujer. Casi siempre se trata de deseos, jam¨¢s de sentimientos. El hombre casi siempre es un accesorio que la mayor¨ªa de las veces asume una posici¨®n servil. La mujer siempre es dominante en mis fotos".

Dispuso de su primera c¨¢mara con 12 a?os. Cuatro a?os m¨¢s tarde, en pleno apogeo del nazismo, y con el apoyo expreso de su madre, comienza a trabajar como aprendiz de la fot¨®grafa de moda Yva. Ante la persecuci¨®n de los jud¨ªos, Newton tuvo muy pronto problemas para desarrolar su trabajo. En 1938 escap¨® a Singapur mientra su familia se trasladaba a Suram¨¦rica. Nunca volvi¨® a ver a sus padres.

Sus primeros trabajos se desarrollaron en el Singapore Straits Times. Deportado a Australia, pas¨® dos a?os en un campo de trabajo a causa de sus or¨ªgenes alemanes. Tras enrolarse en el Ej¨¦rcito australiano, comenz¨® en Melbourne su brillante trayectoria, que le convirti¨® en uno de los grandes referentes de la fotograf¨ªa de moda y en su peculiar observaci¨®n de la mujer como icono sexual.

En Melbourne trabaj¨® para la edici¨®n australiana de Vogue. All¨ª conoci¨® a Jane Browne, su esposa durante toda la vida. La influencia de Jane se aprecia en su vasta obra fotogr¨¢fica. Modelo recurrente en fotograf¨ªas de alto voltaje er¨®tico, Jane Newton ha aparecido como musa de su marido a lo largo de cinco d¨¦cadas.

El ¨¦xito le lleg¨® en Par¨ªs, despu¨¦s de un fallido paso por Londes. Es en la capital francesa donde su obra alcanza toda su expresividad. Requerido incesantemente por las principales revistas de moda, el estilo Newton se convierte en un signo diferencial en los a?os 60, 70 y 80. Su nombre pasa de las revistas a los libros, y de los libros a los museos, con el rechazo visceral de las cabecillas del feminismo de aquellos d¨ªas. Su obra se presenta en libros como White women, Big Nudes, Portraits y el gigantesco Sumo, libro con un peso cercano a los 30 kilos.