"Hay cretinismo mental en la cr¨ªtica a televisi¨®n"
Desde su despacho en uno de los pabellones de la Expo, ubicado en la Cartuja, Rafael Camacho disfruta de una vista relajante de Sevilla. Falta le hace, pues pocos cargos est¨¢n sometidos a tanta presi¨®n como el de m¨¢ximo responsable de la radio y la televisi¨®n p¨²blica andaluza. Camacho responde con firmeza, y a veces con fina iron¨ªa cordobesa, a las feroces cr¨ªticas que recibe de pol¨ªticos y comentaristas.
Pregunta. Tres partidos de izquierda han firmado un pacto de gobierno en Catalu?a. En plena luna de miel, se produce su primer desencuentro, justo con el nombramiento del director general de la televisi¨®n auton¨®mica. ?Qu¨¦ tiene la televisi¨®n que concita tantas pasiones?
Respuesta. Probablemente que los pol¨ªticos y los gobernantes en general dan una enorme importancia a la comunicaci¨®n, en este caso a la radio y televisi¨®n p¨²blicas, por la misi¨®n tan importante, de servicio p¨²blico, que tienen. Tambi¨¦n porque pensar¨¢n que es un instrumento, una herramienta ¨²til para el ejercicio de la pol¨ªtica.
"El debate sobre RTVA est¨¢ montado sobre una farsa por intereses pol¨ªticos y mercantiles"
"Estoy seguro de que Te¨®fila Mart¨ªnez estar¨¢ en el debate de Canal Sur, porque es dem¨®crata"
"Telebasura es tambi¨¦n la que oculta y censura la informaci¨®n y desvirt¨²a la realidad"
"Acepto un debate serio sobre la televisi¨®n con quien sea, pero limpio, sin intereses ocultos"
P. ?Los directores generales, cuando aceptan el cargo, saben que recibir¨¢n presiones de los partidos o de los gobiernos que les nombran?
R. No puedo hablar por el resto. Cuando yo acept¨¦ el nombramiento sab¨ªa m¨¢s o menos en qu¨¦ consist¨ªa el cargo, las servidumbres que tiene, pero, sobre todo, ten¨ªa la certeza de que podr¨ªa desempe?arlo con decencia y profesionalidad.
P. El PP critica con dureza su gesti¨®n. Estas son las principales acusaciones: que es partidista en lo informativo.
R. Las informaciones y valoraciones que hace el PP no tienen fundamento porque se apoyan en datos, que no tienen, como he dicho alguna vez, denominaci¨®n de origen. La ¨²nica compa?¨ªa que hay en este pa¨ªs que mide las audiencias y las presencias en televisi¨®n se llama TNS (Taylor Nelson Sofres). Es la ¨²nica entidad acreditada y solvente para medir las informaciones en televisi¨®n. Lo que el PP suele sacar son datos arbitrarios, partidistas y carentes de credibilidad.
P. N¨²mero dos: hay una baja calidad en la programaci¨®n como servicio p¨²blico.
R. No estoy de acuerdo en absoluto. Las parrillas de Canal Sur Televisi¨®n y Canal 2 Andaluc¨ªa tienen un alt¨ªsimo grado de compromiso p¨²blico. Basta con cotejar lo que dice la ley de creaci¨®n de la RTVA al definir el servicio p¨²blico con la programaci¨®n para comprobar que eso es rigurosamente falso. La televisi¨®n andaluza tiene la calidad proporcional al presupuesto del que dispone.
P. Es escandalosamente cara.
R. No. Es m¨¢s bien barata si se compara con otras televisiones auton¨®micas o con las de ¨¢mbito nacional. Es la m¨¢s barata por habitante de Espa?a, en t¨¦rminos relativos: financiaci¨®n p¨²blica que recibe por habitante. Es tambi¨¦n barata en t¨¦rminos absolutos. Un ejemplo: la radio y televisi¨®n de Valencia, que se hace para menos habitantes, tiene un 20% de presupuesto m¨¢s y con peores resultados en audiencia, y menos prestigio, que la televisi¨®n andaluza, Por no hablar de las televisiones de ¨¢mbito nacional, que nos triplican el presupuesto.
P. Por ¨²ltimo: es despilfarrador en la gesti¨®n.
R. Eso es un disparate total. Por el resultado de mi gesti¨®n, en grado de eficiencia y eficacia, es un disparate decir eso. Somos la televisi¨®n m¨¢s saneada financieramente de Espa?a y la m¨¢s barata. Adem¨¢s, TVE tiene una deuda que ya se acerca a los 7.000 millones de euros y la RTVA no tiene deuda.
P. Una encuesta reciente del Instituto de Estudios Sociales de Andaluc¨ªa (organismo que depende del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas) refleja este dato: el 67% de los andaluces considera que la programaci¨®n de Canal Sur es buena o muy buena. Si eso es as¨ª ?por qu¨¦ la critican tanto?
R. Porque el debate sobre la RTVA est¨¢ montado sobre una farsa, est¨¢ mediatizado, distorsionado, por intereses pol¨ªticos y mercantiles. Comprendo que para la competencia es muy duro que la televisi¨®n p¨²blica andaluza ocupe un cuarto de la cuota de pantalla total y que Canal Sur Radio se aproxime al mill¨®n de oyentes. Desde el punto de vista de la competencia mercantil es duro y desde el punto de vista de los intereses pol¨ªticos, estoy seguro de que los que est¨¦n en la oposici¨®n no mirar¨¢n con simpat¨ªa esta casa.
P. Dice tambi¨¦n la encuesta que el 54,7% de los andaluces consideran imparcial los informativos y el 33,3% no.
R. ... dice tambi¨¦n que a casi el 80% de los andaluces le merecen mucha o bastante confianza los informativos...
P. Bien, los resultados de la encuesta son muy positivos para Canal Sur. Pero la valoraci¨®n m¨¢s positiva la hacen las mujeres y las personas mayores de 60 a?os. Por contra, los universitarios son los m¨¢s cr¨ªticos...
R. Los universitarios somos los m¨¢s cr¨ªticos.
P. ?Est¨¢n haciendo una televisi¨®n para la tercera edad y las amas de casa?
R. En absoluto. La prueba es que cuando medimos las audiencias se ve que hemos crecido enormemente, por ejemplo en 2003, sobre todo en p¨²blicos infantiles, juveniles y urbanos.
P. Entonces, ?por qu¨¦ algunos intelectuales le critican tanto?
R. Hay una cierta fobia o rechazo, -y esto lo le¨ª a al soci¨®logo Enrique Gil Calvo- un desprecio a eso que algunos entienden como la cultura popular, como vulgarismo, y que de ah¨ª se infiere una cr¨ªtica elitista a la televisi¨®n. En esa cr¨ªtica elitista a la televisi¨®n con frecuencia se quiere culpar a ¨¦sta de todos los males de la sociedad. Canal Sur cumple ahora 15 a?os y hay algunos que creen que esta televisi¨®n tiene la culpa de los muchos males que la sociedad arrastra, que son at¨¢vicos, que tienen origen secular. Quieren que sea una televisi¨®n, ¨¦sta o cualquier otra, la que tenga la culpa de todos los males de la sociedad. Ah¨ª, hay un cierto cretinismo mental.
P. ?Qui¨¦nes son esos cretinos?
R. No estoy se?alando a nadie. Estoy hablando en general, sobre aquellos que quieren culpar a la televisi¨®n de todos los males de la sociedad. En esa posici¨®n general existe un cierto cretinismo mental. ?Por qu¨¦? Porque hay tambi¨¦n una responsabilidad en la educaci¨®n, en la familia, en los ateneos y otros foros de opini¨®n. Es evidente que no puede ser la televisi¨®n la culpable de todos los males cuando, adem¨¢s, en algunos casos las cr¨ªticas provienen de algunos profesores que parece como si quisieran proyectar sobre la televisi¨®n la falta de competencia educativa, bien de algunos profesores o bien del propio sistema. Todo no puede ser culpa de la televisi¨®n. Tenemos culpa, pero toda no puede ser de la televisi¨®n.
P. ?No se excedi¨® usted un poco cuando dijo que el papel que realizaban algunos de esos profesores y c¨®mo preparaban a los futuros periodistas era "deprimente"?
R. Esa puede ser su opini¨®n. He dirigido y he tenido responsabilidades directivas durante much¨ªsimos a?os en medios de comunicaci¨®n. He recibido a muchos alumnos en pr¨¢cticas. Puedo asegurar que el nivel medio -no s¨¦ si habr¨¢ mejorado en estos ¨²ltimos a?os, porque ahora no estoy recibiendo a esos alumnos- es bastante deficiente.
P. ?No ser¨¢ tambi¨¦n que usted acepta mal las cr¨ªticas?
R. No. Lo que pasa es que ¨¦ste es un puesto complicado, y a medida que uno lo conoce m¨¢s, conoce tambi¨¦n en muchos casos las razones de la cr¨ªtica. Acepto un debate serio sobre la televisi¨®n cuando sea y con quien sea, pero con fundamentos, con limpieza, sin intereses ocultos.
P. ?C¨®mo mezcla los ingredientes calidad y audiencia para obtener un guiso aceptable?
R. Primero, la audiencia: una televisi¨®n p¨²blica debe tener p¨²blico. Aunque no debemos aceptar la servidumbre de la audiencia, hay que tenerla muy en cuenta. Si no, nos dir¨ªan que estamos empleando muchos fondos p¨²blicos para pocos resultados. Por otro lado, la calidad: es un concepto que no puede estar sujeto al certificado que expidan unos cuantos. En la calidad hay un componente t¨¦cnico, que tiene que ver con la producci¨®n, y un componente ¨¦tico y deontol¨®gico. Tambi¨¦n tiene que ver desde el punto de vista t¨¦cnico con el presupuesto. Es evidente que tendr¨¦ m¨¢s dificultades pa
ra hacer un programa de calidad, desde ese punto de vista, que quien me pueda quintuplicar el presupuesto.
P. ?Desaparecer¨¢ alg¨²n d¨ªa la llamada telebasura?
R. Soy esc¨¦ptico, a la vista de lo que presentan las televisiones privadas cada d¨ªa. En todo caso, la televisi¨®n basura es no s¨®lo la que se regodea en la obscenidad, en hacer h¨¦roes a vividores, la que emplea un lenguaje procaz, soez, que lo es tambi¨¦n; es tambi¨¦n la que oculta la informaci¨®n, la que censura la informaci¨®n, la que desvirt¨²a la realidad o la desfigura; eso tambi¨¦n es televisi¨®n basura. Si alg¨²n d¨ªa existe un Consejo Audiovisual en el Estado espa?ol, pues algo colaborar¨¢ a que vaya decayendo y perdiendo entidad y peso en el conjunto de las parillas televisivas la telebasura.
P. ?Los Consejos Audiovisuales son la panacea que resolver¨¢ todos los problemas?
R. No, en absoluto. La panacea tiene que ser un conjunto, un sistema, un modelo, en el que deben entrar otros factores. Pero el Consejo Audiovisual, y digo a nivel estatal para que tenga capacidad de controlar la programaci¨®n de todas las televisiones, algo s¨ª que puede colaborar.
P. El Consejo Audiovisual de Catalu?a acaba de hacer p¨²blico un estudio seg¨²n el cual los ni?os pasan m¨¢s horas ante la televisi¨®n que en la escuela, exactamente 990 horas frente a 960. ?Est¨¢n creando peque?os monstruitos?
R. S¨ª. Un d¨ªa lo coment¨¦ con Su Majestad la Reina, en un encuentro, precisamente hablando de los ni?os y la televisi¨®n. Advert¨ª entonces a Su Majestad como presidente de la FORTA (Federaci¨®n de Organismos de Radio y Televisi¨®n, que agrupa a las auton¨®micas), un dato escalofriante: cientos de miles de ni?os ven la televisi¨®n a las doce de la noche en Espa?a. La responsabilidad que tenemos las televisiones, y especialmente las p¨²blicas, frente al p¨²blico infantil es evidente pero no es exclusiva. No podemos tener esa responsabilidad en monopolio, tienen que tener evidentemente una responsabilidad tambi¨¦n las familias para impedir, en la medida que los padres lo consideren as¨ª, que sus hijos vean la televisi¨®n fuera del horario protegido por la legislaci¨®n vigente y por eso que llamamos la Ley de televisi¨®n sin fronteras que incorpora las directivas comunitarias a nuestro pa¨ªs.
P. Su nombramiento lo hace el Consejo de Gobierno. ?Cree que ser¨ªa mejor que en el futuro los directores generales fueran elegidos por el Parlamento?
R. Ser¨ªa mejor que en el futuro hubiera una regulaci¨®n estatal para la elecci¨®n del director general de las televisiones p¨²blicas. ?Por qu¨¦ digo esto? Porque en alguna ocasi¨®n leo u oigo alguna opini¨®n que dice: 'pero por qu¨¦ no innova tambi¨¦n aqu¨ª el Gobierno andaluz, que es muy innovador'. Eso habr¨¢ que pregunt¨¢rselo al Gobierno. Mi respuesta es: creo que tiene que haber una regulaci¨®n estatal, que valga para todo el mundo, porque de lo que estamos hablando es de derechos fundamentales y libertades p¨²blicas, que se definen y regulan en la Constituci¨®n.
"Yo no manipulo, soy un profesional de cualificaci¨®n contrastada"
Gaspar Zarr¨ªas calific¨® en octubre pasado en este peri¨®dico "algunas horas en la programaci¨®n de las televisiones, incluida Canal Sur" como "algo m¨¢s que bochornosas". Dirigentes de la oposici¨®n y comentaristas varios interpretaron esta reflexi¨®n del consejero como una desautorizaci¨®n del director general de la RTVA. Pero la sangre no lleg¨® al r¨ªo. Zarr¨ªas y Camacho, son buenos amigos, afirma el responsable de Canal Sur.
Pregunta. ?Cu¨¢ntas veces le llama al d¨ªa Gaspar Zarr¨ªas?
Respuesta. A diario no me llama nunca.
P. ?Pero hablan?
R. Alguna vez, alguna vez me llama, pero no mucho. Las normales de un consejero de la Presidencia al director de una de las empresas p¨²blicas que org¨¢nica y presupuestariamente dependen de la Consejer¨ªa.
P. ?Es bueno replicarle al jefe?
R. Los manuales dicen que no es bueno replicarle al jefe.
P. Pues usted replic¨® a Zarr¨ªas en un peri¨®dico: "Ha dicho eso para quedar bien", se?al¨®.
R. Este es un tema, en mi opini¨®n, sobrese¨ªdo. Por tanto, no tengo nada que comentar.
P. Le dieron por cesado tras plantarle cara a Zarr¨ªas. ?Cree que le tienen mucha man¨ªa?
R. No. Creo que tengo muchos afectos y supongo que tambi¨¦n habr¨¢ gente que me tenga man¨ªa.
P. Tiene afectos, pero el diputado del PP Jos¨¦ Luis Sanz le ha dicho en el Parlamento cosas como ¨¦sta: "nefasto, vocero y marioneta del PSOE, con delirios de grandeza, antidemocr¨¢tico, que realiza una labor manipuladora y sectaria, que es un pelele agradecido". ?C¨®mo aguanta ese chaparr¨®n?
R. Ese es un estilo que no comparto. La t¨¢ctica del PP en relaci¨®n con la RTVA y conmigo es poco inteligente y menos pr¨¢ctica. La estrategia, adem¨¢s, se califica por s¨ª misma. Provoca un cierto patetismo e impotencia (patetismo en el sentido etimol¨®gico griego, lo he dicho alguna vez en el Parlamento, de padecimiento moral). Al PP le tend¨ª la mano en muchas ocasiones desde que estoy aqu¨ª y la verdad es que me han respondido con malas artes, con ese lenguaje inaceptable, pero, en fin, supongo que esto va en el sueldo y en el debate pol¨ªtico.
P. Pero usted tampoco es manco, porque a Sanz le replic¨® que era cafre, soez y zascandil.
R. No. Le repliqu¨¦ que no estaba dispuesto a aceptar su lenguaje, su lenguaje cafre de zascandil y soez.
P. ?C¨®mo periodista, qu¨¦ siente cuando le llaman manipulador?, ?usted manipula...?
R. En absoluto. Yo no soy manipulador, no lo he sido nunca. Soy un profesional de cualificaci¨®n contrastada. He estado much¨ªsimos a?os dirigiendo otros medios informativos y mi trabajo es muy decente. Hace dos d¨ªas, en una entrevista en Canal 2, el profesor Emilio Lled¨® hablaba de reivindicar el valor de la decencia. Estoy muy de acuerdo con el profesor Lled¨®. Hay que reivindicar el valor de la decencia y el trabajo que yo hago; y, por lo tanto, el trabajo de Canal Sur es muy decente.
"Es un error creer que con la televisi¨®n se ganan las elecciones"
Pregunta. ?Las elecciones se ganan desde la televisi¨®n?
Respuesta. En absoluto. El que piense eso es un error.
P. Pues lo cree mucha gente.
R. Como profesional, digo que eso es un error. UCD perdi¨® las elecciones con la televisi¨®n. El PSOE perdi¨® en 1996 las elecciones con la televisi¨®n.
P. Usted ha propuesto un consenso para la cobertura de las elecciones, pero la presidenta del PP, Te¨®fila Mart¨ªnez, lo rechaza.Dice que usted no tiene credibilidad, que no se f¨ªa de Canal Sur.
R. Esto no es una cuesti¨®n de que yo tenga, seg¨²n la se?ora Mart¨ªnez, o no credibilidad. Ofrezco la televisi¨®n para un debate que es absolutamente neutral: habr¨¢ un conductor neutral y, sobre todo, habr¨¢ cuatro o cinco debatientes que van a tener las mismas oportunidades de decir lo que libremente quieran. No veo d¨®nde est¨¢ la duda: el debate no se puede retocar. Cualquier participante va a tener las mismas oportunidades, el mismo tiempo, de decir lo que quiera. No puede haber nunca trampa ni cart¨®n.
P. ?Entonces, por qu¨¦ cree que lo rechaza Te¨®fila Mart¨ªnez?
R. Porque es una estrategia. Supongo que debe rechazarlo porque en la Comunidad Aut¨®noma de Madrid no hubo debate en las recientes elecciones; y probablemente porque, dicen, el se?or Rajoy no quiere debatir en las elecciones generales.
P. Si Te¨®fila Mart¨ªnez no asiste, ?ustedes mantendr¨¢n la invitaci¨®n al resto de los partidos?
R. Invitaremos a todos los partidos, por supuesto. Los que quieran aceptar, aceptar¨¢n y lo que no, no aceptar¨¢n. Pero estoy seguro de que la se?ora Mart¨ªnez estar¨¢ en el debate, porque es una pol¨ªtica dem¨®crata y sabe que un debate es importante para que los electores conozcan mejor la posici¨®n y los programas de cada partido.
P. En mayo de 2003 el Consejo de la RTVA aprob¨® por unanimidad, incluido el PP, la cobertura que hizo Canal Sur de las elecciones municipales. ?Espera repetir esa aprobaci¨®n?
R. No lo s¨¦. Lo que s¨ª puedo es garantizar que la cobertura que haremos, desde el punto de vista del pluralismo y de la neutralidad informativa, que es lo que nos exige la ley y lo que nos exige a los dem¨®cratas nuestra propia conciencia, ser¨¢ impecable, inatacable. Si luego la aprueban o no, si aplauden o no, para m¨ª es secundario. Otra cosa ser¨¢n los fuegos artificiales: algunos piensan que esto es la feria.
P. Si lo hace tan impecable y el PSOE pierde las elecciones, igual se gana una bronca.
R. Estoy para desempe?ar el cargo y all¨¢ cada uno con las broncas.
P. ?Usted se ve en este despacho despu¨¦s del 14 de marzo?
R. Eso me lo tendr¨ªa que preguntar, porque depende de muchos factores, el 15 de marzo. Con la responsabilidad que tengo, no debo ni puedo decir ahora mismo nada en relaci¨®n con esa pregunta.
P. ?Le gusta este trabajo?
R. Me gusta la empresa de comunicaci¨®n. Es lo que conozco m¨¢s y para lo que, modestia aparte, sirvo y tengo m¨¢s capacidad.
P. Cuando se marcha a casa, ?qu¨¦ programa de Canal Sur le relaja?
R. Me relajan muchos y me gustan muchos. Por ejemplo, me gustan los Ratones Coloraos, que es una apuesta personal...
P. ?Cu¨¢l le pone de mal humor?
R. Ninguno, porque si me pusiera no estar¨ªa en la parrilla. Puede haber momentos de alg¨²n programa, porque eso es incontrolable, en que haya escenas, o alg¨²n protagonista que diga algo que no me parezca adecuado para una televisi¨®n p¨²blica. Pero si hubiera alg¨²n programa que me pusiera de mal humor, por mi responsabilidad y por mi conciencia tendr¨ªa que retirarlo de la parrilla.
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