Veteranos del infierno
Si me pidieran que hiciese una lista de historiadores verdaderamente importantes, cuya obra, por alguna raz¨®n, nunca haya recibido la atenci¨®n y el elogio que merece, en uno de los primeros puestos estar¨ªa el nombre de David W. Pike. Profesor em¨¦rito de la Universidad Americana en Par¨ªs, ha vivido en Espa?a y en Francia la mayor parte del pasado medio siglo, y su obra trata principalmente de los ideales, el hero¨ªsmo, el sufrimiento y las t¨¦cnicas de supervivencia de personajes pol¨ªticamente conscientes que participaron en la Guerra Civil espa?ola y en la II Guerra Mundial. La presente obra trata de los ocho a?os de historia (1938-1945) del campo de concentraci¨®n austriaco de Mauthausen, controlado por las SS austriacas, a menudo m¨¢s fan¨¢ticas y crueles que las alemanas; este campo es particularmente importante en la historia espa?ola porque decenas de miles de veteranos del derrotado ej¨¦rcito republicano fueron trasladados (con la colaboraci¨®n de las autoridades francesas de Vichy) desde los campos del sur de Francia a Mauthausen, donde constituyeron el tercer mayor contingente nacional, despu¨¦s de rusos y polacos.
ESPA?OLES EN EL HOLOCAUSTO
David Wingeate Pike
Traducci¨®n de Enrique Benito
Mondadori. Barcelona, 2003
600 p¨¢ginas. 23 euros
Mauthausen no era, te¨®rica
mente al menos, un campo de exterminio como Auschwitz. Los prisioneros eran todos hombres. Unos 200.000 murieron, no en c¨¢maras de gas, sino como resultado de la pura inanici¨®n y del agotamiento provocado por el trabajo que les hab¨ªan asignado: transportar, por una escalera de 186 escalones desiguales, pesados bloques de granito que cortaban de la ladera de la monta?a. Los espa?oles, que hab¨ªan pasado tiempo en campos de concentraci¨®n franceses, y hablaban lenguas de Europa occidental, estaban m¨¢s capacitados que los rusos y los polacos para comunicarse y servir a sus amos austriacos y alemanes. Su anterior experiencia en los campos tambi¨¦n les hab¨ªa ense?ado a adaptarse mejor a la organizaci¨®n y a las rutinas de ¨¦stos. Las SS depend¨ªan de un cuadro de prisioneros para realizar buena parte del trabajo administrativo, y para todo el mantenimiento de la cocina y los barracones. Como resultado de su anterior experiencia y de su moral relativamente elevada como veteranos de la lucha antifascista, los prisioneros espa?oles ocuparon en elevada proporci¨®n estos puestos. La obra del profesor Pike est¨¢ exhaustivamente documentada, y su estilo es inevitablemente detallado debido a la determinaci¨®n de proporcionar todos los matices de esta compleja verdad. Manifiesta opiniones sinceras sobre la moralidad de muchos individuos y sobre el papel desempe?ado por los comunistas en cuanto grupo: opiniones que indudablemente han hecho que muchos colegas no reconozcan la importancia de su investigaci¨®n. ?ste es verdaderamente el tipo de libro complejo con el que, si uno comprende la mitad de lo que lee, ha aprendido m¨¢s que comprendiendo el ciento por ciento de la mayor¨ªa de los libros que hay en el mercado.
Traducci¨®n de News Clips.
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