Ra¨²l, el pasito y las ganas
- Que no voy. Decidi¨® Ra¨²l L¨®pez su dilema tipo Hamlet y sali¨® cruz para la selecci¨®n espa?ola de baloncesto. Cada uno es muy libre de elegir su camino y la presencia en la selecci¨®n, como la mili, dej¨® de ser obligatoria hace mucho tiempo. Nadie tiene el derecho de ejercer un juicio de valor sobre su decisi¨®n, por mucho que trat¨¢ndose de Ra¨²l y dados los antecedentes en su corta pero intensa carrera, lo de las deudas morales no siempre han tenido el mismo peso que ahora. El roto est¨¢ hecho y un a?o m¨¢s Espa?a no podr¨¢ contar para la gran cita de Atenas con la tripleta m¨¢gica que deber¨ªan formar Gasol, Navarro y el propio Ra¨²l. A pesar del subcampeonato europeo del a?o pasado y la buena actuaci¨®n en el Mundial de 2002, la selecci¨®n ha echado de menos al base de los Jazz de Utah. Ra¨²l ofrece la mejor soluci¨®n posible a una circunstancia t¨¦cnica que ha sufrido la selecci¨®n de Moncho L¨®pez en los ¨²ltimos torneos. La atenci¨®n prioritaria hacia Gasol y los equipos acaban rode¨¢ndole, lo que exige soluciones exteriores para abrir otras v¨ªas y de paso desatascar a Pau. Las miradas se posan sobre Navarro, que no es un tirador nato. Lo de la bomba es otra cosa y es con otro abrelatas al lado (lo hace en el Bar?a con tipos como Bodiroga o antes con Jasikevicius) cuando resulta demoledor. Ese hombre debe ser Ra¨²l L¨®pez, m¨¢s incisivo ofensivamente que sus alternativas actuales. Habr¨¢ que esperar para disfrutar de la so?ada columna vertebral completa, leg¨ªtimos sucesores de la m¨ªtica formada por Corbal¨¢n, Epi y Fernando Mart¨ªn. Una l¨¢stima.
- El pasito.
Joventut y Auna plantan cara en las eliminatorias m¨¢s descompensadas. Apuntan pero no concretan, lo que vuelve a poner de manifiesto que lo que fundamenta las diferencias entre los grandes y los que aspiran a serlo radica sobre todo en su capacidad resolutiva. Siendo complicado competir durante 38 minutos, son esos dos minutos finales los que establecen categor¨ªas , se?alan a los campeones y castigan cruelmente a los indecisos. En una relaci¨®n puramente temporal no deja de ser un pasito, pero que cuesta un mundo darlo.
- Las ganas. Estudiantes coge todos los rebotes que le tocaban y roba uno tras otro los que les correspond¨ªan al Real Madrid en el segundo partido. Toda faceta estad¨ªstica tiene su fundamento t¨¢ctico, pero en alguna se puede ver por debajo de los n¨²meros el resultado de la voluntad. O de la ausencia de ella. Observar c¨®mo hasta el base estadounidense Brewer era capaz de coger una y otra vez los rechaces bajo el aro madridista puso bajo sospecha la intensidad y concentraci¨®n de los blancos, un equipo hasta el momento incapaz de soportar el optimismo.
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