El azar de los notarios
El Colegio de Madrid justifica que se utilice el m¨¦todo de pensar n¨²meros para adjudicar los premios de un sorteo
Si al poner la televisi¨®n un d¨ªa para contemplar la retransmisi¨®n de un sorteo del cup¨®n de la ONCE o de la Loter¨ªa Nacional apareciera un se?or que fuera diciendo n¨²meros a medida que se le ocurrieran y a esos n¨²meros se les adjudicaran los premios en juego, es casi seguro que ambas organizaciones no sobrevivir¨ªan a tan curioso y antimatem¨¢tico m¨¦todo de sorteo. Sin embargo, as¨ª se realizan algunos sorteos, en cuyas bases figuran las palabras m¨¢gicas "ante notario", seg¨²n la contestaci¨®n enviada a una profesora de matem¨¢ticas que se quej¨® ante el Ilustre Colegio Notarial de Madrid por el m¨¦todo empleado en un sorteo. Para este sorteo, de ¨¢mbito nacional, convocado por Viajes Halc¨®n, se hab¨ªan distribuido nueve millones menos una de papeletas entre los alumnos que contrataron viajes de estudio en el curso 2002-2003.
Los premios consistieron en 21 viajes para dos personas a distintos destinos, de mayor a menor coste. [Los dos primeros premios eran a Cuba, y los ¨²ltimos, a Mallorca]. Para efectuar el sorteo, el notario, en su propio despacho y en presencia de una representante de la agencia de viajes citada, acot¨® mentalmente los n¨²meros por millones y fue diciendo los que se le ocurr¨ªan, hasta llegar a 21 n¨²meros, seg¨²n inform¨® ¨¦l mismo a su colegio y recoge el texto del acuerdo de ¨¦ste, de fecha 21 de octubre de 2003, en el que se archiva el expediente relacionado con la queja por no haberse apreciado "indicio alguno de que el notario no haya obrado con absoluta imparcialidad".
El resultado es muy curioso, como resalta la quejosa, Mar¨ªa Jes¨²s Rodr¨ªguez Mar¨ªn, profesora de matem¨¢ticas en La Laguna. El primer n¨²mero obtenido fue el 1 y, el ¨²ltimo, el 8.999.999, es decir, el primero y ¨²ltimo posibles. Adem¨¢s todos los n¨²meros van en orden ascendente, por lo que los n¨²meros m¨¢s altos perdieron de antemano toda posibilidad de obtener los mejores viajes. El segundo n¨²mero es igual al tercero pero dado la vuelta, y algunos d¨ªgitos y repeticiones -de dos en dos o de tres en tres- salieron mucho m¨¢s que otros.
Rodr¨ªguez Mar¨ªn no cree que en este sorteo haya existido ninguna irregularidad voluntaria por parte de la empresa ni del notario, pero se lleva las manos a la cabeza ante la incultura cient¨ªfica que subyace en todo el proceso. En cualquier sorteo aleatorio, explica, todas las papeletas deben estar presentes y tener igual probabilidad de salir premiadas, y debe de haber un protocolo que garantice que el sorteo se realiza mediante un mecanismo ajeno a la voluntad humana.
El acad¨¦mico de Ciencias y matem¨¢tico Ildefonso D¨ªaz cree que es grave que pasen estas cosas, porque indica un desconocimiento b¨¢sico por parte de la sociedad espa?ola. "Un sorteo implica azar, y azar implica igualdad de oportunidades", explica. "No se puede emplear un m¨¦todo que favorezca unos n¨²meros respecto a otros. Si las posibilidades no son las mismas para cada n¨²mero en juego, eso no es un sorteo". D¨ªaz recuerda adem¨¢s que, por ejemplo, el cero es un n¨²mero del que una persona -que no una m¨¢quina- tiende a huir como primer recurso, porque no lleva aparejada una representaci¨®n mental. Tambi¨¦n recuerda un caso mucho m¨¢s grave, el de un sorteo efectuado hace a?os por el Ministerio de Defensa para enviar reclutas a Bosnia, que se hizo en condiciones de desigualdad de oportunidades por falta de consulta del Gobierno a cient¨ªficos competentes. Ese tema lleg¨® al Parlamento.
El azar, sin embargo, s¨ª figuraba en las bases del sorteo de los viajes, pero no se especificaba el m¨¦todo a utilizar, y tambi¨¦n es curiosa la raz¨®n dada por el notario para decantarse por el de pensar n¨²meros, que, adem¨¢s, le convierten en arte y parte del proceso: "Justifica el m¨¦todo empleado en el hecho de la dificultad de emplear otros debido a la falta de medios facilitados por la empresa requirente", explica el Ilustre Colegio Notarial. El notario, por su parte, cree haber cumplido todos los requisitos de un sorteo al afirmar que, "a la vista de los medios de que dispon¨ªa, la elecci¨®n aleatoria (sic) de los n¨²meros por el propio notario reviste todos los requisitos de imparcialidad precisos para justificar la aleatoriedad (sic) del resultado".
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