Los funcionarios tienen un plan

El pasado mes de abril concluy¨® el plazo para acudir al plan de empleo de los funcionarios de la Administraci¨®n General del Estado, que comprende a 530.000 trabajadores. Se han presentado siete entidades financieras y, tras una primera criba, se elegir¨¢ a la ganadora entre cuatro finalistas. Una revoluci¨®n para los planes de empleo en Espa?a, aunque partir¨¢ con poco m¨¢s de 50 millones de euros.

En noviembre de este a?o se producir¨¢ la primera aportaci¨®n anual al plan con el 0,5% de la masa salarial de los funcionarios

En noviembre de 2002 se firm¨® el acuerdo para crear un gran plan de pensiones para los funcionarios de la Administraci¨®n General del Estado. Un colectivo que, junto a fuerzas armadas y Guardia Civil, re¨²ne a cerca de 530.000 trabajadores que disfrutar¨¢n, de esta forma, de un complemento a sus pensiones p¨²blicas. Eso s¨ª, deber¨¢n estar en activo a fecha de mayo de este a?o y tener m¨¢s de dos a?os de permanencia.

Ser¨¢ el Estado el que haga cada a?o las aportaciones a este plan de empleo, y antes del 1 de noviembre de este ejercicio deber¨¢ ingresar unos 55 millones de euros -unos cien euros por funcionario-, que se corresponden con el 0,5% de la masa salarial de este colectivo. Eso s¨ª, no hay compromisos a m¨¢s largo plazo y cada a?o la cuant¨ªa que alimente este plan ser¨¢ fijada en la Ley de Presupuestos Generales del Estado. Luego, se distribuir¨¢ a cada funcionario "seg¨²n los criterios fijados en las especificaciones: 75%, en funci¨®n del grupo profesional, y el 25%, en raz¨®n de los trienios devengados, una cuant¨ªa fija por trienio devengado igual para todos los grupos", seg¨²n informaci¨®n facilitada por el sindicato Comisiones Obreras. La cifra de partida es muy peque?a si se compara con los 24.265 millones de euros que hab¨ªa en planes de empleo a marzo de este a?o.

Se trata de pensiones privadas y su gesti¨®n ha salido a concurso, al que se han presentado siete entidades (Caser, Banco Popular, Banco Sabadell, Caja Madrid, BBVA, Fonditel-Banesto y La Caixa). En los pr¨®ximos d¨ªas, la Administraci¨®n har¨¢ una selecci¨®n de cuatro entidades y est¨¢ previsto que antes del verano se d¨¦ el ganador. Tal y como indica Luis Pe?a, consejero delegado de Fonditel Pensiones, el importe de partida -55 millones de euros- no es muy importante, pero abre un campo interesante por el elevado n¨²mero de part¨ªcipes del fondo. "No debemos olvidar que los grandes planes de pensiones del mundo, los que cuentan con mayor patrimonio, pertenecen a funcionarios", explica.

Comisiones

Fuentes de las entidades concursantes tampoco creen que este negocio sea un pelotazo, ya que los planes de empleo tienen limitadas sus comisiones y gastos (administrativos, compraventa de valores en los mercados, etc¨¦tera), que nunca podr¨¢n superar el 2,5% anual del patrimonio. No obstante, el coste de la gesti¨®n ser¨¢ una de las claves en el proceso para elegir una u otra entidad.

A la aportaci¨®n que anualmente haga la Administraci¨®n a este plan de empleo se puede sumar la que realicen los propios funcionarios si desean tener una pensi¨®n privada m¨¢s holgada. Una opci¨®n que es voluntaria, pero que supone un atractivo a?adido para las entidades financieras que compiten por gestionar este plan. Tampoco es incompatible con que el funcionario tenga su plan o planes individuales.

Este plan es de tipo empleo de promoci¨®n conjunta, donde son promotores los departamentos ministeriales y sus organismos p¨²blicos. En ¨¦l se integran el personal funcionario, estatutario y laboral de los Departamentos Ministeriales y Organismos Aut¨®nomos, de las entidades gestoras y servicios comunes de la Seguridad Social, y de otros organismos p¨²blicos. Asimismo, se incorpora el personal de la Administraci¨®n de Justicia, personal de las Fuerzas Armadas, de la Guardia Civil y de la Polic¨ªa Nacional.

Como cualquier plan de pensiones, ofrece ventajas fiscales para el part¨ªcipe y las propias caracter¨ªsticas de este producto. Los part¨ªcipes s¨®lo podr¨¢n recibir el dinero en caso de jubilaci¨®n, fallecimiento o invalidez, aunque se prev¨¦ su disposici¨®n en caso de enfermedad grave y desempleo de larga duraci¨®n.

Asimismo, las aportaciones desgravan en la base imponible del impuesto sobre la renta, aunque cuando se percibe el dinero tiene consideraci¨®n de renta del trabajo, es decir, como salario diferido. Tambi¨¦n se contempla la posibilidad de renunciar al plan, y se establece un plazo de dos meses desde la comunicaci¨®n de la puesta en marcha del plan. Considera la opci¨®n de mover el dinero del plan a otra Administraci¨®n p¨²blica o empresa si el part¨ªcipe se marcha.