La renuncia de Gaddafi al arma at¨®mica destapa una trama mundial de contrabando con centro en el Golfo
"Hemos descubierto un sistema muy sofisticado de mercado negro parecido a los c¨¢rteles del crimen", reconoci¨® recientemente el director general de la Organizaci¨®n Internacional de la Energ¨ªa At¨®mica (OIEA), el egipcio Mohamed el Baradei.
La renuncia de Libia a su programa nuclear clandestino ha permitido empezar a desenmara?ar esta tupida red. Los inspectores de la OIEA est¨¢n analizando en Oak Ridge (Tennessee), el mayor laboratorio del Departamento de Energ¨ªa estadounidense, m¨¢s de 25 toneladas de material libio.
"Tenemos que recomponer un inmenso rompecabezas para conseguir una imagen completa", asegura el representante de la OIEA en Nueva York, Gustavo Zlauvinen.
Adem¨¢s de empresas espa?olas aparecen implicadas en la red compa?¨ªas de Pakist¨¢n, Malaisia y Jap¨®n. Est¨¢ por determinar todav¨ªa si las firmas que facilitaron los materiales, en la mayor¨ªa de los casos inocuos por separado, eran conscientes de su destino final.
Quienes s¨ª lo sab¨ªan eran los tres ciudadanos alemanes que actuaron como intermediarios. Ya en septiembre pasado, tres meses antes de que el coronel Gaddafi renunciara al arma nuclear, los servicios secretos brit¨¢nicos y estadounidenses descubrieron un buque alem¨¢n procedente de Dubai que se dirig¨ªa a Libia con centrifugadoras fabricadas en Malaisia. La empresa Scomi Precision Engineering, con sede en Selangor (Malaisia), las vendi¨® a una firma de Dubai, Gulf Tecnical Industries. Los Emiratos ?rabes Unidos (EAU), un pa¨ªs aparentemente libre de sospecha, se convirtieron en el gran supermercado del contrabando nuclear, donde se centralizaban los distintos componentes antes de reenviarlos a su destino final.
El descubrimiento de esta red ha coincidido con la confesi¨®n, por parte del padre de la bomba nuclear paquistan¨ª, Abdel Qadeer Khan, de que hab¨ªa filtrado secretos nucleares a Ir¨¢n, Libia y Corea del Norte.
"Khan no trabajaba solo. Es la punta del iceberg", ha advertido El Baradei.
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