Antropofagia en la izquierda mexicana

La credibilidad de los partidos mexicanos boquea desde hace un mes porque expelen pestilencias y esc¨¢ndalos. El canibalismo pol¨ªtico devora hasta las tibias del adversario y la reforma del Estado qued¨®, de nuevo, relegada. Las venganzas, guerrillas y maquinaciones previas a las generales del a?o 2006 impusieron su agenda. El aquelarre responde a m¨®viles diversos y es penoso, pero tambi¨¦n salut¨ªfero, porque desagua cloacas sin drenar durante los siete decenios de r¨¦gimen del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Su derrota en julio de 2000 condujo a una catarsis que jaquea a los partidos, y descuartiza ahora al Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica (PRD), izquierda.

Una encuesta del diario Milenio revelaba la poca confianza de los mexicanos en los compatriotas y grupos encargados de modernizar el aparato del Estado y establecer la cultura del consenso y la decencia. S¨®lo el 17% cree en el oficialista y conservador Partido de Acci¨®n Nacional (PAN) y el 9%, en el PRI, que quiere ser socialdem¨®crata despu¨¦s de haber sido camale¨®n y casi siempre corrupto desde su fundaci¨®n en 1928; el 8% cree en el PRD, tercer partido, creado por pri¨ªstas que abandonaron el propio al no haberse atendido sus ambiciones; el 4% a¨²n cree en el Partido Verde Ecologista (PVEM), patrimonio de una camarilla bajo investigaci¨®n judicial.

Las venganzas, guerrillas y maquinaciones imponen su agenda

La bacanal comenz¨® en febrero con la difusi¨®n de un v¨ªdeo en el que el senador y presidente del PVEM, Jorge Emilio Gonz¨¢lez, que Gobierna en Quintana Roo, negocia dos millones de d¨®lares para autorizar un proyecto tur¨ªstico. Otro captur¨® al dirigente del PRD, Ren¨¦ Bejarano, recibiendo dinero del empresario Carlos Ahumada, editor del peri¨®dico El Independiente, supuestamente a cambio de contratas. Un tercero exhibi¨® al ex responsable de finanzas de la capital federal apostando, con fondos p¨²blicos, en un casino de Las Vegas. El interlocutor del empresario met¨ªa fajos en el bolsillo porque la maleta ya reventaba, y el lud¨®pata sudaba perdiendo millonadas en la ruleta.

"Me quieren destruir", declar¨® el populista jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, militante del PRD y obvio aspirante a la presidencia de M¨¦xico. Ciertamente, lo quieren destruir sus eventuales competidores porque era el pol¨ªtico m¨¢s popular de M¨¦xico y sub¨ªa en flecha al percib¨ªrsele austero y sin m¨¢cula, seg¨²n los sondeos. Pero resulta que estaba rodeado de corruptos, cuyo perfil conoc¨ªa o debi¨® averiguar, seg¨²n sus cr¨ªticos. L¨®pez Obrador acus¨® al coordinador de los senadores del PAN, Diego Fern¨¢ndez, de tenderle una emboscada. "Es un personaje incrustado ya en la mafia del narcotr¨¢fico", que acept¨® 454.500 d¨®lares del Cartel de Ju¨¢rez, afirm¨® Mart¨ª Batres, segundo en el Gobierno Federal. "Es el corrupto n¨²mero uno de M¨¦xico".

El senador organiz¨®, con otros, la publicaci¨®n de los v¨ªdeos filmados por Ahumada. El ex presidente pri¨ªsta Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) es citado por algunos analistas como mu?idor en la sombra de un compl¨® destinado al ajuste de cuentas y a la aniquilaci¨®n pol¨ªtica, que acogota al alcalde presidenciable. "Salinas les hace un favor a varios, adquiere poder y, adem¨¢s, debilita a L¨®pez Obrador, su enemigo jurado, contra el que podr¨ªa levantar cargos de ganar las generales de 2006", se?ala una fuente cercana al embrollo. La administraci¨®n de los v¨ªdeos no acaba y algunos analistas anticipan que alguno puede salpicar al sector perredista del ex candidato presidencial Cuauht¨¦moc C¨¢rdenas, que mantuvo relaciones con el empresario y disputa el control del partido a L¨®pez Obrador.

Inermes la sociedad, los juzgados y las instituciones ante el vendaval de imputaciones o insultos, el PAN debi¨® salir en defensa de Fern¨¢ndez, que calific¨® al alcalde de "mafioso" y "sinverg¨¹enza", y dijo que el Gobierno de la capital est¨¢ en manos de bribones. Existen m¨¢s pel¨ªculas de funcionarios extorsionadores con las manos en la masa, advirti¨®. L¨®pez Obrador sigue enrocado: "Yo no ped¨ª a nadie que pidiera dinero en mi nombre". Pero su estrech¨ªsimo colaborador Bejarano, l¨ªder del grupo del PRD en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, subray¨® que "recib¨ª la orden" de tomar el dinero de Ahumada, supuestamente para sufragar campa?as. El PRI disfruta, desde la barrera, el desplome del alcalde, cuya ca¨ªda en desgracia beneficia al eventual candidato presidencial del partido, Roberto Madrazo. Pero la guerra prosigue y debe haber almacenes de v¨ªdeos con las perrer¨ªas del partido que imper¨® en M¨¦xico a golpe de trampas y corporativismo mafioso.