El asesinato de Kad¨ªrov deja al Kremlin sin alternativa de poder en la rep¨²blica cauc¨¢sica

La muerte de Ajmad Kad¨ªrov pone en jaque la estrategia del Kremlin, que estaba impulsando un proceso destinado, seg¨²n sus ide¨®logos, a normalizar la situaci¨®n pol¨ªtica en la rep¨²blica norcauc¨¢sica rebelde. Sin una clara figura pol¨ªtica de recambio, Mosc¨² deber¨¢ ahora volver a plantearse el problema de qu¨¦ hacer con esa regi¨®n auton¨®mica: si insistir en sus planes de ir traspasando el mayor n¨²mero posible de responsabilidades a los mismos chechenos o abandonarlos, retroceder y optar por imponer el gobierno presidencial directo desde el Kremlin, como piden una serie de pol¨ªticos rusos.

El Kremlin tiene que encontrar un sustituto antes de las elecciones del 9 de septiembre

En los marcos del programa que pretende llegar a una normalizaci¨®n pol¨ªtica en Chechenia se organiz¨® el a?o pasado un refer¨¦ndum en el que se aprob¨® una nueva Constituci¨®n, especie de estatuto auton¨®mico de la regi¨®n. Seis meses m¨¢s tarde se celebraron elecciones presidenciales en la rep¨²blica aut¨®noma, las primeras despu¨¦s de que, en 1997, hubiera sido elegido Asl¨¢n Masj¨¢dov, hoy jefe de la resistencia chechena separatista.

El Kremlin, que hace cuatro a?os coloc¨® a Kad¨ªrov al frente de Chechenia, decidi¨® continuar apoy¨¢ndolo e hizo de los comicios una farsa: con diferentes medios logr¨® que todos los candidatos que pod¨ªan hacerle competencia real a su hombre de confianza abandonaran la carrera electoral.

Fue as¨ª como Kad¨ªrov obtuvo, oficialmente al menos, m¨¢s del 80% de los votos. Como brome¨® un pol¨ªtico, los guerrilleros bajaron de las monta?as, votaron a favor de su enemigo Kad¨ªrov y luego volvieron a subir para continuar la resistencia chechena.

Pero hasta ayer la estrategia del Kremlin parec¨ªa estar dando resultados. Los rusos hab¨ªan logrado eliminar a importantes comandantes guerrilleros -el ¨²ltimo fue, en febrero pasado, Rusl¨¢n Guel¨¢yev, que sol¨ªa ir con sus hombres a descansar y recuperar fuerzas al desfiladero del Pankisi, en la vecina Georgia- y algunos altos oficiales cercanos a Masj¨¢dov se hab¨ªan entregado y depuesto las armas.

El m¨¢s influyente de ¨¦stos es el general Mogamed Jamb¨ªyev, que se rindi¨® a las autoridades chechenas en marzo pasado. Jamb¨ªyev fue ministro de Defensa del primer presidente checheno, Dzhijar Dud¨¢yev, y despu¨¦s, de Masj¨¢dov.

Para terminar con el grueso del proceso de normalizaci¨®n, s¨®lo faltaba realizar elecciones al Parlamento local. Ahora todo ha cambiado radicalmente. Con unas nuevas elecciones que, de celebrarse, deben transcurrir, seg¨²n la ley chechena, antes del pr¨®ximo 9 de septiembre, el Kremlin tiene poco tiempo para buscar un relevo por el que pueda apostar totalmente, como lo hizo en su tiempo con Kad¨ªrov.

Otra posibilidad es permitir que realmente se celebren aut¨¦nticas elecciones, es decir, dejar a los pol¨ªticos chechenos leales a Rusia y con ambiciones presidenciales que compitan libremente y aceptar el veredicto de las urnas.

Por ¨²ltimo, Putin puede imponer desde Mosc¨² un Gobierno presidencial directo sobre Chechenia.

Liubov Sliska, vicepresidenta primera de la Duma Estatal o C¨¢mara baja del Parlamento ruso, es partidaria de esta ¨²ltima variante. "Probablemente habr¨ªa que imponer, adem¨¢s, el estado de excepci¨®n en las regiones lim¨ªtrofes con Chechenia", declar¨®. Sliska, representante de Rusia Unida, partido que tiene la mayor¨ªa absoluta en el legislativo, agreg¨® que cree necesario volver a introducir la pena de muerte "para este tipo de cr¨ªmenes". Dmitri Rogozin, l¨ªder del grupo parlamentario nacionalista R¨®dina (Patria), tambi¨¦n piensa que hay que imponer el Gobierno directo desde el Kremlin y nombrar "un representante plenipotenciario" en el que Putin delegue "todos los poderes, tanto militares como civiles".

Bor¨ªs Berezovski, el oligarca que ayud¨® a poner a Putin en la presidencia de Rusia y que despu¨¦s se ha convertido en su principal opositor, considera que lo ocurrido ayer marca el total fracaso de la estrategia del Kremlin en Chechenia.

Berezovski, que es perseguido en Rusia y ha debido emigrar al Reino Unido, asegura que es necesario buscar una soluci¨®n pol¨ªtica al conflicto checheno, lo que significa negociaciones con los separatistas, algo que Putin se niega a aceptar.

La dirigente de derechas Irina Hakamada declar¨®, por su parte, que el atentado de ayer "demuestra que los problemas de Chechenia no se han resuelto en absoluto" y advirti¨® al Kremlin que no debe volver el mismo error de imponer a una persona sin previo acuerdo con los ancianos, los clanes y la oposici¨®n chechenos. M¨¢s a¨²n, Hakamada considera que se debe eliminar el puesto de presidente en Chechenia y optar por un sistema parlamentario para gobernar esa regi¨®n.