Kirchner: "No pagaremos deuda a costa del hambre y exclusi¨®n de millones de argentinos"

"No pagaremos deuda a costa del hambre y exclusi¨®n de millones de argentinos, generando m¨¢s pobreza y conflictividad social", dijo ayer el presidente N¨¦stor Kirchner, en un discurso dirigido a la naci¨®n y al mundo durante la inauguraci¨®n del periodo de sesiones del Parlamento. El mensaje se produce cuando Argentina afronta una dura negociaci¨®n con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y los acreedores privados sobre la pesada deuda externa, y despu¨¦s de que su Gobierno anunciara un frente com¨²n con Brasil para negociar con los organismos internacionales.

El endeudamiento de Argentina y Brasil, los dos principales pa¨ªses del Mercosur, supera los 400.000 millones de d¨®lares.

La deuda interna tiene prioridad sobre la deuda externa. ?ste fue el punto esencial del discurso del presidente, en el que desgran¨® los desaf¨ªos de Argentina y los logros de su Gobierno en los primeros nueve meses. Dicho de otro modo, para Kirchner es m¨¢s urgente atender al 55% de argentinos que vive por debajo de la l¨ªnea de pobreza que a los acreedores de m¨¢s de 160.000 millones de d¨®lares de deuda contra¨ªda por anteriores gobiernos, en suspensi¨®n de pagos desde diciembre de 2001.

Diputados, senadores, ministros y dem¨¢s autoridades reunidos en la C¨¢mara de Diputados aclamaron las palabras del presidente, que advirti¨® que los problemas de Argentina no se resolver¨¢n ni en uno ni en varios a?os. "Estamos en el peor de los mundos: en el infierno", precis¨®. "Hemos ascendido s¨®lo un escal¨®n". Pese a este cuadro, dijo percibir un sendero para el cambio profundo, "que dejar¨¢ atr¨¢s la Argentina que cobij¨® a genocidas, ladrones y corruptos".

En la calle, miles de manifestantes concentrados en la plaza de los Dos Congresos segu¨ªan con entusiasmo el discurso de Kirchner. Era la primera gran movilizaci¨®n callejera en apoyo al presidente, organizada por el aparato del Partido Justicialista (PJ, peronista), principalmente de la provincia de Buenos Aires. En ese escenario se han concentrado miles de argentinos desde 2001 para pedir "que se vayan todos" los pol¨ªticos.

La deuda ocup¨® buena parte del mensaje presidencial, que empez¨® con referencias hist¨®ricas. "El endeudamiento ha sido una constante", dijo, al recordar c¨®mo los distintos gobiernos argentinos postergaban hacia futuro los vencimientos. Kirchner record¨® que las recetas del pasado no pueden aplicarse, "porque el mundo cambi¨® de actitud ante el endeudamiento". Argentina se coloc¨® en el l¨ªmite de su viabilidad social, al transformar la recesi¨®n en depresi¨®n, opin¨®, para pedir "grandes esfuerzos" a sus conciudadanos. Atento a la enorme expectaci¨®n que despert¨® su discurso y consciente de a qui¨¦nes dirig¨ªa sus palabras, el presidente reiter¨® que los recursos de su pa¨ªs no pueden satisfacer a todos los acreedores -"no pueden aumentarse milagrosamente"-, y aludi¨®, sin hablar de porcentaje, a la propuesta argentina de asumir s¨®lo el pago del 25% de la deuda externa privada. "Es la opci¨®n m¨¢s racional", dijo.

Critic¨® en varias ocasiones a los organismos internacionales de cr¨¦dito. Dijo que la deuda no es s¨®lo un problema creado por anteriores gobiernos, sino tambi¨¦n por quienes "los protegieron y prohijaron en el exterior" y pidi¨® a los acreedores que afronten su cuota de responsabilidad.