Dos ciudades unidas al grito de "campeones"

Las inesperadas derrotas del Madrid y el Barcelona en la noche del s¨¢bado, ante Mallorca y Celta, desataron una calma tensa en Valencia. Cientos de aficionados viajaron en sus coches particulares a Sevilla para acompa?ar a su equipo en la que pod¨ªa ser otra tarde hist¨®rica. Fueron finalmente cerca de 2.000 seguidores del conjunto valencianista los que se unieron en el S¨¢nchez Pizju¨¢n para empujar a su equipo al triunfo. Los aleda?os del estadio vivieron un ambiente festivo antes y despu¨¦s del encuentro. El entusiasmo de los seguidores provoc¨® incluso que algunas vallas de seguridad cedieran ante la alegr¨ªa de la hinchada, aunque no hubo incidentes.

En Valencia, a las ocho y media de la tarde ya se o¨ªan los primeros cl¨¢xones por el centro de la ciudad, preludio de lo que ocurrir¨ªa una hora m¨¢s tarde. A¨²n no hab¨ªa acabado el partido y la fiesta tomaba cuerpo. En la plaza de toros, un clamor -"?gooool!"- acompa?¨® la faena de Morenito de Aranda. Hab¨ªa marcado Vicente. Por el centro hist¨®rico de la ciudad tambi¨¦n la gente celebr¨® el tanto en medio de la procesi¨®n de la Virgen de los Desamparados, ante la sorpresa de aquellos que no sab¨ªan qu¨¦ se festejaba con tanta pasi¨®n.

Todo estaba preparado para la explosi¨®n de j¨²bilo. Dos a?os y cuatro d¨ªas despu¨¦s de ganar la quinta Liga de su historia, la gente se lanz¨® a las calles para dar rienda suelta a su inmensa alegr¨ªa por la sexta. Acababa de anochecer, y el Valencia ten¨ªa en su zurr¨®n otro campeonato. El tanto de Baraja desataba la emoci¨®n en Valencia y Sevilla -otra vez el Valencia consegu¨ªa el t¨ªtulo en Andaluc¨ªa, como hace dos temporadas, en La Rosaleda de M¨¢laga, y tambi¨¦n con un 0-2-.

Junto a Mestalla, miles de aficionados presenciaron en los bares el encuentro y celebraron los goles de su equipo subidos al monumento dedicado a la afici¨®n y disparando la tradicional traca, encaramados a los sem¨¢foros y envueltos en bufandas y banderas. "?Ni Liga, ni Copa, ni Champions League!", gritaba la afici¨®n en recuerdo a su m¨¢ximo rival, el Real Madrid. "?Madrid, la copa se mira y no se toca!", profer¨ªan otros.

Sobre la fachada de Mestalla, una gran pancarta recordaba el otro t¨ªtulo que todav¨ªa disputa el Valencia este curso, la Copa de la UEFA. El gripo de Campeones, campeones viaj¨® de Mestalla a todos los rincones de la ciudad.

Se escuchaba en el vestuario del Valencia en Sevilla, en el que los jugadores luc¨ªan camisetas conmemorativas del t¨ªtulo, y en el centro de Valencia. En las calles los veh¨ªculos y las motocicletas vibraban al paso de los peatones, asustados algunos por la marea de seguidores que celebraba el t¨ªtulo. Valencia hab¨ªa enloquecido con el trofeo. Incluso algunas ni?as con el traje de la primera comuni¨®n se mezclaban entre los seguidores. Otros aficionados no pararon de gritar hasta lograr que una joven fallera saltara con ellos. Muchos iban ataviados con una curiosa peluca naranja de rizos. Imitaban as¨ª el modo que tuvo Carboni de celebrar la Liga de hace dos temporadas.

Los transportes p¨²blicos, autobuses y metros, se llenaron para conducir a los seguidores a los centros neur¨¢lgicos de las celebraciones. Los transistores, utilizados para seguir el transcurso del encuentro, dieron paso a los tel¨¦fonos m¨®viles para comunicar la alegr¨ªa de los aficionados. Todo ello con el permiso de la traca y el bullicio que llen¨® la ciudad. La afici¨®n grit¨® sus c¨¢nticos tradicionales: "Xe que bo, el Val¨¨ncia campi¨®!", y "Esta ¨¦s l'afici¨® d'un Val¨¨ncia campi¨®!". El presidente del Valencia, Jaime Ort¨ª, recibi¨® la felicitaci¨®n del presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero.