Espa?a pierde en la UE la batalla de las ayudas al aceite, el algod¨®n y el tabaco

La Uni¨®n Europea abandonar¨¢ en 2010 su contradictoria pol¨ªtica de incentivar el cultivo del tabaco mientras lucha contra el tabaquismo. La hist¨®rica decisi¨®n qued¨® ensombrecida ayer, sin embargo, por el estrepitoso fracaso de Espa?a en la primera negociaci¨®n europea en la que participa un miembro del Gobierno de Rodr¨ªguez Zapatero. La nueva ministra Elena Espinosa se qued¨® sola frente a sus socios europeos al votar en contra del nuevo sistema de ayudas acordado para el algod¨®n y para el aceite, perdiendo de paso la oportunidad de aumentar en 20 millones de euros anuales las ayudas al olivar espa?ol.

El Consejo de Agricultura de la UE se hab¨ªa fijado para el mi¨¦rcoles, con car¨¢cter extraordinario, para aprobar las reformas de los cultivos mediterr¨¢neos - aceite, algod¨®n, tabaco y l¨²pulo- y urg¨ªa un acuerdo tras casi ocho meses de negociaci¨®n porque la pr¨®xima ampliaci¨®n del club a 25 pa¨ªses habr¨ªa dificultado a¨²n m¨¢s el consenso. El resultado fueron 20 horas de negociaci¨®n a cara de perro en la que la ministra Elena Espinosa perdi¨® la partida.

Para el aceite de oliva, Espa?a, principal productor europeo, mantuvo que la producci¨®n ha aumentado considerablemente desde 1998 y que la UE deb¨ªa tenerlo en cuenta. De hecho, lo tuvo en cuenta. Hasta el ¨²ltimo minuto, la presidencia irlandesa, arropada por la Comisi¨®n Europea, adem¨¢s de por Alemania y otros pa¨ªses, mantuvo su oferta de aumentar las ayudas en 20 millones de euros anuales a a?adir a los m¨¢s de mil que ya percibe.

Petici¨®n inicial

El problema es que Espa?a ped¨ªa inicialmente una cantidad de 119 millones y que se cruz¨® una propuesta sobre el algod¨®n que no le satisfac¨ªa. Por ello, Espinosa abandon¨® la negociaci¨®n sin querer aceptar esos 20 millones. Los calific¨® de "moneda de cambio muy cara a cambio de un voto afirmativo" que le pareci¨® poco honrado aceptar. Dado que se negociaba el paquete completo de los cultivos mediterr¨¢neos, Irlanda retir¨® la oferta y logr¨® aprobar las reformas, con mayor¨ªa cualificada, con el voto en contra de Espa?a, la principal perjudicada, aunque tambi¨¦n y por motivos muy distintos de Dinamarca y de Suecia.

"El ambiente era aplastantemente hostil contra el algod¨®n", explic¨® ayer a este peri¨®dico el ministro griego Sabas Tsitouridis. "Por eso, no creo que el resultado para Espa?a hubiera sido distinto de haber venido otro negociador". En la delegaci¨®n danesa no se ven as¨ª las cosas: "La postura espa?ola no era razonable. Ped¨ªa 119 millones para el olivar sin demostrar con c¨¢lculos solventes su necesidad", comenta una fuente de esa delegaci¨®n.

Al margen de los rifi-rafes de la negociaci¨®n, lo cierto es que la reforma aprobada en la UE es crucial para la pol¨ªtica agr¨ªcola europea en un sector a su vez crucial para Espa?a. Dicha reforma hab¨ªa quedado pendiente tras los cambios acometidos en junio pasado para toda la PAC (Pol¨ªtica Agr¨ªcola Com¨²n). La filosof¨ªa es la misma: desincentivar la producci¨®n y, por tanto, los excedentes; convertir en parte las ayudas en subsidios de pago ¨²nico; desviar dinero hacia desarrollo rural y condicionar las ayudas al buen mantenimiento agropecuario de las explotaciones.

Tabaco

En este contexto general, desincentivar por completo el cultivo del tabaco era esperable en plena presidencia de Irlanda, que ha prohibido fumar incluso en los pubs. Espa?a se opon¨ªa a una reforma dr¨¢stica porque considera que 20.000 familias (la mayor parte en Extremadura) viven de este cultivo. Desligar la ayuda de la producci¨®n, se alega, acabar¨¢ con el cultivo.

El problema del algod¨®n es muy similar. Cuanta mayor parte de la ayuda quede desvinculada de la producci¨®n, m¨¢s riesgo de abandono y paro, alegan los productores. A pesar de ello, los n¨®rdicos, esta vez apelando a la pol¨ªtica solidaria con los pa¨ªses pobres (africanos en su mayor¨ªa) productores de algod¨®n, lograron imponer un 65% de ayuda desvinculada en vez del 60% propuesto por Bruselas. Esta vez tambi¨¦n el pa¨ªs m¨¢s perjudicado, Grecia, acept¨® el acuerdo mientras, sorpresivamente, Espa?a lo rechazaba.

Para Grecia fue suficiente asegurar las ayudas para un n¨²mero importante de hect¨¢reas de cultivo (370.000). A Espa?a le pesaron mucho las casi 8.000 explotaciones de reducido tama?o (la media es de 12 hect¨¢reas), casi todas concentradas en Andaluc¨ªa, de dif¨ªcil reconversi¨®n. Tanto, que pag¨® su defensa con una p¨¦rdida importante para su cultivo rey: el aceite.

Espa?a tiene garantizado cada a?o unos mil millones de euros en ayudas al olivar, un cultivo rentable y en expansi¨®n. De ah¨ª que tanto Miguel Arias Ca?ete como su sucesora Elena Espinosa mantengan que en este caso cuanta mayor desvinculaci¨®n, mejor. La UE acord¨® ofrecer la flexibilidad pedida por Espa?a, que puede desvincular m¨¢s del 60% de las ayudas, pero desoy¨® su petici¨®n de mayor apoyo al olivar por aumento de la producci¨®n. Su posici¨®n dej¨® en el camino los 20 millones de euros puestos sobre la mesa.