A la espera de una plan previsto en la LOT
El Consell prepara un proyecto de acci¨®n territorial para la protecci¨®n de la huerta
Mientras el Ayuntamiento de Valencia recalifica zonas pr¨®ximas a la ciudad para su inminente urbanizaci¨®n, la Ley de Ordenaci¨®n del Territorio y Protecci¨®n del Paisaje (LOT), todav¨ªa sujeta al per¨ªodo de discusi¨®n parlamentaria, propone la elaboraci¨®n de un plan de acci¨®n territorial para la protecci¨®n de la huerta. ?ste, en palabras del consejero de Territorio y Vivienda, Rafael Blasco, debe ser "el instrumento de planificaci¨®n y gesti¨®n que, desde la identificaci¨®n de las zonas que se deben de proteger, regule los procesos de obtenci¨®n de suelos por transferencias urban¨ªsticas". En su declaraci¨®n de intenciones el Consell reconoce que la huerta es "un elemento de identidad y diferenciaci¨®n de Valencia y de su entorno metropolitano, tanto desde el punto de vista cultural e hist¨®rico como de la competitividad en el mercado global de las ciudades y de los territorios, por lo que es necesaria su protecci¨®n".
Blasco plantea un modelo de integraci¨®n que preserve y potencie el desarrollo territorial
En ese sentido, Blasco considera la protecci¨®n de la huerta como "uno de los compromisos m¨¢s importantes del Gobierno valenciano para esta legislatura". Frente a un modelo "hiperconservacionista" y otro "desarrollista", Territorio propone un modelo de integraci¨®n basado en la "preservaci¨®n y potenciaci¨®n de los valores y funciones que la huerta puede desempe?ar en el desarrollo territorial". En ¨¦l se persigue hacer part¨ªcipes del desarrollo global a propietarios y usuarios de los suelos a trav¨¦s de "mecanismos previstos en las las leyes urban¨ªsticas en tramitaci¨®n", tales como compensaciones urban¨ªsticas, cuotas de sostenibilidad, fondo de equidad o proyectos de sostenibilidad y calidad de vida, que ser¨¢n complementados con otras pol¨ªticas sectoriales desde Patrimonio, Educaci¨®n, Obras P¨²blicas,... Este modelo tambi¨¦n incluir¨ªa organismos de gesti¨®n, participaci¨®n y promoci¨®n de las actividades econ¨®micas.
En su previsi¨®n, el plan de acci¨®n territorial de la huerta desarrollar¨¢ varios programas. Uno de ellos es la mejora del paisaje, para el que se ha propuesto la eliminaci¨®n de impactos, la adecuaci¨®n de infraestructuras, mantenimiento de perfiles caracter¨ªsiticos e integraci¨®n con los entornos urbanos. Tambi¨¦n contempla la catalogaci¨®n, protecci¨®n y rehabilitaci¨®n del patrimonio arquitect¨®nico, hidr¨¢ulico y de las tramas hist¨®ricas, centrado en alquer¨ªas, pozos de riego y elementos fabriles. Otro de los programas prev¨¦ la adecuaci¨®n de infraestructuras existentes a los nuevos requerimientos de la huerta, que abordar¨ªa la reforma de caminos, accesos, corredores, rutas verdes, zonas de esparcimiento, miradores, dotaciones y servicios y conexiones con transporte p¨²blico.
Asimismo se contemplan tres programas de activaci¨®n, gesti¨®n y promoci¨®n y difusi¨®n. El primero de ellos se encargar¨¢ de la activaci¨®n econ¨®mica sobre la base de las nuevas funciones: reparcelaci¨®n, nuevas f¨®rmulas de producci¨®n agr¨ªcola, recreativas, de ocio y deportivas. El segundo se centra en la gesti¨®n y participaci¨®n: implicaci¨®n de los organismos gestores, convenios, responsabilidad social corporativa, organizaciones no gubernamentales y asociaciones. El ¨²ltimo programa se refiere a la promoci¨®n y difusi¨®n de la huerta: imagen de marca, campa?as publicitarias, comercializaci¨®n...
En cuanto a las medidas concretas para la protecci¨®n de la huerta, la Consejer¨ªa de Territorio se ha fijado en cuatro ejes. El primero de ellos hace referencia a la puesta en marcha, a trav¨¦s del fondo de Equidad Territorial previsto en la LOT, de proyectos para la restauraci¨®n de la huerta a partir de las cuotas que paguen los municipios con mayor consumo de suelo, agua o emisiones atmosf¨¦ricas. Tambi¨¦n aplicar¨¢ los instrumentos de gesti¨®n territorial previstos en la legislaci¨®n (LOT y Ley del Suelo no Urbanizable) para recuperar espacios p¨²blicos de huerta para el disfrute colectivo. Adem¨¢s, los planes urban¨ªsticos impulsados por los municipios deber¨¢n incluir estudios de paisaje. En los municipios con huerta Territorio se propone instar a los ayuntamientos a que protejan tramos de la misma para aprobar su propuesta de Plan General de Ordenaci¨®n Urbana. El otro eje consistir¨¢, seg¨²n la previsi¨®n de Blasco, en orientar a trav¨¦s de la planificaci¨®n urban¨ªsitca, la ampliaci¨®n de los cascos urbanos sin que afecte a terrenos de huerta, especialmente a los de mayor valor productivo, ambiental e hist¨®rico.
Salvar 5.000 hect¨¢reas
Hasta el momento la huerta ha tenido una protecci¨®n formal en el planeamiento urban¨ªstico municipal, que ha sido reclasificado a medida que los ayuntamientos han requerido la ocupaci¨®n de ese suelo r¨²stico para darle un uso urban¨ªstico. Este es el modelo que prevalece y su principal inconveniente, reconocido por la Consejer¨ªa de Territorio, es la paulatina desaparici¨®n de la huerta y de su entorno socioecon¨®mico "sin una valoraci¨®n global y sin un marco general que encauce y limite este proceso".
Frente a este modelo tendencial existe otro "hiperproteccionista", que persigue, seg¨²n Territorio, "la congelaci¨®n del statu quo actual". A juicio de Blasco este modelo "implicar¨ªa una protecci¨®n extensiva a toda la huerta existente [las 27.864 hect¨¢reas circunscritas en el by pass], con independencia de sus diferentes valores y situaciones, as¨ª como un mantenimiento de las condiciones socioecon¨®micas actuales". Esta posici¨®n, desde su punto de vista, resultar¨ªa insostenible por la presi¨®n que producir¨ªa la expansi¨®n urban¨ªstica, "que quedar¨ªa cercenada en muchos a?os", y tambi¨¦n desde el punto de vista social y econ¨®mico "porque no se plantea la necesaria adecuaci¨®n de las actividades y usuarios de esta zona a las nuevas realidades y demandas sociales del ¨¢rea metropolitana".
Ante estos dos polos, Blasco plantea un modelo fundamentado en la integraci¨®n de la huerta en el desarrollo urban¨ªstico y territorial del ¨¢rea. Partiendo de la base de que casi la mitad de superficie de la huerta, por su situaci¨®n, dimensi¨®n, entorno y grado de fraccionamiento "es, en principio, de dif¨ªcil viabilidad", el consejero de Territorio considera que la cifra de entre 4.000 y 5.000 hect¨¢reas es "la m¨¢s aconsejable para su conservaci¨®n absoluta". "Suponiendo que el ritmo urbanizador de la ¨²ltima d¨¦cada se mantenga en el futuro, en apenas dos d¨¦cadas podr¨ªa recuperarse para el disfrute de la colectividad gran parte de la huerta metropolitana", asegura. El prop¨®sito de Territorio es que marco legal est¨¦ completo antes de final de a?o y ser vigente a mediados de 2005.
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