"No soy soci¨®loga, psic¨®loga o fil¨®sofa. Hago chistes", dice Maitena

Maitena estar¨¢ por primera vez ma?ana, d¨ªa de Sant Jordi, firmando libros en las calles de Barcelona. Autora de las series de tiras c¨®micas Mujeres alteradas y Superadas, tiene la habilidad de resumir en una imagen y pocas frases las obsesiones e infelicidades de mujeres de todas las edades en una versi¨®n contempor¨¢nea, entre tierna y c¨¢ustica, de la guerra de sexos. Su ¨²ltimo libro publicado en Espa?a es Superadas 2 (RqueR / Columna en Catal¨¢n).

Maitena Burundarena (Buenos Aires, 1962) se considera dotada de una "dosis muy alta de sentido com¨²n", base de su observaci¨®n de las peque?eces y grandezas de la vida cotidiana. Ahora, a quienes la quieren convertir en portavoz de las mujeres les dice: "No soy soci¨®loga amateur, psic¨®loga de bolsillo o fil¨®sofa de caf¨¦. Hago chistes".

Superadas 2 contiene chistes publicados diariamente entre 2000 y 2001 en el peri¨®dico argentino La Naci¨®n. Desde mediados de 2003 se concentra en una p¨¢gina semanal, Curvas

peligrosas, que en Espa?a publica El Pa¨ªs Semanal. "El a?o pasado tom¨¦ la decisi¨®n de trabajar lo menos posible", cuenta. "Con un chiste diario tienes la sensaci¨®n de tener un reloj en la cabeza, de no poder tomarte unas vacaciones. De igual manera, se mezcl¨® un momento particular de Argentina. Intent¨¦ reflejar la situaci¨®n pol¨ªtica en el estado an¨ªmico de la gente, hablar de la angustia y la desocupaci¨®n, pero lleg¨® un momento en que ya no era simp¨¢tico. Por otro lado, sent¨ªa que no pod¨ªa hablar de dietas y celulitis en un pa¨ªs donde hab¨ªa gente que se mor¨ªa de hambre. No se puede hacer humor de todo. Mi l¨ªmite est¨¢ en el dolor ajeno. No hago chistes de desaparecidos ni sobre el aborto".

Al ver su constante exploraci¨®n de las relaciones entre padres e hijos, maridos y mujeres, amantes, amigas, a veces parece que Maitena est¨¦ como de vuelta de todo, algo que niega. "Me siguen enojando las mismas cosas de siempre, la impuntualidad, la injusticia, peque?os detalles dom¨¦sticos, y a¨²n hay actitudes que me sorprenden, la gente que es capaz de cambiar de lugar, de frecuencia, de marido, los mayores que se enamoran...".

Hace dos a?os que Maitena vive en un pueblo de 100 habitantes de Uruguay: "Me di cuenta de que no hay que estar inmerso en la neurosis para hablar de la neurosis. Ahora no tengo interrupciones y siento que estoy m¨¢s cerca de mis ideas. Las mujeres de Superadas tienen m¨¢s que ver con la ciudad y su marcha. En la serie hab¨ªa un equilibrio entre lo superficial y lo profundo... Aunque a veces lo superficial es m¨¢s profundo de lo que parece porque sentirse feo o gordo es algo muy preocupante. Aqu¨ª tambi¨¦n he puesto toda la iron¨ªa sobre el exceso de consumo y el intento de atrapar el tiempo".

Maitena compara ese trabajo con el que desarrolla ahora. "Curvas peligrosas es m¨¢s intimista, as¨ª que tengo la sensaci¨®n de que la serie de Superadas era m¨¢s divertida para el lector". Es una cuesti¨®n de ritmo, tambi¨¦n, de concepci¨®n de la vi?eta misma, la distancia entre un chiste y una historieta: "El chiste necesita un remate, y con esta concreci¨®n a veces sacrificas una buena idea. Una p¨¢gina requiere otro tiempo y quien las lee no busca tanto el latigazo".