Londres, la gran medina

Como en tantos otros pa¨ªses de Europa, el Reino Unido empez¨® a recibir musulmanes inmediatamente despu¨¦s de la II Guerra Mundial, en un momento en que el pa¨ªs necesitaba mano de obra barata para afrontar la reconstrucci¨®n tras los bombardeos alemanes. En la actualidad hay 1,8 millones de musulmanes, seg¨²n los datos del ¨²ltimo censo nacional, realizado en 2001. Es una cantidad bastante modesta en t¨¦rminos relativos, un 3% de la poblaci¨®n total.

Las antiguas colonias del Imperio Brit¨¢nico son el gran afluente. Unos 700.000 proceden de Pakist¨¢n, 300.000 vienen de Bangladesh y 240.000 de la India. Unos 375.000 proceden de pa¨ªses de Oriente Pr¨®ximo y ?frica, principalmente de Nigeria; 10.000 son afrocaribe?os o blancos convertidos al islam, y 200.000 vienen de otros pa¨ªses.

El Reino Unido nunca ha forzado la integraci¨®n de los inmigrantes. Es una pol¨ªtica que parece crear menos tensiones que en otros pa¨ªses europeos

Los musulmanes de la India est¨¢n mejor situados y mejor integrados que los de Pakist¨¢n o Bangladesh, originarios ¨¦stos mayoritariamente de zonas rurales

Aunque los musulmanes son relativamente pocos en t¨¦rminos nacionales, est¨¢n muy concentrados en Londres y en las ciudades industriales del norte de Inglaterra. En Bradford, al noreste de Manchester, hay 82.750, un 17% de sus 483.700 habitantes. Son predominantemente paquistan¨ªes, cachemires y banglades¨ªes. A sus 54 mezquitas acuden cada semana 100.000 musulmanes de toda la regi¨®n. En Birmingham, un 15% de su mill¨®n de habitantes son musulmanes. Hay 11 escuelas musulmanas y 108 mezquitas. De Birmingham es uno de los dos ¨²nicos diputados musulmanes de los Comunes, Khalid Mahmood. El otro es Mohamed Salwar, de Glasgow. Ambos son laboristas.

Hay tambi¨¦n una densidad importante de musulmanes en Leicester (12% de 300.000), Oldham (11% de 220.000) y Leeds (4,5% de 600.000). Pero la gran ciudad musulmana del Reino Unido es Londres. En la capital hay un mill¨®n de musulmanes (el 14% de sus 7,2 millones de habitantes), de los que 250.000 son paquistan¨ªes o banglades¨ªes y 150.000 son turcos. Aunque est¨¢n muy repartidos en varias bolsas de poblaci¨®n por toda la ciudad, 123.000 (el 60%) de los habitantes de Spitalfields, en Tower Hamlets, son de Bangladesh.

La situaci¨®n social de los musulmanes depende en gran parte de su procedencia geogr¨¢fica. Los musulmanes de la India est¨¢n mejor situados y mejor integrados que los de Pakist¨¢n o Bangladesh, originarios mayoritariamente de zonas rurales. En 2001 hab¨ªa en el pa¨ªs 5.400 musulmanes millonarios (teniendo en cuenta efectivo y acciones, pero no propiedades inmobiliarias). Pero banglades¨ªes y paquistan¨ªes tienen 2,5 veces m¨¢s posibilidades de estar desempleados que el conjunto de la poblaci¨®n. Un hombre musulm¨¢n gana casi un 70% de lo que gana un no musulm¨¢n, y el 65% de los trabajadores banglades¨ªes tienen empleos manuales poco cualificados, frente a un 15% de los brit¨¢nicos y un 23% entre las otras minor¨ªas ¨¦tnicas. El Reino Unido nunca ha forzado la integraci¨®n de los inmigrantes. Es una pol¨ªtica que parece crear menos tensiones que en otros pa¨ªses -aqu¨ª cada cual viste como quiere, incluso en las escuelas-, pero que al mismo tiempo dificulta la incorporaci¨®n del inmigrante a la lengua y cultura brit¨¢nicas y mantiene las divisiones no s¨®lo entre musulmanes y no musulmanes, sino dentro de la propia comunidad musulmana, que tiende a agruparse en funci¨®n de la lengua, el origen territorial e incluso el rito religioso de cada uno. Aunque se estima que s¨®lo 760.000 musulmanes son practicantes, en el Reino Unido hab¨ªa casi 600 mezquitas certificadas en 1999, la gran mayor¨ªa del rito sun¨ª. El 13% de los musulmanes de Gran Breta?a apoya las acciones de Al Qaeda, un porcentaje que puede parecer bajo o muy alto, seg¨²n se mire. Eso significa que hay 235.000 candidatos al fundamentalismo religioso, un semillero en el que han crecido imames turbulentos como Abu Qatada, considerado como la cara europea de Al Qaeda, uno de los 14 encarcelados de forma preventiva porque el Gobierno tiene la sospecha, pero ninguna prueba convincente, de que son terroristas potenciales. O Abu Hamza, el egipcio que perdi¨® un ojo y una mano en Afganist¨¢n combatiendo a los rusos y que dirig¨ªa la mezquita de Finsbury Park, cerrada por la polic¨ªa por su ostentoso proselitismo a favor de la violencia. Por all¨ª pas¨® Richard Reid, el hombre que quiso volar un avi¨®n con una bomba incrustada en su zapato.