"Hay que aspirar a m¨¢s"
Algo indescriptible debi¨® sentir Rafa Ben¨ªtez cuando los aficionados valencianistas corearon su nombre al t¨¦rmino del partido, en plena efervescencia por el ¨¦xito. De pronto, el entrenador, adusto, parco en palabras y en la expresi¨®n de las emociones, acusado por algunos de t¨¦cnico m¨¢s proclive al f¨²tbol industrioso que al art¨ªstico, al¨¦rgico a las grandes figuras, sal¨ªa agasajado por los hinchas y con una marca de las que otorgan pedigr¨ª: tres t¨ªtulos (2 Ligas espa?olas y una Copa de la UEFA) en tres a?os con el Valencia. Pero sus palabras no se salieron del gui¨®n establecido: "Lo agradezco sinceramente, pero lo hago extensivo al cuerpo t¨¦cnico, por tanto trabajo sin que tenga un reflejo a nivel popular".
Ni el futuro, ni el pasado eran objeto ayer de an¨¢lisis. "El futuro es esta noche y ya habr¨¢ tiempo despu¨¦s de plantearse otras cuestiones", respond¨ªa Ben¨ªtez zanjando una pregunta sobre su futuro. Tiene contrato hasta junio de 2005 y en las jornadas previas a la final, en pleno ¨¦xito, el t¨¦cnico no ha aflojado un ¨¢pice el pulso constante que tiene con la directiva: o le ofrecen un proyecto interesante o se va.
El ¨¦xito de los tres titulos en tres a?os, dos de un plumazo esta temporada, le produce un placer controlado: "Estoy orgulloso a nivel personal, pero hay que seguir aspirando a m¨¢s, a corregir aquello que no hago bien". Ben¨ªtez habla poco, pero claro, aunque ayer, en pleno comienzo del ¨¦xito europeo, no era cuesti¨®n de ahondar en viejas heridas. ?l ya se hab¨ªa sentido como "la bandera de los espa?oles peque?os, poco reconocidos en el extranjero" y satisfecho por haber triunfado como entrenador "sin haber sido un jugador de ¨¦lite", dos cuestiones que, como a otros, le hab¨ªan perseguido entre los cr¨ªticos. Ayer, el ¨¦xito le volv¨ªa hacer feliz, a aparcar ese tipo de cuestiones y a gozar el inmenso placer de "disfrutar del momento".
Pero tambi¨¦n estaba el partido, que naci¨® mal para el Valencia, muy atascado "porque ellos presionan mucho, son un equipo f¨ªsicamente muy fuerte y que saben pegarse al rival". Todo se aclar¨® en la jugada el penalti "que lo fue y, por serlo en una clara ocasi¨®n de gol, es expulsi¨®n" adem¨¢s le dio al Valencia "la ventaja en el marcador y la ventaja num¨¦rica en el campo".
Y dicho lo cual, fiel a sus principios, e interrogado sobre la no presencia de Aimar, la gran figura, en el once inicial, Ben¨ªtez ratific¨® su filosof¨ªa: "La suma de lo que hace cada uno es lo que nos hace fuertes. Antes de salir al campo ya incidimos en los que somos, un equipo, y por lo tanto ten¨ªamos que trabajar como bloque. Aimar a¨²n no est¨¢ del todo bien, y otro tendr¨ªa que sumar su trabajo al el resto".
Jos¨¦ Anigo, t¨¦cnico del Marsella, fue realista: "Nadie pensaba que pod¨ªamos llegar hasta aqu¨ª y lo logramos. La duda es qu¨¦ hubiera pasado de haber jugado 11 contra 11".
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