"Se ha hecho justicia, pero yo vuelvo a hacer la calle"
La mujer a la que dos sentencias han reconocido sus derechos como chica de alterne pide que se legalice la prostituci¨®n
Con una notificaci¨®n de la Seguridad Social en la mano, Maribel Mart¨ªn, la primera prostituta a la que la justicia ha reconocido sus derechos laborales como chica de alterne, saboreaba ayer una victoria agridulce. "Estoy contenta porque se ha hecho justicia conmigo, pero desde que sali¨® la sentencia ya ning¨²n club quiere contratarme; ahora vuelvo a hacer la calle", explic¨® ayer.
Y es que esta mujer ha pasado por un verdadero calvario desde que hace poco m¨¢s de un a?o decidi¨® denunciar el club de alterne Costa Rica de Granollers (Barcelona), donde trabajaba, por haberla despedido de forma improcedente. "Cuando les ped¨ª mi carta de despido me dijeron que lo que me dar¨ªan era una patada en el culo", explica Maribel.
Y as¨ª comenz¨® un recorrido por la justicia que ha acabado con una sentencia judicial que obliga al club Costa Rica de Granollers a abonar 9.578 euros a la Seguridad Social en concepto de cotizaciones por el a?o que trabaj¨® esta mujer en el local.
La sentencia, avalada despu¨¦s por el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a, es para Maribel una victoria moral: "Somos muchas las mujeres que nos dedicamos al alterne y, por primera vez se nos reconoce nuestro trabajo y nuestros derechos como trabajadoras". La sentencia, sin embargo, s¨®lo reconoce el trabajo de Maribel como chica de alterne y camarera, pero en ning¨²n caso su labor como prostituta. "Espero que esto venga alg¨²n d¨ªa. La prostituci¨®n deber¨ªa ser legal. A quienes se debe perseguir es a los proxenetas", afirm¨® ayer esta mujer que asegura haber trabajado en el local como "camarera, limpiadora, chica de compa?¨ªa y prostituta". "All¨ª hice de todo para sobrevivir", sentencia.
La Inspectora de Trabajo y Seguridad Social ya ha notificado, tanto a Maribel Mart¨ªn como al club Costa Rica, el acta de liquidaci¨®n provisional, que incluye la cotizaci¨®n del a?o de ocupaci¨®n laboral (del 1 de junio del 2001 al 6 de junio del 2002) m¨¢s los salarios de tramitaci¨®n (hasta el 22 de noviembre del 2002).
De este modo, el Ministerio de Trabajo da cumplimiento a la sentencia que dict¨® el Juzgado de lo Social n¨²mero uno de Granollers y que posteriormente ratific¨® el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a.
Sin embargo, el futuro de Maribel no est¨¢ nada claro. Tras las dos sentencias favorables, deber¨¢ afrontar un nuevo juicio tras denunciar a los responsables del club donde trabajaba por amenazas y robos en el local. Mientras espera este nuevo juicio, tiene que ganarse la vida con lo que ha hecho siempre, pero con una diferencia. "Ahora trabajo en la calle, pues a pesar de haber pedido de rodillas a algunos clubs de confianza que me dejen trabajar all¨ª, todo el mundo me ha cerrado las puertas", dice. "Los empresarios de estos locales s¨®lo viven por el dinero, no quieren saber nada de la palabra justicia", zanja.
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