La patronal se niega a negociar los sueldos tomando como referencia el IPC

La patronal vasca Confebask descarta utilizar el IPC como referencia para la negociaci¨®n colectiva de este a?o y defiende que la discusi¨®n del aumento salarial se ligue a la situaci¨®n de cada empresa y sector industrial. Confebask present¨® ayer en Bilbao sus criterios para la negociaci¨®n de los convenios de este a?o, en la que pretende vincular los aumentos salariales con mejoras en el rendimiento, la organizaci¨®n o los resultados. A su juicio, la econom¨ªa vasca se encuentra en un momento "cr¨ªtico" que exige una "transformaci¨®n del tejido econ¨®mico". Todos los sindicatos replicaron que Confebask presenta un "escenario de confrontaci¨®n" y quiere "institucionalizar el conflicto".

El secretario general de la patronal, Jos¨¦ Guillermo Zubia, alert¨® de la amenaza que suponen los pa¨ªses del Este que se incorporar¨¢n este a?o a la Uni¨®n Europea con "costes laborales seis veces m¨¢s bajos". Este panorama obliga, a su juicio, a abordar una transformaci¨®n del tejido econ¨®mico similar a la de hace una d¨¦cada.

La capacidad competitiva se ve lastrada, seg¨²n Zubia, por "la actual estrategia" de ELA, el sindicato mayoritario vasco, al que consider¨® "autista a las caracter¨ªsticas del mundo actual y anclado en un sindicalismo conflictivo propio de los a?os 70".

El dirigente de Confebask sostuvo que los retos actuales no son "compatibles con situaciones de conflictividad como las de hoy" y apunt¨® que apuestan por un convenio colectivo, sectorial, de aplicaci¨®n general y de vigencia plurianual "como elemento de estabilidad".

Zubia avanz¨® que el empresariado da "por descartada la referencia del IPC" en la negociaci¨®n colectiva, aunque admiti¨® que pueda plantearse "en el juego de reivindicaciones". Esta postura choca frontalmente con la estrategia de los sindicatos nacionalistas ELA, LAB y ESK, que la pasada semana presentaron su acuerdo conjunto para la negociaci¨®n de este a?o, en la que se disponen a exigir incrementos salariales "sustanciales" sobre la inflaci¨®n anual.

Jon Bilbao, director de Relaciones Laborales de Confebask, incidi¨® en que los salarios de los trabajadores vascos son los m¨¢s altos de Espa?a y destac¨® que la econom¨ªa de la comunidad aut¨®noma "no puede afrontar aumentos salariales que no tengan en cuenta un correlativo aumento del rendimiento o los resultados". Por ello, emplear el IPC, un elemento "ajeno al rendimiento del trabajo o los resultados de la empresa", como referencia para las subidas salariales "resulta especialmente desacertado".

La patronal descarta tambi¨¦n recomendar un determinado aumento salarial como base de negociaci¨®n. "La referencia m¨¢s valiosa sigue siendo la propia empresa o sector". Sus consejos pasan por incrementos en "la parte variable" del sueldo, vincular los pluses a la "cantidad y calidad del trabajo" con limitaciones en complementos como la antig¨¹edad y "explorar" los aumentos seg¨²n los resultados y objetivos.

De igual forma apuesta por el rechazo de la "disminuci¨®n rutinaria" de la jornada laboral y la exigencia de flexibilidad en la organizaci¨®n del tiempo de trabajo. Bilbao indic¨® que ha habido un "cambio de tendencia" tras la derogaci¨®n en Francia de la ley de las 35 horas. "Vuelve a su foro natural, la negociaci¨®n colectiva", agreg¨®.

Confebask recomienda la implantaci¨®n de "instrumentos de gesti¨®n irregular del tiempo" tras resaltar que Euskadi presenta la cifra m¨¢s reducida de horas laborales: "1.718 [al a?o] contra las 1.758 de Espa?a y las 1.881 de Eslovaquia". Adem¨¢s, plantea acabar con las limitaciones a la movilidad y defiende la externalizaci¨®n, que "no es s¨®lo imprescindible, sino buena al tratarse de un semillero de nuevas empresas".

La patronal pide que se controlen los costes extrasalariales, como la Seguridad Social o las bajas temporales.

Todos estos planteamientos fueron censurados con suma dureza horas despu¨¦s por los principales sindicatos. ELA afirm¨® en un comunicado que la postura de la patronal supone "un escenario de confrontaci¨®n" al primar la "flexibilidad, la precariedad y la desregulaci¨®n de las relaciones laborales".

Javier Bermejo, m¨¢ximo responsable de la negociaci¨®n colectiva en UGT, sostuvo que las ideas expuestas "echan m¨¢s gasolina al fuego. Va a contribuir a aumentar el conflicto y quiere institucionalizarlo". Asegur¨® que la negativa a usar el IPC como referencia "significa cambiar las reglas de juego de los ¨²ltimos 25 a?os" y avanz¨® que es un asunto que su sindicato no va a siquiera "discutir". Jos¨¦ Luis Ruiz, de CC OO, se?al¨® que es el "mejor reclamo para unas relaciones laborales conflictivas". Jos¨¦ Luis Rezabal, de LAB, coincidi¨® en que la patronal apuesta por "la confrontaci¨®n y el conflicto".