MOHAMED ITAIBEN/ "Le gustaba leer los libros de nuestra religi¨®n"

Mohamed Itaiben, marroqu¨ª de 27 a?os, viv¨ªa con dos de sus hermanos y su cu?ada en Azuqueca de Henares (Guadalajara). All¨ª, en la mezquita del pueblo, ense?aba ¨¢rabe a hijos de inmigrantes. "Le gustaba leer los libros de nuestra religi¨®n", cuenta su cu?ada. Natural de Alhucemas, donde reside su novia, Mohamed "lo pas¨® muy mal" cuando, en febrero, vio por televisi¨®n que un terremoto hab¨ªa devastado su tierra. "Ve¨ªa a sus paisanos durmiendo a la intemperie, con sus casas destruidas, al Gobierno que hac¨ªa poco para aliviar su situaci¨®n... Y se desesperaba", recuerda su primo Jamal.

Mohamed llamaba a sus padres dos veces por semana, pero cuando el terremoto afect¨® a la casa familiar, "empez¨® a hacerlo hasta tres veces al d¨ªa". Hab¨ªa llegado a Espa?a hace tres a?os para ayudar a su familia "a comprar una casa m¨¢s grande en la que pudieran vivir todos juntos". Quer¨ªa casarse y tener hijos. Tambi¨¦n enviaba dinero para cubrir los gastos m¨¦dicos de uno de sus 14 hermanos, enfermo de hepatitis. "Quer¨ªa mantener nuestras tradiciones, nuestra lengua, nuestra religi¨®n isl¨¢mica", se?ala su cu?ada.

Licenciado en Lengua y Literatura por la Universidad de Fez, Mohamed hablaba franc¨¦s, ¨¢rabe y espa?ol, pero s¨®lo consegu¨ªa alg¨²n trabajo espor¨¢dico en la construcci¨®n. "Ya estaba a punto de obtener los papeles", afirma Jamal. Como muchos otros d¨ªas, el 11 de marzo se levant¨® a las seis de la ma?ana y rez¨® con su cu?ada y su hermano. A las siete tom¨® el tren que deb¨ªa llevarle desde Azuqueca hasta Madrid para trabajar en una obra cercana a la Gran V¨ªa.

Hoy no queda nada de ¨¦l en Espa?a. Las fotos y recuerdos que ten¨ªa en su piso de Azuqueca est¨¢n ya en Marruecos. Su ropa va a ser repartida entre los pobres. Ha sido enterrado en Alhucemas.-