Zapping
Fabio y yo
Atlantia (madrugada de domingo, en TVE) es un debate cient¨ªfico moderado por el ir¨®nico divulgador Manuel Toharia. Hablaron de Marte y de los extrem¨®filos, seres microsc¨®picos capaces de vivir en condiciones extremas.
Extrem¨®filo
Los invitados, profanos en la materia, inhalaron helio en directo, y eso transform¨® sus voces en las de unos t¨ªmidos pitufos. Tambi¨¦n se intercalaron testimonios de expertos. Uno de ellos afirm¨®: "Los milagros contradicen las leyes de la ciencia". La televisi¨®n tambi¨¦n contradice esas leyes. La gravedad, por ejemplo, no existe. Lastres que deber¨ªan hundirse ascienden hasta lo m¨¢s alto. Pongo la tele al azar, en un juego parecido a la ruleta rusa. Sale Jorge Javier V¨¢zquez, en D¨ªa a d¨ªa, diciendo: "Lo que pasa es que los hombres est¨¢n acojonados". En la tertulia de Mar¨ªa Teresa Campos abundan los extrem¨®filos, sometidos a temas tan duros como las t¨¢cticas de apareamiento entre los mam¨ªferos Fabio Testi y Marlene Morreau, que deber¨ªan ilustrarse con la rumba procaz de Rakel Winchester.
Ombligo
Yo admiraba a Testi. El siglo pasado le¨ª una entrevista con Ursula Andress en la que la actriz confesaba que se enamor¨® de Fabio porque, en lugar de mirarle primero los pechos, antes la mir¨® a los ojos. Horas m¨¢s tarde repito la ruleta: sale Paula V¨¢zquez con un biquini selv¨¢tico e inaccesible. Procuro aplicar el sistema Fabio: mirarla a los ojos y concentrarme en las virtudes profesionales de esta excelente presentadora. Y, sin embargo, los ojos se me van hacia su hipn¨®tico ombligo y pierdo el hilo de lo que est¨¢ diciendo. ?Debo sentirme sexista o simplemente humano? Como penitencia veo a Zapatero en Tele 5, moviendo las cejas y tuteando, en plan colega, a Juan Pedro Valent¨ªn.
De Espa?a
?Se acuerdan de Ram¨®n de Espa?a? Escrib¨ªa en esta misma p¨¢gina y entonces le encantaba Seinfeld (ahora es adicto a la serie Larry David). Pues bien: el viernes estren¨® su primera pel¨ªcula como director, Haz conmigo lo que quieras. La osada peripecia de De Espa?a abre horizontes a los que nos dedicamos a comentar la televisi¨®n. Hasta ahora sab¨ªamos que para hacer este trabajo es necesario haber tenido un pasado. Gracias a Ram¨®n nos queda una esperanza de redenci¨®n. Les dejo, pues, en compa?¨ªa de su esc¨¦ptica prosa, aplicada, en este caso, a Fernando Esteso: "Artista multimedia que lo mismo canta una canci¨®n (horrorosa), protagoniza una pel¨ªcula (infame) o cuenta un chiste (penoso), Esteso es el prototipo del c¨®mico cazurro, toda una tradici¨®n en la escena humor¨ªstica espa?ola. No sabemos qu¨¦ podr¨ªa haber hecho con un buen material, pues es de esos c¨®micos en los que se adivina talento, pero al pobre nunca le dieron una oportunidad. La verdad es que en los tiempos de Marianico el Corto y Jaimito Borromeo hasta se le echa de menos".
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