Ferrero abre la puerta a Espa?a

La ¨¦pica volvi¨® a la Copa Davis. En realidad, pocas veces la abandona. Juan Carlos Ferrero vivi¨® ayer uno de esos d¨ªas de gloria que cuesta olvidar. La derrota en el dobles permiti¨® a Holanda levantar la cabeza: s¨®lo 2-1 a favor de Espa?a. Y, en el cuarto partido, Martin Verkerk devolvi¨® a los suyos incluso la ilusi¨®n del 2-2 cuando lleg¨® a dominar al valenciano por dos mangas a una y pareci¨® tener el partido controlado. Sin embargo, cuando m¨¢s falta hac¨ªa, surgi¨® el gran Ferrero, el ex n¨²mero uno del mundo y campe¨®n de Roland Garros. Agazapado y preocupado, levant¨® de nuevo la cabeza, sinti¨® orgullo de s¨ª mismo y gan¨® los dos ¨²ltimos sets, cerrando sin contemplaciones las opciones de su rival.

Cuando m¨¢s falta hac¨ªa, surgi¨® el ex 'n¨²mero uno' del mundo orgulloso de s¨ª mismo

Cuatro horas y dos minutos tard¨® Ferrero en colocar el 6-4, 6-7 (5-7), 4-6, 7-5 y 6-1 en el marcador. Pero vali¨® la pena. "Va a sacar para ganar muchas cosas", coment¨® el ex tenista Emilio S¨¢nchez Vicario, ahora comentarista de TVE, en el ¨²ltimo juego; "el set, el partido, la eliminatoria y... ganarse a s¨ª mismo". Ferrero recuper¨®, en efecto, su autoestima. Hab¨ªa llegado a Mallorca tras sufrir una varicela que le hab¨ªa dejado fuera del circuito m¨¢s de un mes y tras haber sufrido tres dolorosas derrotas en la Copa Davis: ante los australianos Lleyton Hewitt y Mark Philippoussis en la final de Australia y contra el argentino Agust¨ªn Calleri en las semifinales de 2003. Ten¨ªa ganas de demostrar que tambi¨¦n ¨¦l es un ganador, que puede dominar la presi¨®n que genera esta competici¨®n. Y lo hizo. Sali¨® de la plaza de toros como el gran triunfador y, con sus dos puntos -hab¨ªa ganado ya a Raemon Sluiter el viernes- coloc¨® a Espa?a (3-1) en las semifinales por segundo a?o consecutivo.

La victoria provoc¨® una explosi¨®n de j¨²bilo en el banquillo espa?ol, que estaba siguiendo la evoluci¨®n de la eliminatoria entre Francia y Suiza y sab¨ªan que Nicol¨¢s Escud¨¦ iba ganando a Michael Kratochvil en el punto decisivo. Una semifinal contra Francia en territorio espa?ol y tierra batida era algo as¨ª como un sue?o, como un pasaporte hacia la final, aun valorando la calidad de los franceses. Pero hac¨ªa falta el tercer punto. Y alguien deb¨ªa ganarlo.

La lluvia hab¨ªa interrumpido el s¨¢bado el partido de dobles cuando Rafa Nadal y Tommy Robredo dominaban por dos mangas a una a Verkerk y John van Lottum. Cuando el partido se par¨®, se hab¨ªa iniciado ya una recuperaci¨®n de los holandeses, que se anotaron su primera manga. Y la remontada prosigui¨® ayer por la ma?ana, con la pista semivac¨ªa y un Nadal y un Robredo excesivamente err¨¢ticos. Las cosas se les complicaron desde el primer momento, puesto que sus adversarios se colocaron con 4-1 en la cuarta y con 4-0 en la quinta. Apenas hubo opciones porque el mallorqu¨ªn perdi¨® sus tres primeros saques y el gerundense dos de los tres primeros. Paralelamente, Verkerk fue cogiendo solidez con su saque y su juego y Van Lottum se mostr¨® mucho m¨¢s regular.

"Lo que qued¨® demostrado", coment¨® el ex doblista Tom¨¢s Carbonell, "es que tenemos a dos grandes tenistas jugando un doble. Lo hacen bien porque son muy buenos, pero les falta consolidar los conceptos; saber que, cuando vas cayendo en picado, hace falta cambiar algo y ralantizarlo todo y que uno de los dos debe coger el liderato". La derrota no result¨® dram¨¢tica en esta oportunidad. Pero podr¨ªa serlo en las pr¨®ximas eliminatorias.

Por fortuna, quedaban dos individuales m¨¢s para decidir la eliminaci¨®n de Holanda. Pero, cuando Ferrero perdi¨® el break del que disfrutaba en la segunda manga, pareci¨® que Verkerk estaba recuperando aquel don especial que le llev¨® a la final de Roland Garros en 2003. All¨ª, el valenciano le destroz¨®. Ayer, el gigante jug¨® sin presi¨®n, liberado de sus responsabilidades y se meti¨® en el partido hasta que su f¨ªsico se lo permiti¨®. "He jugado tres partidos muy duros", confes¨®. Ferrero le rompi¨® en el cuarto set y le fundi¨® en el quinto. Carlos Moy¨¤ remat¨® luego el 4-1. Una victoria que los espa?oles dedicaron a las v¨ªctimas del 11-M.