Tres suicidas causan 65 muertos, 20 de ellos ni?os, en la segunda ciudad iraqu¨ª

La violencia volvi¨® ayer a desbordarse en Irak. Esta vez le toc¨® a la segunda ciudad del pa¨ªs, Basora, de mayor¨ªa chi¨ª, donde hasta ayer no se hab¨ªan producido atentados de consideraci¨®n. Poco despu¨¦s de las siete de la ma?ana, en plena hora punta, tres coches bomba conducidos por suicidas hicieron explosi¨®n simult¨¢neamente frente a comisar¨ªas de polic¨ªa y causaron la muerte de al menos 65 personas. 20 de las v¨ªctimas eran ni?os que viajaban en autob¨²s para asistir a sus clases. Horas despu¨¦s, en Riad, capital de la vecina Arabia Saud¨ª, un cami¨®n bomba caus¨® cuatro muertos frente al edificio de los servicios de seguridad.

Cuando algunos soldados del Reino Unido -responsable de la seguridad en la zona de Basora, en el sur de Irak- se aproximaron a los lugares de los atentados para controlar la situaci¨®n, fueron recibidos a pedradas y tuvieron que retirarse. El gobernador de la provincia, Wael Abdelatif, responsabiliz¨® a Al Qaeda de los atentados. El reci¨¦n nombrado ministro del Interior iraqu¨ª, Samir Shakir Mahmud, asegur¨® que los autores de la matanza "quieren sumir a Irak en el caos".

Desde Copenhague, el Gobierno dan¨¦s anunci¨® que el empresario de esa nacionalidad secuestrado hace 10 d¨ªas en Irak apareci¨® muerto ayer. Henrik Frandsen, de 35 a?os, hab¨ªa viajado a Irak para poner en marcha varios negocios de construcci¨®n y fue secuestrado cuando viajaba por la autopista de Basora a Bagdad el pasado 11 de abril.

Basora no fue ayer el ¨²nico objetivo en el punto de mira de los rebeldes en Irak. Cuatro insurgentes murieron en Kirkuk (al norte del pa¨ªs) por disparos de agentes iraqu¨ªes. Ten¨ªan preparados veh¨ªculos bomba para perpetrar otros atentados. Y en Faluya, junto a la autopista que une la capital iraqu¨ª con Jordania, la tregua que a duras penas se hab¨ªa impuesto durante varios d¨ªas salt¨® por los aires ayer.

Por otro lado, el Gobierno polaco puso por primera vez en tela de juicio la presencia de sus tropas en Irak. El primer ministro, Leszek Miller, declar¨® que no se pueden "cerrar los ojos" a la decisi¨®n de Espa?a. Mientras tanto, en Washington, el portavoz de la Casa Blanca, Scott McClellan, neg¨® que la coalici¨®n liderada por Estados Unidos est¨¦ resquebraj¨¢ndose.

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