Amabilidad y cari?o
Alguna vez alguien calific¨® como cari?oso el pop que factura la banda donostiarra La Oreja de Van Gogh. No iba desencaminado, y ya podr¨ªa decirse que estos chicos son los reyes de ese g¨¦nero. Amabilidad, ternura, cari?o, quiz¨¢ blandura, son las armas que se barajan en sus canciones, todas llevadas por lo sencillo de la melod¨ªa y la dulzura de la voz de Amaia Montero. Tienen predicamento en una amplia masa de seguidores adolescentes y j¨®venes. Las ventas de Lo que te cont¨¦ mientras te hac¨ªas la dormida, su ¨²ltimo disco, han rebasado con creces el mill¨®n de copias.
Al principio el sonido no fue del todo correcto, pero lo superaron. Amaia Montero tuvo mucho que ver. Su dicci¨®n es cristalina y limpia. Su sencillez y ausencia de pretensiones la hace muy cercana al p¨²blico femenino, que la imita. Son, lo que se dice, chicos normales abrumados, como tantos, por los atentados de Madrid, que los donostiarras no olvidaron. El cari?o que la banda exterioriz¨® hacia tanto sufrimiento fue sincero; acaso sea eso la clave de su ¨¦xito. No hay poses. Son tal cual: cari?osos y amables, como se les ve. Y la m¨²sica que hacen es fiel reflejo de esa forma de ser.
La Oreja de Van Gogh
Amaia Montero (voz), Pablo Benegas (guitarra), Xavi San Mart¨ªn (teclados), ?lvaro Fuentes (bajo), Haritz Garde (bater¨ªa). Palacio Vistalegre (Madrid), 23 de abril de 2004. Lleno.
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