De la Rosa ingresa en prisi¨®n un d¨ªa antes para evitar a la prensa
El empresario Javier de la Rosa ingres¨® el domingo en la prisi¨®n madrile?a de Alcal¨¢-Meco a petici¨®n propia y antes de tiempo (su ingreso estaba previsto para ayer lunes) para evitar a los medios de comunicaci¨®n. El ingreso en la c¨¢rcel, en cuyo m¨®dulo de ingresos trabaja otro preso famoso, el ex banquero Mario Conde, se produjo despu¨¦s de que De la Rosa agotara todos los recursos para eludir la ejecuci¨®n de la sentencia que le condenaba a cinco a?os y medio por la operaci¨®n Wardbase, pieza separada del caso Torras.
Seg¨²n fuentes jur¨ªdicas, el ingreso en prisi¨®n no fue notificado oficialmente hasta primera hora de ayer, cuando su hija y abogada defensora, Gabriela de la Rosa, acudi¨® personalmente a la Secci¨®n Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional para comunicar la decisi¨®n de su padre. De hecho, el secretario del Juzgado de Instrucci¨®n tuvo que llamar personalmente a Alcal¨¢-Meco para confirmar el ingreso del que fuera m¨¢ximo responsable del Grupo Torras y hombre de confianza en Espa?a de la sociedad kuwait¨ª de inversiones KIO.
Se da la circunstancia de que De la Rosa ha ingresado en el m¨®dulo en el que el ex banquero Mario Conde trabaja de ordenanza para ganar puntos que, en un momento dado, podr¨ªan ayudarle a rebajar su pena.
De la Rosa fue condenado el 18 de diciembre de 2002 a cinco a?os y medio de prisi¨®n por los delitos de apropiaci¨®n indebida y falsedad documental. Se le acusaba de haber organizado una trama para desviar 11,4 millones de euros del Grupo Torras en 1992 y abon¨¢rselos a Manuel Prado y Col¨®n de Carvajal, en una operaci¨®n que constituy¨® la primera pieza separada del caso Torras que lleg¨® a juicio oral.
Tras recurrir esta sentencia ante el Supremo, pedir el indulto ante el Ministerio de Justicia y solicitar infructuosamente a la Audiencia Nacional la suspensi¨®n de la ejecuci¨®n de la sentencia, entre otras medidas, el empresario no ha tenido m¨¢s remedio que ingresar en prisi¨®n. En cualquier caso, aunque est¨¢ condenado a cinco a?os y medio de c¨¢rcel, a su pena hay que restar los quince meses de prisi¨®n preventiva que ya ha cumplido.
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