"Ha sido muy duro, muy triste"

"El vestuario se ha quedado en silencio", dijo Beckham camino del autob¨²s. El jugador que simboliz¨® la culminaci¨®n del proyecto de Florentino P¨¦rez estaba sonriente, como siempre, y amable con los periodistas. Sus compa?eros, mientras tanto, se marchaban cariacontecidos. Renqueantes unos, con los ojos llorosos otros, p¨¢lidos los menos, tristemente arrogantes los m¨¢s. La plantilla, perdido ya el ansiado triplete de la Copa, la Liga y la Champions, estaba herida en su orgullo.

"No encontr¨¢bamos palabras", continu¨® Beckham; "ha habido un momento en que no ten¨ªamos nada que decirnos. Ha sido muy triste perder esta Copa por la que hab¨ªamos luchado tanto". "Supongo que el enorme desgaste que hemos hecho en la Liga de Campeones nos ha pasado factura", prosigui¨® el ingl¨¦s, ayer irregular. "Ahora debemos concentrarnos en la Liga", concluy¨®. En eso coincidi¨® con Ra¨²l, que sigue sin ganar la Copa: "Perder ha sido muy duro. Pero hay que reponerse. Nos queda lo mejor, la Liga y la Champions".

Solari y Guti fueron dos de los personajes con m¨¢s historia. Solari, porque jugaba su cuarta final. "La jugu¨¦ con el Atl¨¦tico dos veces y la perd¨ª; la jugu¨¦ con el Madrid una vez, contra el Depor, y tambi¨¦n la perd¨ª", dijo d¨ªas atr¨¢s. Para su desgracia, despu¨¦s de hacer un gran trabajo en el arranque -ca?o de espaldas a Savio incluido-, fall¨® en la marca de Villa en el primer gol del Zaragoza. Una hora despu¨¦s certificaba la derrota en su quinta final. Se retir¨® del campo cojo y mudo.

Si el argentino ten¨ªa ganas de ganar un trofeo que se le ha negado m¨¢s que a nadie, Guti no se sent¨ªa menos motivado. El segundo capit¨¢n madridista, por detr¨¢s de Ra¨²l, jug¨® su primera final importante. Nunca antes, ni en la de la Copa de 2002, ni en la de Liga de Campeones de Amsterdam, ni en la de Par¨ªs, ni en la de Glasgow, hab¨ªa jugado un minuto. Anoche jug¨® y mand¨®. Fue el conductor del Madrid desde el medio centro, el cerebro, hasta su expulsi¨®n en la segunda parte, por doble tarjeta amarilla, la segunda tras el penalti a Villa. Y la hinchada aragonesa cant¨®: "?Illa-illa-illa, Villa-maravilla!". Guti abandon¨® el estadio como si soltase ligeros gru?idos.

C¨¦sar, que perdi¨® ayer su segunda final de Copa con el Madrid, parec¨ªa relajado, pero su imagen escond¨ªa la devastaci¨®n interior: "Ha sido muy triste; muy duro, sobre todo porque tuvimos m¨¢s el bal¨®n que el Zaragoza. Quiz¨¢ no tuvimos tantas ocasiones, pero dominamos m¨¢s. Quiz¨¢ por eso est¨¢bamos m¨¢s cansados al final. Pero la Copa no es una competici¨®n maldita para este equipo. El Madrid tiene que reponerse como en 2002, cuando la perdimos y luego ganamos la Champions".

El guardameta que hab¨ªa ocupado el sitio de Casillas por una noche fue ovacionado antes del encuentro por los 20.000 hinchas del Madrid que ocuparon el fondo norte. Al terminar, esa mitad del estadio estaba vac¨ªa y contrastaba con la del Zaragoza, que cantaba We are the champions a todo tronar. El recinto fue una fiesta ma?a a partir del gol de Galletti, que dej¨® a C¨¦sar perplejo. El delantero zaragocista se fue a festejarlo a la curva donde se apostaban sus hinchas y uno se cay¨® al foso en medio de una avalancha de alegr¨ªa.

Cuando los jugadores del Zaragoza, con Cuartero al frente, recog¨ªan la Copa de manos del Rey, los del Madrid clavaban la mirada en la hierba desasosegados. El m¨¢s hundido parec¨ªa precisamente C¨¦sar, que recibi¨® el consuelo de Solari y Ra¨²l.