Cuatro de cada diez beb¨¦s nacidos en Centro en 2002 eran hijos de inmigrantes

El envejecido distrito Centro ha recibido una inyecci¨®n de juventud gracias a los inmigrantes. De los 1.490 ni?os nacidos en este vecindario en 2002, un 43% eran hijos de madre extranjera, seg¨²n datos de la Comunidad. La edad media de los residentes de Centro ronda los 42,5 a?os, cuando en 1996 era de 45,8. No hay ning¨²n distrito tan mestizo ni con tantos reci¨¦n nacidos de padres extranjeros. En Tetu¨¢n, que ocupa el segundo lugar, un tercio de los beb¨¦s son hijos de ciudadanos de otros pa¨ªses. De los 62.574 ni?os alumbrados en la regi¨®n en 2002, el 18% es de padres no espa?oles.

La ciudad de Madrid envejece. Sus ciudadanos tienen ahora una media de edad de 41,7 a?os, cuando en 1986 era de 37,2. Las canas cubren cada vez m¨¢s todos y cada uno de sus barrios. Pero esa tendencia se ha frenado en los distritos con mayor n¨²mero de inmigrantes. Principalmente en Centro, pero tambi¨¦n en Tetu¨¢n, Chamber¨ª y Arganzuela.

Felipe Baselga, director de estad¨ªstica del Ayuntamiento madrile?o, explica que en los distritos de la almendra central, y especialmente en Centro, la poblaci¨®n anciana que fallece est¨¢ siendo reemplazada por inmigrantes. La consecuencia es que la edad media de la poblaci¨®n de la zona ha descendido. "En 1996 hab¨ªa una media de edad de 45,8 a?os, mientras que ahora es de 42,5".

"El distrito Centro ha ido perdiendo poblaci¨®n joven durante a?os porque los hijos de los residentes de toda la vida, ahora ya ancianos, se han ido desplazando a la periferia. Pero, poco a poco, en la zona se han ido afincando los inmigrantes en viviendas que, aunque no sean baratas, salen m¨¢s econ¨®micas, por su antig¨¹edad y peores dotaciones, que las de otras zonas de la ciudad", matiza Baselga. A comienzos de este a?o, un 27% de los 150.000 vecinos de Centro eran extranjeros.

"Adem¨¢s, el ¨ªndice de natalidad de las madres extranjeras es superior al de las espa?olas, por lo que su contribuci¨®n al rejuvenecimiento poblacional es mayor", apostilla el director municipal de Estad¨ªstica.

Mientras Centro rejuvenece, eso s¨ª, partiendo de unos niveles considerables de senectud, otros distritos tradicionalmente m¨¢s j¨®venes van haci¨¦ndose carrozas. ?ste es el caso, por ejemplo, de Vic¨¢lvaro. En 1986, la media de edad en este vecindario era de 33,3 a?os, mientras que ahora supera los 37.

Manuel Osuna, presidente de la asociaci¨®n de vecinos de La Corrala, implantada en los barrios de Rastro y Lavapi¨¦s, considera "positivo" el rejuvenecimiento de Centro provocado, sobre todo, por la natalidad de los inmigrantes. "Si no se hubiera producido este fen¨®meno seguramente tendr¨ªamos ahora el vecindario medio vac¨ªo y varios colegios cerrados por falta de alumnos", asegura Osuna, aunque matiza que tambi¨¦n existen problemas. "Uno de ellos es que muchos colegios del distrito, y en concreto de Lavapi¨¦s, se han convertido en centros casi exclusivamente para inmigrantes. En algunos de ellos, casi el 90% de los alumnos procede de otros pa¨ªses", asegura este representante vecinal.

El problema es complejo. En Centro hay pocos colegios privados subvencionados, por lo que todos los ni?os inmigrantes se concentran en las escuelas p¨²blicas. Buena parte de estos chavales necesita alg¨²n tipo de refuerzo educativo por desconocer el idioma, provenir de sistemas escolares diferentes o padecer problemas sociales y econ¨®micos en sus hogares que afectan a su rendimiento.

A medida que aumentan los escolares con dificultades, los alumnos de familias con menos problemas van march¨¢ndose a otros centros, lo que acaba convirtiendo el colegio en un gueto de extranjeros. El defensor del menor, Pedro N¨²?ez Morgades, ha propuesto que, si es preciso, se expropien edificios para levantar nuevos colegios en la zona con el objetivo de que los chavales se puedan distribuir entre m¨¢s centros.

Pueblos peque?os

La creciente presencia de ni?os inmigrantes ha beneficiado a algunos centros escolares de la regi¨®n. As¨ª, Fresnedillas de la Oliva, un pueblo de 1.100 habitantes donde de los 12 ni?os nacidos el a?o pasado ocho eran de familias extranjeras, tiene ahora un colegio independiente al aumentar el alumnado por la presencia de inmigrantes. Antes, seg¨²n explican en el Ayuntamiento de este municipio de la sierra oeste situado a 59 kil¨®metros de la capital, el centro compart¨ªa direcci¨®n con los de Navalagamella y Quijorna.

Es en los municipios peque?os y envejecidos, como los de la sierra norte, donde m¨¢s se nota la natalidad de los trabajadores extranjeros. Por ejemplo, en El Berrueco, un pueblo de unos 400 habitantes, nacieron ocho ni?os en 2002 de los que cinco eran hijos de inmigrantes. En Bustarviejo vinieron al mundo 13 beb¨¦s, cinco de ellos de madre extranjera.