Lone Scherfig se aparta del 'dogma' para narrar un tri¨¢ngulo amoroso
La directora danesa asegura que su ¨²ltimo filme trata "del valor de las cosas sencillas"
L one Scherfig, nacida en Copenhague hace 45 a?os, sorprendi¨® en 2001 con Italiano para principiantes, una deliciosa comedia enmarcada dentro del movimiento dogma, ese estilo cinematogr¨¢fico directo y realista auspiciado en 1995 por cuatro directores daneses, entre ellos Lars von Trier. En su trabajo m¨¢s reciente, Wilbur se quiere suicidar, que hoy se estrena en Espa?a, la directora abandona el dogma y regresa a los esquemas cl¨¢sicos para contar una historia de amor -o, mejor dicho, dos, y hasta una tercera de amor fraternal- a trav¨¦s de un complejo tri¨¢ngulo rom¨¢ntico. "Volver al lenguaje cinematogr¨¢fico cl¨¢sico me ha permitido un cierto distanciamiento respecto a los personajes; contada en plan dogma, la pel¨ªcula hubiera sido demasiado lacrim¨®gena", se justific¨® Scherfig la pasada semana en Barcelona, donde present¨® -tambi¨¦n lo hizo en Madrid- su filme, junto al actor escoc¨¦s Jamie Sives, el Wilbur que da t¨ªtulo a la cinta.
Este personaje, desilusionado con la vida, intenta suicidarse varias veces sin ¨¦xito. En cambio, su hermano Harbour (el ingl¨¦s Adrian Rawlins) es su opuesto: optimista, buenazo y empe?ado en alegrarle a Wilbur la existencia. Hu¨¦rfanos y treinta?eros, viven en Glasgow, donde han heredado una ruinosa librer¨ªa de viejo. Todo cambia cuando Harbour conoce a Alice (la tambi¨¦n escocesa Shirley Henderson), madre soltera que trabaja como limpiadora de noche en un hospital, y se enamora de ella.
Humor
Los mimbres con los que la cineasta danesa trenza la trama de Wilbur... son los del melodrama, pero ella los adereza con un particular humor, "porque permite que el espectador se identifique con los sentimientos de los personajes, sin caer en el sentimentalismo". Scherfig reconoci¨® que su filme contiene ingredientes de una comedia televisiva, "sin profundidad". "A menudo, tambi¨¦n se puede llegar al fondo de las cosas desde lo superficial". La directora, por ejemplo, no aborda el asunto del suicidio de forma expl¨ªcita. "No ten¨ªa ni ganas ni intenci¨®n de inspirar a nadie", argument¨®. "Adem¨¢s, Wilbur... trata sobre el valor de la cosas sencillas, sobre la importancia de compartir los momentos con la gente que queremos, y, de vez en cuando, hacer un extra e ir a cenar a un restaurante chino".
Jaime Sives, que por su papel obtuvo el pasado a?o el premio al mejor actor en el Festival de Valladolid y m¨¢s tarde fue nominado a mejor actor europeo, explic¨® que le fue muy ¨²til leer el gui¨®n antes de saber qu¨¦ papel se le propondr¨ªa. "En una segunda lectura, me di cuenta de que Wilbur ten¨ªa muchas capas, y esa versatilidad fue lo que me interes¨® transmitir".
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