Beckham, desaprovechado

Siete meses de competici¨®n en el Madrid descubren a un Beckham desaprovechado futbol¨ªsticamente -que no en la faceta publicitaria, bien explotada-. Desplazado de la banda derecha, que ocupa Figo, a un cargo de conductor que ni ejerci¨® ni ejerce, cada d¨ªa m¨¢s lastrado con tareas que habr¨ªan correspondido a Makelele, pero sin el oficio de Makelele, el volante ingl¨¦s no ha destacado por ninguna de las condiciones que le dieron dimensi¨®n futbol¨ªstica: las jugadas a bal¨®n parado, los centros al ¨¢rea y la llegada a gol. La derrota en San Mam¨¦s (4-2) ante el Athletic lo evidenci¨® de nuevo.

Desde que juega con Beckham, el Madrid se ha desinflado en aquellos puntos que se supon¨ªa que el ingl¨¦s pod¨ªa reforzar con su gran pegada. Para empezar, el ataque: en esta Liga, el Madrid lleva menos goles a favor y m¨¢s en contra que en la pasada. En 29 jornadas, suma 58 tantos a favor y 35 en contra por los 66 y 31, respectivamente, del ejercicio anterior.

A bal¨®n parado en Liga, el Madrid suma tres goles (0,10 de media por partido), incluyendo el ¨²nico gol de falta directa, obra de Roberto Carlos. El curso pasado tuvo mejores registros: 10 goles en 38 partidos (0,26 de media).

A bal¨®n parado el espectro del Madrid es mediocre. Sin contar los n¨²meros de la ¨²ltima jornada, lo superan 15 equipos, con el Atl¨¦tico a la cabeza. El Atl¨¦tico ha marcado 14 goles en este tipo de jugada -sumando c¨®rners y faltas- gracias al poder¨ªo a¨¦reo de Fernando Torres y a los lanzamientos de Ibagaza y Jorge. En estrategia los tres jovencitos del Atl¨¦tico quintuplican el rendimiento de los llamados gal¨¢cticos.

Zidane, Figo, Roberto Carlos y Beckham est¨¢n entre los diez mejores tiradores de faltas y centradores del mundo. Quiz¨¢ les perjudique la concurrencia excesiva; tal vez necesiten alguien que culmine sus centros. Un cabeceador. Es llamativo que al equipo que tiene los mejores centradores del mundo le falte un cabeceador. Morientes lo era, pero emigr¨® al M¨®naco, cedido por imperativos de lo que la jerga ejecutiva llama "pol¨ªtica de club". En los despachos el favorito era Portillo. Pero Portillo no es un cabeceador. Y, adem¨¢s, ni juega. Como dec¨ªa un t¨¦cnico: "Que el Madrid contrate esos jugadores sin tener un cabeceador es como si Ferrari fabricase un f¨®rmula 1 y a los mandos no pusiera a Michael Schumacher, sino a un polic¨ªa nacional".

El Valladolid (14 goles de cabeza), el Valencia (12), el Celta (12), el Athletic (11), el Atl¨¦tico (11), el Barcelona (11), la Real Sociedad (10) y el Deportivo (9) no precisan acumular un ramillete de centradores magn¨ªficos para superar al Madrid, que lleva ocho goles. De hecho, el Madrid ha marcado 10 goles en 647 balones centrados al ¨¢rea. El Mallorca (625) y el Barcelona (643) han tenido m¨¢s punter¨ªa: 16 goles.

La presencia de Beckham tampoco se ha traducido en aumentar los centros al ¨¢rea. ?Para qu¨¦ si Ronaldo y Ra¨²l quieren la pelota al suelo? En este apartado, el Madrid est¨¢ peor que la temporada pasada: 23,1 balones por partido frente a los 23,2 de la campa?a 2002-03. S¨®lo en la estad¨ªstica de pases en profundidad se mantiene el Madrid el primero, de lejos, con casi 15 por partido. Eso no cambi¨®.

En los remates a la salida de un c¨®rner tampoco le funcionan las cosas al Madrid. Beckham, que los cuelga de maravilla, ha pateado 68 de los 117 balones centrados desde la esquina. S¨®lo 21 hallaron rematador. La mayor¨ªa de los equipos han sido m¨¢s eficaces con menos c¨®rners: Osasuna ha rematado 30; el Betis, 28; la Real, 27; el Espanyol, 25, y el Atl¨¦tico y el Bar?a, 22.

Como el Madrid no tiene cabeceadores, a la m¨ªnima ocasi¨®n, aunque la falta quede un poco lejos del ¨¢rea contraria, sus lanzadores se apresuran a tirar a puerta. El problema es que lo hacen con menos eficacia que todos los lanzadores del campeonato. El Madrid es el equipo que m¨¢s lanzamientos de falta directa ha hecho en lo que va de Liga, junto con el M¨¢laga: 62 tiros. El M¨¢laga, sin embargo, ha metido tres goles y el Madrid uno solo. El M¨¢laga se apa?a con Duda y Gerardo, uno para la izquierda, otro para la derecha. El Madrid, con Beckham, Zidane, Roberto Carlos, Figo y Solari, ha conseguido tres veces menos.

Cuando el Madrid anunci¨® el fichaje de Beckham, en junio de 2003, el presidente, Florentino P¨¦rez, se apresur¨® a poner ¨¦nfasis en el sentido futbol¨ªstico de la contrataci¨®n. "Beckham es un gran jugador", repet¨ªa el dirigente intentando contrarrestar las cr¨ªticas que lo tachaban de fichaje mercantilista. Y ten¨ªa raz¨®n. Beckham es un gran futbolista. Pero el Madrid no lo aprovecha futbol¨ªsticamente.