De Quam al Vodafone hispano

Telef¨®nica ha cambiado de estrategia. Su presidente, C¨¦sar Alierta, se estren¨® en el cargo estampando su firma en la compra de la licencia de UMTS en Alemania, por 8.400 millones de euros. Es cierto que la decisi¨®n de apostar por la entrada en el mercado europeo a trav¨¦s de la nueva tecnolog¨ªa UMTS estaba ya tomada por su antecesor, Juan Villalonga, y que encima de la mesa de presidencia hab¨ªa una pila de informes de bancos de inversi¨®n justificando el desembolso que no desaconsej¨® ninguno de los altos ejecutivos de la compa?¨ªa que deb¨ªa asesorarle y que todas las grandes operadoras europeas cometieron el mismo error. Pero la r¨²brica fue de Alierta.

Dicen los que le conocen que nunca se lo perdon¨® y que su presidencia ha sido una constante penitencia por enmendar aquel borr¨®n que, junto con las licencias en Italia, Suiza y Austria, le supuso al grupo 6.400 millones de euros.

Bajo la batuta de Alierta se ha desandado la 'aventura equinoccial' del UMTS europeo y se ha optado por el "mercado natural hispano"

Pero, como dicen algunos de aquellos ejecutivos penitentes que apostaron por la aventura del UMTS europeo, Alierta tambi¨¦n tom¨® la decisi¨®n de cerrar Quam, la op

eradora alemana que apenas acumul¨® un a?o de vida desde que en noviembre de 2001 estren¨® su servicio de telefon¨ªa m¨®vil GSM. Quam lleg¨® a tener una cartera de 200.000 abonados, a muy alto precio, que tuvo que traspasar a T-Mobile, la filial del gigante alem¨¢n de telecomunicaciones Deutsche Telekom, antes de cerrarla.

Bajo la batuta de Alierta, se ha desandado la aventura equinoccial del UMTS en Europa con un alto coste: 5.576 millones euros

de p¨¦rdidas en 2002, las mayores de una empresa espa?ola. Las licencias de UMTS en Europa est¨¢n en liquidaci¨®n. Se vender¨¢n, se alquilar¨¢ el espectro radioel¨¦ctrico o, directamente, se liquidar¨¢.

Pero Alierta necesitaba cambiar esa estrategia por otra. Y ha encontrado su escenario en el "mercado natural" de Latinoam¨¦rica. Primero fue la compra del operador mexicano Pegaso, y ahora, la adquisici¨®n de los activos de BellSouth en el subcontinente americano. Como apunta un ejecutivo que ha vivido de cerca la negociaci¨®n: "Alierta quiere convertir a Telef¨®nica en el Vodafone hispano". Y no le falta raz¨®n. Por n¨²mero de clientes, Telef¨®nica M¨®viles se va a convertir en el segundo operador mundial tras el gigante brit¨¢nico (exceptuando a las compa?¨ªas chinas), con presencia en 16 pa¨ªses.

Ahora bien, lo casi 5.000 millones de euros que va a desembolsar en efectivo por mercados conflictivos regulatoriamente como Chile y Argentina, o pol¨ªtica y socialmente como Colombia y Venezuela, no asegura un retorno autom¨¢tico de la inversi¨®n.

Pero Alierta juega sobre seguro. Tras el saneamiento realizado en 2002, la caja casi 1.800 millones de euros de la filial de M¨®viles y el bajo nivel de endeudamiento (5.500 millones de euros) le permiten un margen de espera. Alierta ha cambiado el filibusterismo europeo de Villalonga por su su estrategia de concentrarse en el negocio telef¨®nico y en el mercado de habla hispana.