El PSOE y el PP constatan sus diferencias para el reparto de puestos en el Parlamento

Populares y socialistas decidieron ayer que no iban a pelearse sino que cada uno expondr¨ªa sus pretensiones respecto al reparto de los puestos en las Mesas del Congreso y del Senado y de las presidencias de las comisiones. Se reunieron en el Congreso de los Diputados los portavoces salientes y entrantes del PSOE, Jes¨²s Caldera y Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, y del PP, Luis de Grandes y Eduardo Zaplana. Constataron sus diferencias de partida, se escucharon y quedaron en volver a verse para intentar un acuerdo antes del 2 de abril, fecha en la que se constituyen las C¨¢maras.

El problema reside en qui¨¦n cede para que las minor¨ªas tengan representaci¨®n pues la mec¨¢nica de la votaci¨®n lleva, si no hay concesiones, a que todos los puestos queden en manos de los dos grupos mayoritarios. Esto nunca ha ocurrido ya que ambos tradicionalmente han cedido puestos a los minoritarios que iban a ser sus aliados potenciales durante la legislatura.

Distribuci¨®n en 1993 y 1996

Por ejemplo, en 1993, cuando el PSOE gan¨® las elecciones por mayor¨ªa minoritaria, con 159 diputados, cinco menos que ahora, y el PP logr¨® 141, siete menos que ahora, la Mesa se reparti¨® como sigue: presidente socialista; un vicepresidente socialista, dos vicepresidentes del PP y uno de CiU. Un secretario socialista, dos del PP y 1 del PNV. Es decir, el PSOE cedi¨® dos puestos y el PP ninguno. En 1996, cuando el PP gan¨® con mayor¨ªa minoritaria (156 diputados), frente a los 141 del PSOE, el reparto fue: presidente del PP; un vicepresidente popular, dos socialistas y uno de CiU; un secretario popular, uno socialista, uno de IU y otro del PNV. Es decir, el PP cedi¨® uno a CiU y otro al PNV, a sus socios, y el PSOE cedi¨® uno a IU.

Ahora, de entrada, el PP considera que corresponde al grupo que quiere gobernar y necesita apoyos, el socialista, hacer las cesiones a las minor¨ªas. Esta posici¨®n puede matizarse en funci¨®n de c¨®mo se negocie la presidencia del Senado. En la C¨¢mara Alta los populares se han quedado a cuatro esca?os de la mayor¨ªa absoluta. Es decir, podr¨ªan conseguir la presidencia con el apoyo de Coalici¨®n Canaria (cuatro senadores) o de CiU (seis senadores). Pero estos dos grupos son proclives a apoyar a quien est¨¦ en el Gobierno.

Tambi¨¦n es posible un acuerdo PSOE-PP para la presidencia del Senado, pero aqu¨ª hay que tener tambi¨¦n en cuenta cuestiones de fondo: El compromiso electoral del PSOE de hacer una reforma constitucional para que el Senado pueda ser una verdadera C¨¢mara territorial choca frontalmente con la promesa del PP de no tocar la Constituci¨®n. El PP, adem¨¢s, tiene reticencias a que ERC est¨¦ representada en las Mesas. Pero ERC es ahora la cuarta fuerza en el Congreso.