Montserrat Comas: "Es imposible destinar un polic¨ªa para cada mujer"

"La Ley de Protecci¨®n ha sido muy positiva. Desde agosto, de las 6.000 ¨®rdenes concedidas (sobre 7.800 solicitadas), s¨®lo en dos casos, uno en Granada y el del martes en Madrid, han acabado con muerte o intento de matar". Este balance, por m¨¢s que las consecuencias sean dram¨¢ticas, le parece a la presidenta del Observatorio para la Violencia Dom¨¦stica y de G¨¦nero y vocal del Consejo General del Poder Judicial , Montserrat Comas, aceptable. "Lo sucedido no puede hacernos cuestionar la bondad de la ley. Habr¨¢ que analizar estos casos y ver qu¨¦ fallos se han producido", a?ade.

Ahora bien, la magistrada sabe que hay cosas por hacer, por ejemplo, acompa?ar a esta ley o a las que vengan del "presupuesto necesario para garantizar ayudas sociales y seguridad a las v¨ªctimas".

"Es imposible", prosigue, "pensar que pueda destinarse un polic¨ªa para cada mujer v¨ªctima de malos tratos, pero s¨ª debe haber criterios sobre c¨®mo hacer el control y el seguimiento de las ¨®rdenes de protecci¨®n", una tarea que atribuye apoy¨¢ndose en la ley a los cuerpos de seguridad del Estado. Y una forma de hacer ese seguimiento ser¨ªa, dice, dar un tel¨¦fono m¨®vil a cada una de las v¨ªctimas en el que s¨®lo se precise pulsar una tecla para que salten las alarmas.

Sobre los brazaletes electr¨®nicos, que impedir¨ªan que el agresor se acerque a su v¨ªctima sin ser detectado, Comas precisa: "Debe haber una modificaci¨®n legislativa para que la imposici¨®n al agresor de un brazalete electr¨®nico pueda dictarse en fase de instrucci¨®n, antes del juicio. Creo que se han quedado cortos con esperar a que sea el juicio y la condena para imponer este detector".

Sobre los centros de reinserci¨®n opina que son necesarios y que "deben crearse m¨¢s", porque, a pesar de que se ayuda a las v¨ªctimas concedi¨¦ndoles la vivienda, la custodia de sus hijos y alg¨²n aporte econ¨®mico, hay quienes se sienten m¨¢s seguras en estos centros, que adem¨¢s "favorecen su reinserci¨®n". Por ¨²ltimo, Comas espera con optimismo la llegada de la prometida ley integral contra la violencia dom¨¦stica.