Las prioridades de una crisis
La primera pista que puede dar el PP sobre su futuro ser¨¢ la configuraci¨®n de la direcci¨®n del grupo parlamentario
El espectacular hundimiento del PP en Andaluc¨ªa tras las elecciones del pasado domingo ha disparado todas las alarmas de esta organizaci¨®n, que ha reaccionado, a modo del reflejo condicionado teorizado por Pavlov, con un cierre de filas que apenas ha durado una semana y que ha obligado a la direcci¨®n regional a dar un nuevo toque de corneta para exigir unidad, o lo que es lo mismo, para demandar que las voces disidentes se callen.
Las anestesiadas crisis internas en las provincias han empezado a aflorar por Almer¨ªa, donde el pol¨¦mico alcalde de El Ejido, Juan Enciso, ha dado el jaque a la direcci¨®n provincial y afina su estrategia para dar el mate, probablemente en el pr¨®ximo congreso del PP almeriense.
"Tenemos que lograr m¨¢s autonom¨ªa y decidir qui¨¦n manda en el PP", dice un dirigente
Cuando se ha cumplido una semana de la debacle electoral, todos los dirigentes del PP opinan, esperan o saben que va a haber cambios, pero nadie conoce a ciencia cierta hasta d¨®nde van a llegar. S¨®lo se da por hecho que el mandato de Te¨®fila Mart¨ªnez como presidenta del PP andaluz tiene su fecha de caducidad en el pr¨®ximo congreso regional, pero, a partir de ah¨ª, todo son dudas. Con el v¨¦rtigo del resultado de las urnas, el PP ha optado por ralentizar los pasos a dar y hasta los m¨¢s cr¨ªticos con la direcci¨®n regional hablan de que es momento para el an¨¢lisis y el sosiego y tomar decisiones con la cabeza fr¨ªa.
Aunque los grandes cambios se producir¨¢n en el congreso regional, que a¨²n no tiene fecha decidida y que, en teor¨ªa, se celebrar¨¢ el a?o que viene, el PP tiene que afrontar casi de inmediato un primer test: la composici¨®n de la direcci¨®n del grupo parlamentario en una legislatura en la que el PSOE tendr¨¢ mayor¨ªa absoluta y las fuerzas del PP han menguado hasta los 37 diputados, el equipo m¨¢s reducido desde 1994.
En 2000, los populares optaron por un modelo en el que Te¨®fila Mart¨ªnez y Antonio Sanz acapararon el poder tanto en el partido como en el Parlamento. Mart¨ªnez ha compatibilizado la presidencia del partido con la del grupo parlamentario, y Sanz, la secretar¨ªa general del PP con la portavoc¨ªa en la C¨¢mara. El dise?o de la direcci¨®n del grupo parlamentario, que todav¨ªa no se ha abordado, seg¨²n fuentes del PP, ser¨¢, por tanto, el primer indicador de por d¨®nde pueden ir los nuevos aires, si los hay, en este partido. En este sentido, coinciden las fuentes consultadas, ser¨¢ clave la posici¨®n de Mart¨ªnez, quien va a tutelar un proceso de sucesi¨®n, la suya, que va a durar meses y que est¨¢ repleto de inc¨®gnitas.
En esta semana, adem¨¢s de analizar los resultados e iniciar la "reflexi¨®n interna" sobre lo ocurrido el 14-M, el PP se ha encontrado con un dilema adicional, fruto de la derrota en las elecciones generales y en las auton¨®micas y que ser¨¢ de los primeros en resolverse: la reubicaci¨®n de quienes se han quedado sin esca?o o cargo. El m¨¢s significativo de todos es del delegado del Gobierno en Andaluc¨ªa, Juan Ignacio Zoido, a quien el PP ten¨ªa reservado un importante papel en el futuro y que ahora medita si vuelve a la carrera judicial o contin¨²a en pol¨ªtica, en la que entr¨® de la mano de Javier Arenas, presidente de honor del PP andaluz. De lo que ambos hablen y Zoido valore depender¨¢ el futuro de ¨¦ste.
La doble derrota va a traer consecuencias en cascada, porque adem¨¢s de la merma de nueve diputados en el Parlamento andaluz y cinco en el Congreso, los populares perder¨¢n, por ejemplo, un puesto en el Consejo de Administraci¨®n de la RTVA, el control de la delegaci¨®n territorial de RTVE, y un pu?ado de puestos que depend¨ªan del Gobierno central (Agencia Tributaria, Seguridad Social, Inspecci¨®n de Trabajo, cuencas hidrogr¨¢ficas o subdelegados del Gobierno). El buscar hueco a la mayor¨ªa de estas personas es lo "m¨¢s doloroso" que el PP tiene que afrontar de inmediato, seg¨²n una fuente de este partido.
Pasado este trago, los populares empezar¨¢n a dise?ar un futuro que la mayor¨ªa de los dirigentes consultados ve lleno de nubarrones y algunos, los menos, con la esperanza de cambiar cosas. "Tenemos que lograr m¨¢s autonom¨ªa y decidir nosotros qui¨¦n manda en el partido, que Madrid no lo imponga", afirma un dirigente provincial, que es de los que opina que en los ¨²ltimos cuatro a?os los ministros del Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar han tra¨ªdo m¨¢s problemas que soluciones. "No puede ser que ser que el jefe de prensa de un ministro mande m¨¢s que un presidente provincial cuando han venido a Andaluc¨ªa", a?ade este dirigente.
?Y la autocr¨ªtica para cu¨¢ndo? Hasta ahora s¨®lo el alcalde de M¨¢laga, Francisco De la Torre, ha recordado interna y p¨²blicamente que el PSOE ya ten¨ªa en la mano la mayor¨ªa absoluta en Andaluc¨ªa antes de los atentados terroristas de Madrid, unos acontecimientos a los que el PP achaca la derrota en las generales y su debacle en Andaluc¨ªa. "Claro que va a haber autocr¨ªtica, pero no se va a hacer en los grandes foros", dice un dirigente del PP.
La direcci¨®n regional del PP quiere intentar que estas voces cr¨ªticas se queden de puertas para adentro, pero es consciente de que en algunas provincias hay grietas profundas que se arrastran desde hace meses (Almer¨ªa y Ja¨¦n son los ejemplos m¨¢s claros) y que han permanecido ocultas por la coyuntura electoral. De hecho, los congresos provinciales del PP ten¨ªan que haberse celebrado ya hace varios meses y fueron aplazados por la cercan¨ªa de los comicios. La crisis que actualmente vive esta formaci¨®n puede hacer que estos c¨®nclaves vuelvan a postergarse de nuevo para dar prioridad al nacional y el regional, aunque la decisi¨®n a¨²n no est¨¢ tomada.
Todo depender¨¢ de los pasos que se den en Madrid.
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