La sorpresa del 'Tac¨®n de Dios'

El Tac¨®n de Dios. ?se es el sobrenombre que se gan¨® el brasile?o Mancini (Belo Horizonte, 1980) el d¨ªa que le meti¨® al Lazio un precioso gol de tac¨®n en la primera vuelta del campeonato. Desde entonces, todo han sido parabienes para el lateral derecho del Roma, que ha respondido en los ¨²ltimos meses con resignaci¨®n pero tambi¨¦n con orgullo a la misma pregunta. ?Se considera el sucesor de su compatriota Caf¨², ex del Roma y actualmente en el Milan?

"Por la velocidad y la manera de incorporarme al ataque, puedo parecerme. Pero no me gustan las comparaciones", dice Mancini antes de sonre¨ªr cuando se le recuerda que hay una faceta que les diferencia notablemente: Mancini lleva 10 goles en siete meses en el Roma -ocho en la Liga, uno en la Copa de la UEFA y otro en la Copa italiana-, cuatro m¨¢s que Caf¨² en seis cursos.

Y no s¨®lo eso: Mancini acumula 12 pases de gol, principalmente a Totti y Cassano, con quienes forma uno de los tr¨ªos atacantes m¨¢s espectaculares de Europa. Un tr¨ªo de 34 tantos. "S¨ª, jugamos con alegr¨ªa y divertimos al p¨²blico", afirma Mancini, cuyo agente, el ex centrocampista internacional brasile?o Alem?o, se pas¨® el martes por las instalaciones deportivas del Roma, en Trigoria, para renovar el contrato de su representado.

La vida le sonr¨ªe a Mancini que, sin embargo, hace s¨®lo un a?o estuvo a punto de regresar a Brasil fracasado. Apenas jugaba en el Venecia, en la Serie B (Segunda Divisi¨®n), donde el t¨¦cnico, Gianfranco Bellotto, lo consider¨® carne de banquillo. Tan s¨®lo disput¨® 14 partidos. "La ciudad era bella, pero triste: s¨®lo hay agua. Y el entrenador me odiaba. Pero fue importante para adaptarme al pa¨ªs y a la lengua", recuerda el jugador.

El caso es que los ojeadores del Roma le echaron el lazo y vieron que era la mejor manera de sustituir a Caf¨², que se march¨® con la carta de libertad al Milan. Fabio Capello, el preparador, est¨¢ entusiasmado con el rendimiento de Mancini, tanto si act¨²a de lateral derecho como de interior, con m¨¢s libertad para atacar. "Es un chico encantador que merece todos los halagos de mundo", dice Capello. Y el chico resume as¨ª su espectacular cambio de fortuna: "Cuando llegu¨¦ al Roma hab¨ªa un debate sobre si dar¨ªa la talla para la Serie A (Primera). Pues... creo que he hablado sobre el campo".

Rendida Italia a sus pies, a Mancini se le resiste su propio pa¨ªs, Brasil. O, al menos, la pareja que forman sus seleccionadores, Mario Zagallo y Carlos Alberto Parreira, que se resisten a llamarle. La excusa es poco consistente: "Es un ala; no un lateral derecho", ha dicho Parreira, como si Caf¨² o Roberto Carlos s¨ª lo fueran.

Mancini, claro, ya ha debutado con su equipo nacional, en 1999, de la mano de Wanderley Luxemburgo. Pero s¨®lo fue dos veces internacional. Ni una m¨¢s. Hasta ahora, Parreira ha preferido como reserva de Caf¨² a Belletti, defensa del Villarreal. Tambi¨¦n para el pr¨®ximo encuentro, el d¨ªa 31, ante Paraguay, en Asunci¨®n, ha vuelto a llamar a Belletti y no a Mancini.

As¨ª, pues, la rivalidad entre los dos jugadores, que se encontrar¨¢n hoy en el estadio Ol¨ªmpico, ya ha nacido. La prensa espa?ola public¨® unas declaraciones de Belletti en las que dec¨ªa no conocer de nada a Mancini. Ello, l¨®gicamente, le ha sentado como un tiro al romanista: "Es muy extra?o porque jugamos dos a?os juntos en el Atl¨¦tico Mineiro. Alguien miente".